Peligrosa Debilidad

Capitulo 11

Rhaenyra estaba tan aturdida por la insistencia de Laenor que cerro su casillero con fuerza. Ya se encontraba lo suficientemente molesta porque Daemon no hubiera vuelto a su hogar desde la última semana como para soportar la voz de su primo.

"No puedo ir" dijo por tercera ocasión en ese día.

"No debes estar hablando enserio"

"Lo hago, Daemon  me matara si pongo un pie fuera de dragonstone sin su consentimiento"

"Entonces nunca llegues"  contesto parándose enfrente de ella "Por los dioses Rhaenyra, es la mejor fiesta de disfraces que habrá en el año"

"Oh por supuesto que si, asistir al propio club de Daemon mientras estoy fugitiva de su control suena bastante lógico"

"¡Ese es el maldito punto!" replico tomándola por el brazo para evitar que entrara en su clase. "Él nunca pensaría que te encuentras en su propio territorio"

"Estás loco" reprendió completamente harta sin ocultar su pésimo humor.

"¡Tan solo piénsalo!  Es la oportunidad perfecta para que quites tu cara de mujer de la tercera edad mal follada.

Rhaenyra resoplo. No era una mujer de la tercera edad y mucho  menos lo último. No podía ser mal follada cuando Daemon ni siquiera termino  de consumar lo suyo. Él solo se marcho dejándola tan caliente que apenas logro no pedirle un turbio favor a Harwin. En ese acalorado momento lo observo como un pedazo de carne, si bien no tenía ni una pizca de rasgos valyrios y parecía más humano que un dios, también aparentaba poder quebrantar sus huesos de formas indecorosas.

"¿Debo tomar el silencio como tu confirmación?" pregunto pasando una mano frente su cara.

"Aun cuando lo hiciera, sería imposible librarme de la seguridad"

"Pensé que dirías eso" respondió sonriendo "Ya me encargue de  encontrar un sujeto lo suficientemente bueno conduciendo y con claros signos suicidas"

"¿De qué mierda hablas?"

"En medio del trayecto rumbo Dragonstone hay una pequeña tienda, puedes decirle que necesitas ir al baño con urgencia, yo que se suena convincente. Dudo que Daemon permita que alguien te siga ahí"

"Eso suena astuto" admitió sonriendo.

"¡No me interrumpas! Después de que entres encontraras una ventana frente al lavabo, tendrás que trepar y bajar por ahí. El hombre que antes te mencione se encargara de trasladarte"

"¿Qué se supone que usare de ropa? Adivino que no pensaste en ese pequeño detalle."

"De nuevo te equivocas, Laena no ira y se encargo de escoger tu ropa"

Rhaenyra silbo por lo bajo. Negarse ya no era una opción.

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"Dos malditos almacenes cayeron Corlys" dijo cansado después de experimentar la misma situación por segunda vez  en la semana.

"¿Crees que gano algo traicionándote?" pregunto molesto, observando cómo trasladaban la mercancía por segunda ocasión. "Los otros diez pudieron caer de no haberte dicho"

"Sabes bien de que hablo" espeto cansado "Alguien no está manteniendo la boca cerrada"

"¿Cuál es tu  solución?"

"Formaremos grupos y les daremos una versión distinta del paradero, fecha, hora ..." el  timbre de su teléfono lo interrumpió y Daemon masculló por lo bajo. "Dije que estaría totalmente ocupado" sentencio molesto.