𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐈𝐗

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Dos meses, dos meses había mantenido ese secreto, Minnie parecía cada vez más preocupada, igual Dumbeldore, pero simplemente no podía decir nada, no era capas de hacerlo, Harry estaba mal, y sabía que si Albus supiera donde estaba lo enviaría con su familia.

No tenía idea de quien cuidaba al pequeño, pero simplemente no soportaba estar lejos de él, al fin se había ganado la confianza de Harry, y no quería alejarse de él, y bueno, Weasley parecía estar al borde del pánico todo el tiempo.

Sabía que Weasley y Granger lo buscaban sin parar, en especial Wealsey, se sentía mal por eso, pero no podía acercarse y simplemente decir "Hola Weasley, yo tengo a Harry, no te asustes, está bien" eso sería tonto —Buenos días, Harry — Severus se acercó a su cuna con una pequeña sonrisa.

El pequeño tardo en abrir los ojos, pero cuando lo hizo lo miro y levanto los brazos esperando que lo levantara, Harry ya estaba muy bien en cuanto a sus heridas, pero la poción que estaba tomando en ese entonces le había quitado la habilidad de usar sus piernas.

Razón suficiente para que Severus comprara una alfombra para que el pequeño no se lastimara al arrastrarse por el suelo cuando estaba jugando con su gato negro de juguete o armando los rompe cabezas muggle que le había comprado.

El pequeño era muy inteligente, tenía una gran habilidad para poder armar cosas y palabras, siempre usaba un chupete verde que disfrutaba mantener en la boca, ese día lo tenía libre así que intentaría pasar todo el tiempo posible con Harry.

Sentó al pequeño en su silla nueva y le acerco un plato de avena mientras él desayunaba unos Hot Cakes con crema batida, su favorito —¿Quieres jugar algo hoy? — Harry lo miro y asintió, con sus ojos brillantes, pero aun sin ninguna expresión en el rostro.

Terminaron de comer y Severus llevo al pequeño al baño para poder lavarle los dientes, al terminar vistió al pequeño con una camisa verde y unos pantalones negros, no le puso zapatos, al pequeño le gustaba estar sin ellos.

E igualmente donde lo dejaba estar no estaba sucio así que no había riesgo de nada, Severus se quitó los zapatos para pasar por la alfombra y se sentó al lado de Harry, sosteniendo un rompecabezas.

Paso aproximadamente media hora hasta que el pequeño termino, no era uno difícil, el niño tenía 3 años, no podía darle algo de mil piezas para que llegara y se las comiera todas, aunque lo dudaba mucho.

El pequeño siempre traía su chupete y no se lo quitaba nunca, ni siquiera por curiosidad a saber cuál es el sabor de algo raro que tiene enfrente, Severus acerco una caja con cosas dentro, estaba intentando enseñarle más números mayores a los 10 que se sabía.

Pero decidió mejor enseñarle empezando por lo que el pequeño sabía —Muy bien, Harry, ¿qué número es este? — Dijo enseñándole el número 2 en una pequeña tarjeta, Harry levanto la mano y señalo 2 dedos.

—Perfecto, ahora, ¿qué número es este? — Severus saco una tarjeta que tenía el número nueve, Harry se miró las manos unos segundos y levantó las dos mostrando el número correspondiente —Correcto, Harry

—Ahora, ¿cuántos años tienes? — El niño lo miro unos segundos y levanto la mano, mostrando cinco dedos —Harry, ¿tú tienes cinco años? — Pregunto Severus con una sonrisa, intentando corregirlo.

Pero el niño asintió —¿Qué? — El niño miro su mano, paso un dedo contando los dedos que tenía en la mano y la volvió a levantar, aun mostrando los cinco dedos —¿Tienes cinco años? — Harry asintió e intento arrastrarse hacia el mayor.

Severus lo tomo entre sus manos y lo sentó en sus piernas, ¿el niño tenía cinco años? No, era imposible... Era... Muy pequeño, de pronto sintió como el pequeño apoyaba su cabecita en su pecho.

El profesor de pociones paso sus manos delicadamente por su cabello, uno que había logrado desenredar luego de 3 horas y se recostó en la pared, el niño se estaba quedando dormido hasta que de pronto alejo su cabeza.

El pequeño lo miro y volvió a recostar su cabeza, Severus siguió acariciando su cabeza, hasta que en cuanto su mano bajó a su nuca el pequeño se volvió a alejar —¿Qué pasa, pequeño? — Harry lo miro y paso su mano por detrás de su cabeza.

—¿Te duele? — Severus miro preocupado a Harry, este solo asintió —Ven aquí — Severus lo cargo y lo llevo al baño para poder verlo mejor, puso al pequeño en el lavamanos frente al espejo y agacho su cabeza para poder verlo mejor.

La cantidad de pelo que tenía no lo dejaba ver bien, pero paso su mano por un lugar y cuando la alejo se encontró con una mancha roja en su dedo, sangre, esa no era buena señal, Severus tomo su varita y alumbro con ella el lugar.

Había un pedazo de algo ahí, y se miraba terriblemente infectado ¿Cómo no se había dado cuenta? ¡¿Llevaba dos meses con eso?! Al instante tomo unas pinzas y con mucho cuidado quito ese objeto.

Era algo blanco, tal vez de alguna taza o algún plato, pero no tenía idea de que era, reviso la cabecita del pequeño una vez más y cuando ya no tenía nada le puso una poción —Ya esta, pronto ya no te dolerá

—La próxima vez que te duela algo tienes que avisarme, hazme una señal o algo, si no ¿Cómo voy a ayudarte? — El pequeño bajo la cabeza triste, pero Severus la levanto y beso su nariz —Calmate, ¿qué tal si dormimos un poco?

Severus cambio a Harry con un hechizo y luego lo acostó en su cuna para luego ponerle el chupete en la boca —Dulces sueños — Dijo y dejo a su gatito de juguete a su lado para luego salir de la habitación.




°°°¡Hola! Espero que les haya gustado el capítulo, perdón por no haber publicado nada últimamente, pero es que mis clases empezaron y no me ha dado tiempo, tengan lindo día°°°

•967 palabras•

•17-01-2023•

Niño de Cristal  |Severitus|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora