El cometa de mi deseo

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Me dieron de alta afortunadamente y me dieron una noticia que jamás esperé.

Embarazo? - pregunté al doctor - pero está seguro? - estaba incrédulo.

El médico asintió de nuevo ante mi insistente pregunta.

Cuanto tiempo tengo? - tenía que saberlo.

El doctor estaba por responder - a jugar por sus estudios... -

Chilito eso realmente importa? - se rió nervioso.

Si - contesté.

Entonces el se puso a mi lado mirando al doctor.

El doctor le miraba insistente así que volteo a verle pero no encuentro nada extraño.

Realmente muy poco tiempo apenas fue detectable y afortunadamente fue así la situación - informó con una sonrisa llamando mi entera atención.

Entonces que procederá? - pregunto ante el silencio de su parte.

Alimentarse bien, cuidarse más de los cambios de temperatura - empezó a decir - que no se inche, se le suba la presión o se sienta mareado -

Entonces son los mismo cuidados que en el primer embarazo? - pregunto curioso

Sea el primero o el quinto son el mismo procedimiento y el mismo desgaste en el cuerpo - explicó amablemente - de aquí en adelante usted solo mirara como va creciendo su vientre -

Sin más se despidió el doctor pero entonces yo solo mire a México
- que pasará entonces entre nosotros? - pregunte en voz alta.

El me miró preocupado - lo ideal es que nos casemos - me soltó - aquí la duda es tú - se fue incandose - quieres casarte conmigo? -

Claro que sonreí eso no lo esperaba pero aún no contestaba.

Me quedé pensando bastante tiempo la situación, a decir verdad es algo que me emociona pero ahora se que Alemania está de regresó y...

Chilito no es por apúrate pero el piso está frío - me dijo sacándome de mis pensamientos.

Mex yo... No... Perdóname - contesté agachando la cabeza.

Qué? - se levantó algo brusco y le tomaron las rodillas - por qué? - me preguntó sentándose a mi lado.

Antes de que estuviéramos en esta situación tu me habías dicho que no querías salir lastimado - le comento y el asintió.

Yo... Tienes razón no lo eh superado y verlo no me ayudó para nada - explicó.

Aún tienes la esperanza que regresé? - me preguntó mirándome a los ojos.

Se que es estúpido pero - empiezo a decir pero el me toma del mentón.

Entiendo - me comentó - sabes me encanta esa sonrisa en tu rostro - me dice acariciando mis labios - aún así no quitaré el ojo del renglón, me are cargo -

No es - trato de decir pero de nuevo me calla con un dedo en los labios

Es necesario, es mío - me aclara mientras toca mi vientre.

Esa acción me enternece, cómo me hubiera gustado ver esto con Alemania y Dominick.

Por qué lloras? - me preguntó mientras limpia mis lágrimas con sus dedos.

Al no tener respuesta solo me abraza con fuerza, yo me aferró a él como si estuviera por caer de un precipicio.

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Han pasado unas semanas desde lo que sucedió entre Rusia y Alemania. Cosa que le preocupaba al germánico que el soviético no le respondiera las llamadas.