Merlina Addams llega a la gran academia de "Nunca Más" en dónde conoció a muchas personas muy particulares con las cuales paso sus más increíbles y tenebrosas aventuras. Pero ¿será ésto también el inicio de una nueva historia de amor? o solo será ot...
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Durante todo el día su cabeza había estado dando vueltas acerca de ese mensaje y el emisor del mismo. Pero por más que lo intentaba con todos sus sentidos, no encontraba alguna persona o alguna explicación para la situación. Había dejado todas sus pertenencias en su cama, no tenía ánimos para desempacar en este momento, al final solo había puesto su maquina de escribir sobre la mesa y había salido al balcón para observar el oscuro cielo, con la intención de que la meditación le ayude a aclarar su mente y resolver el enigma.
Pero ya habían pasado más de dos horas, y no lo lograba, hasta empezó a llover con fuerza sobre ella, pero poco le importaba. Lo único que quería era tener su respectiva respuesta, para saber como atacar a quien sea que se haya atrevido a desafiarla. ¿Qué acaso no sabían que ella había terminado aquí por intento de homicidio? ¿Quién es tan idiota como para querer terminar en ese estado?.
Aunque al final no le sorprendería descubrir, que el que la estuviera acosando, sea alguien similar a Tyler, alguien que no tenga razón alguna para temer y más bien tenga todos los recursos para atacarla.
Si no hubiera sido por Enid, quien salió al balcón a tan solo dejarle un abrigo sobre los hombros porque su instinto de buena amiga era algo que no podía evitar; ella seguiría encontrando pistas en su cabeza para continuar investigando los días siguientes.
Entró a la habitación con algo de dificultad dado a que su ropa estaba empapada por la gran tormenta que estaba ocurriendo afuera.
- OH NO NO NO! a mi lado de la habitación no vengas si estás mojada- soltó un chillido Enid, que estaba recostada sobre su cama, y había fruncido el ceño al tan solo verla- podrías mojar a mis peluches.
- Ahora me diste una razón para ir- respondió con burla
- Ni te atrevas- dijo poniéndose de pie- no olvides que ahora si muerdo
- Si, lo recuerdo claramente- asintió- y...¿ como vas con eso?- preguntó volteándose para no sonar interesada.
- Amm pues regular- respondió la rubia y ladeo la cabeza fijando su mirada en algún objeto sin importancia mientras su cabeza solo se centraba en los recuerdos de su verano- fui con mi familia a muchos bosques, para intentar adaptarme, tú sabes, pero aún es algo complicado.
- Todo se facilita con la práctica- dijo cortante- ahora vengo- dijo inesperadamente después de haberse cambiado de ropa.
- ¿A donde vas? Yo te acompaño- dijo dando saltitos y empezando a buscar sus zapatos.
- Sabes que me gusta estar sola- dijo cortante, dándose de la vuelta para encararla.
- Pero quiero salir, quiero caminar un poco- dijo optimista y soltando una risita, ¿ por qué todos estaban felices hoy? ¿tenía dibujado un payaso en la cara o que?
- Pero está lloviendo- dijo tratando de buscar excusas para que se quedara- se te va a arruinar tu peinadito de muñeca.
- Lo dice quien tiene un par de trenzas la mayoría del tiempo- dijo amarrándose los cordones- ¿No has pensado en hacerte un cambio de look?
