Darte un beso. || ♫︎

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Amarte como te amo es complicado.
Pensar como te pienso es un pecado.
Mirar como te miro está prohibido.
Tocarte como quiero es un delito.


No sabe cómo, no sabe cuándo, no sabe dónde fue, que se enamoró de ese fastidioso monocromático hiperactivo. Aunque suene muy loco e incluso imposible, se logró a enamorar de él. Era muy meloso, animado, sonriente, es lo que menos me gustaba de ver en la gente ¿cómo se pudo?

Y es que no entendía, siempre en su mente mantenía al odioso de Cross ahí, sonriendo y diciéndole que era el mejor jefe que haya tenido; aunque no sabe si eso se lo decía a todos porque Cross había sido botado de muchos trabajos. Da igual.
Pero eso subió de tono de repente, ya no lo imaginaba sonriendo con ternura, ahora todo era más… ardiente y Dioses, lo deseaba… ¿por qué?

A veces chocaban miradas, parecían saber lo que el otro les decía sin siquiera mencionar palabra alguna, se conocían tanto en este corto tiempo, descubrieron mucho más allá que una amistad podría revelar. Se sentían extrañamente conectados y sus miradas se lo decían.

Pero llegó a un punto en el cual no quería controlarse, quería acercarse más a Cross, tocar su hermosa cintura, recorrer con sus manos sus lindos muslos, tocar su deseoso pecho y besar esos dulces labios que tenía. Lo deseaba tanto, quería de una vez tocarlo pero tenía que mantenerse firme, lamentablemente.

Ya no sé qué hacer
para que estés bien
Si apagar el sol para encender tu amanecer

Ya no sabía cómo actuar. Y es que su amistad comenzó muy lento, despacio, sin apresuros. Porque Cross tenía pequeños problemas con su hermano Epic y siempre venía hacia él; su jefe, para hablar sobre esto y raramente lo aceptaba. Normalmente lo botaría enojado porque no era de hablar de temas que no le importan y ni le interesa saber, pero con él fue diferente.
Trató de ayudarlo como pudo y así eran algunos días. Tanto que se formó unos pequeños lazos de confianza entre ellos y cuando veía a Cross cabizbajo lo llamaba a su oficina para preguntarle: “¿qué ocurrió?” sabiendo perfectamente a lo que se refería.
Nunca se lo tomó de broma lo que afrontaba su empleado, puesto que al contar los problemas se le veía demasiado afectado. Su hermano se drogaba y siempre venía de mal humor hacia Cross y por eso comenzaban a pelear, además que Epic nunca aceptaba la ayuda que éste le daba y Cross siempre resultaba lastimado o herido emocionalmente.
Pero no sabía qué más hacer, quería verlo feliz y que tuviera una buena vida con su hermano, porque Cross se lo merece. Donde los días muestren un brilloso y radiante sol al amanecer que le decía que todo saldría bien el día de hoy, eso quería para él, amaneceres perfectos.

Falar en portugués
aprender a hablar francés
o bajar la luna hasta tus pies.

Y desde que hablaron sobre los problemas, acordaban algunas veces en verse fuera del trabajo para distraerse y olvidar todo aquello que les hacía daño.

Sentía esa rara conexión nuevamente con él y parecía no ser el único, Cross también sentía eso pero no lo mencionaba. Se sentían cómodos con el otro y mostraban que no querían separarse cuando la noche llegaba. Y es que no sabía cómo mantener una conversación y esa era la razón por las cuales siempre se debían ir a casa, aunque Nightmare no quisiera y Cross tampoco. Si era posible le hablaría en todos los idiomas; portugués, francés, inglés, alemán, ruso para decirle que no se vaya y que se quede un rato más con él acompañándolo en las frías noches. Y cuando el monocromático leía su mirada se quedaba, viendo la hermosa luna iluminar las calles.

#15 || ❌Cortos CrossMare/NightCross🌑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora