𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐗𝐗𝐗

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Draco se encontraba mirando a la nada, estaba sentado en su cama mientras tocaba su brazo izquierdo... Ese día le pondrían la marca tenebrosa, sabía que Severus iría ese día, quería hablarle, necesitaba hablar con alguien.

No se lo había contado a sus amigos, en realidad cuando estaba con ellos hacía lo posible para no pensar en eso, y de igual forma ellos siempre lo hacían sonreír.

Siempre con sus bromas, todos siempre los miraban serios y casi sin ninguna emoción, pero la verdad era que ellos vivían divirtiéndose, o al menos eso era antes.

Pansy aún hacía lo posible para sacarle una sonrisa de alguna forma, haciendo bromas con Potter o haciendo bromas a los Hufflepuffs, Blaise siempre contando regalos extraños que le llevan los esposos de su madre, como una abeja rosada sin alas que uno le había traído de India.

O Theo, que en vez de hacer algo solo miraba a Longbottom, algo que le daba una excusa para molestarlo, y mucho.

Pero desde ese día nada sería igual, ahora estaría trabajando al cien con el-que-no-debe-ser-nombrado, y eso le partía el corazón, en serio no quería unirse a él.

Lo iba a hacer por voluntad propia, tenía que hacerlo para salvar a sus padres, tenía que hacer algo para que no los mataran, tenía que estar ahí para poder llevar la culpa si algo pasaba, y así, salvar a sus padres si había un problema.

—Draco, ¿puedo pasar? — Pregunto una voz muy conocida para él por el otro lado de la puerta —¿Severus? Sí, pasa — Draco se recostó y dejo de ver su brazo.

—¿Sabes que no tienes que hacer esto verdad? — Dijo mientras se sentaba en el borde de la cama, mirando preocupado a su ahijado —Lo tengo que hacer, así puedo salvar a mis padres — Dijo molesto, nadie iba a hacer que cambiara de opinión.

—Mgh... — Harry hizo un pequeño ruido para acomodarse en la capucha del mayor, donde lo había escondido con un hechizo, ya era muy normal para el llevarlo ahí si tenía que salir de Hogwarts, solo si tenía que salir de Hogwarts.

—¿Qué fue eso? — Pregunto Draco sentándose, mirando confundido a su padrino, era imposible que el haya hecho ese ruido... No... No era posible ¡¿Los rumores era ciertos?! —¡¿Tienes un niño ahí?!

Draco se levantó y se alejó un poco del mayor, mirándolo preocupado —No, no puede ser, dime que no es cierto lo que dicen en Hogwarts — El mayor suspiro y con mucha delicadeza se quitó su capa y con un hechizo la hizo levitar para poder sacar al pequeño.

—No. Puede. Ser. — Draco miraba al niño como si fuera un monstruo —Que asco — Dijo sin más, alejándose más del pequeño —Draco. No digas eso — Pero el rubio lo ignoro, ¿esa cosa ahora iba a llevarse el cariño de su padrino no era así?

—Draco, todavía te voy a querer igual, siempre lo he hecho... James solo tiene tres años, ¿acaso viste algún cambio mío durante estos años? — Pregunto, obviamente no iba a haber algún cambio, al niño lo tenía desde hace meses.

Técnicamente le estaba mintiendo al menor, algo que no le gustaba hacer —No... Pero desde que empezaron los rumores estuviste mucho más tiempo en tu oficina y nunca me subiste puntos en clase — Dijo ofendido.

—Espera, ¿James? — Dijo, poniendo una mano en su pecho —Ni el nombre de mi padre, me ofende, ¿qué? ¿Ahora Sirius Black es el padrino? — Pregunto, dramatizando mucho la situación —Eres igual a tu padre...

—Y no es cierto que no te subí puntos en clase — Severus se volvió a poner la túnica y cargo al pequeño con cuidado —Si es cierto, esa cosa ahora es tu prioridad — Draco trato de no levantar la voz mientras se daba la vuelta ofendido.

Niño de Cristal  |Severitus|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora