El cometa de mi deseo

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Gracias - pronunció Rusia.

Ambos pasaron a su habitación y este cerro la puerta tras ellos.

Perdona por meterte en esto - pidió agarrando sus brazos con fuerza, estaba fingiendo estar bien pero ciertamente le dolía el cuerpo por completo.

México le sostuvo notando que estaba temblando.

Que sucede? - pregunto.

Estoy en cinta - aclaró - es mi primera vez y por lo que se esto es muy normal, pero todo duele - soltó con frustración lo último apretando sus brazos sin pensarlo.

Tranquilo - le abrazo tras esa palabra en una voz reconfortante.

Le cargó para llevarlo a la cama.

Entonces es por lo que no me regresaste la llamada? - pregunto México.

Realmente fue por qué lo olvide, se me vinieron muchas cosas encima - confesó - no tenía cabeza ni siquiera para lo que estaba pasando conmigo - aún tenía ganas de llorar por la sensación de impotencia que aún tenía en su pecho.

Es normal, Chile se puso igual al principio - comentó - no se en tu caso pero si necesitas cuidados especiales puedo apoyarte en eso - propuso - conozco a una buena psicóloga y psiquiatra que puede ayudarte - le sonrió.

Es raro que alguien hable tan suelto de esas profesiones - admiró.

Con Chile aprendí a ver todo eso y es lo más normal del mundo aunque muchos lo crucifiquen - aclaró

Puedo saber por qué? - pregunto Rusia sorprendido, pero México negó.

Mejor explícame por qué me tuve que convertir en madre Cuca*? - pregunto señalando su vestuario.

Para que pudiéramos vernos - aclaró Rusia apenado.

Lo dices por Alemania? - señaló la puerta, pero él negó.

Democratica llegó después yo lo decía por mi padre - aclaró

La persona que se oía molesta en la llamada - pensativo antes ese recuerdo.

Rusia asintió en un tono vastante decaído.
- últimamente no me deja hacer nada más que no sean sus planes - confesó - es demaciado estresante -

Y por qué te estresa? - hablo sentándose a su lado.

Porque nada de lo que quiere para mí es lo que yo quiero - soltó Rusia - no quiero esta vida, no quiero esa boda, no quiero a este hijo!! - grito histérico agarrándose su cabello con desesperación.

México le abrazo sin decir nada y le acarició su cabeza suavemente.

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Por otro lado democratica estaba preparando un té caliente, mientras esperaba que la infusión estuviera lista tomo unas gotas de su abrigo y miró a ambos lados cerciorando de que no hubiera nadie viendolo.

Vacío unas 8 gotas en su té y lo removió con cuidado, tomo otra cucharada de azúcar y la mezcló rogando que no tuviera un sabor amargo que le hiciera sospechar.

Un ves listo se quedó pensando en lo que estaba apunto de hacer ^^^ si no lo hago puede hacerle daño a poli ^^^ pensó al ver el agua de la taza aún removerse.

Tampoco puedo dejar que federal me arrebate lo que he trabajado - dijos decidido pero no tomaba en sus manos aquella taza.

Perdóname Rusia - dijo agachando la cabeza.

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Entonces ese no es el Alemania con el que fuiste a los condominios ese día - pregunto asombrado - acaso disocia de personalidad? - trataba de entender.

No... Él... Ellos son gemelos - explicó Rusia - el Alemania que conociste ese día era Alemania federal y de ellos dos es el más chico - explicó - según su padre el revoltoso de la familia - México solo se rió ante lo dicho.

Y esté? - pregunto aún riendo.

El es Alemania democrática - explicó - la mano derecha de su padre - dijo algo serio.

No son muy unidos verdad - indagó México.

No ellos realmente... No sé cuándo se distanciaron, recuerdo que cuando éramos niños ellos eran inseparables - dijo dudoso.

Ya veo que estás mejor - sonrió México - si no te importa quiero mis brazos de vuelta - pidió amablemente pues aún lo tenía abrazado pero Rusia estaba recostando se y podría caer sobre él.

Perdona - estaba apenado - me decías por teléfono que tienes dudas - cambio de tema.

Si - dijo animado mientras se sobaba sus brazos por lo entumecido - argentina comenta que Alemania le proporciono dinero a Chile para que se deshiciera de su hijo - comento con seriedad - aparte de tratarlo bastante mal al respecto -

Qué? - se sorprendió - Ale no haría nada como éso y menos viniendo de él - dijo re valorando las cosas - y si se deshizo de su hijo? - pregunto animado

Que es esto?! - entro molestó urss.

Buenas tardes señor soy el enfermero - extendió la mano hacia él pero este le miró incrédulo.

Debe estar bromeando - dijo molesto urss hacia Rusia quien por el tono se encogió sobre si mismo.

México retiro la mano molesto por la grosería que le hicieron.

Democratica entro tranquilo aún escuchando los reclamos de URSS hacia Rusia y las maldiciones hacia su hermano.

Toma te ayudará mucho - le dejo con tranquilidad el té sobre la mesa.

Rusia le agradeció con la mirada pero estaba a segundo de romper en llanto.

Por qué me trata como si no estuviera, está hablando del bienestar de su hijo y su futuro nieto - alegó México molesto por el drama que estaba montando aquel soviético mayor.

Por el bien de ellos es que no quiero que estés serca de nadie - alegó molestó.

Usted no le ayuda, solo lo estresa y si se pone mal es por su culpa, todo lo que está haciendo está dañanadole de alguna manera ya sea directa o indirectamente, no es normal que esté tan decaído y más en los primero meses - alegó poniéndose al tu por tu dándole cara al grandote.

Por qué si le sacaba una cabeza de altura Urss a México.

Lárgate de mi casa!! Quien te creas para hablarme así - estaba a segundos de perder la cabeza.

Me voy! - contestó - por hoy, por qué no quiero causarle problemas a un inocente - señalando a Rusia.

Tras esto se fue sin antes pegarle en el hombro a urss.

Yo también me tengo que ir - dijo democratica - cuídate mucho -

Por qué te vas? - pregunto Rusia sorprendido.

Poli, quedé de pasar por ella y su amigó al salón - respondió tranquilo enseñando su teléfono.

Sin poder evitarlo se quedaron solos en la habitación y urss no hacía más que gruñir, reclamar y maldecir ante lo que rodeaba a Rusia.

Al principio le dió miedo después de un rato se aburrió del comportamiento de su padre.
Se incorporó y empezó a beber de aquel té que le preparó su futuro cuñado.

Té de rosas - dijo tranquilo al recibir el aroma en su nariz.
Ciertamente se había relajado pero algo le empezaba a incomodar.

No le dió importancia y se levantó de la cama para poder encontrar un lugar en su misma casa donde pudiera oír sus propios pensamientos.

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*Refugio Esteves Reyes, popularmente conocida como “Madre Cuca”, fue la primera enfermera del país.