Capítulo 20 Conquistar/ Lapso de tiempo

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A Madara no le importaba las vidas de los demás, pero llevaba días que su conciencia no lo dejaba en paz, la cual carga miles de muertes, el capricho de Hashirama por Sayuri no era correcto. Dulce Amanecer, no merecía ser juego de nadie, a tenido que lidiar con las miradas de curiosos y a recibido malos tratos de su clan. No era justo que alguien juegue con sus sentimientos y destroce su corazón con una mala jugada de amor. Una madrugada pensó de tal modo que se dio la tarea de advertirle de la manera más sutil sin poner el nombre de Hashirama en su boca. Buscó el momento correcto para encontrarse con ella. Aquel día la vio caminando con pasos apresurados hacia el río. La observó por un corto tiempo antes de aparecer por detrás. La forma en cómo ella observaba a la pareja ninja en su privacidad dio a entender que pensaba como cualquier otra mujer, deseando ser amanda por un hombre.

Madara no respondió al beso de Sayuri, de hecho la tomó de los hombros y la alejó. Su capacidad de análisis la situación fue rápida porque fue un accidente por la forma cómo apareció de la nada detrás de la gitana. Sayuri simplemente se dio la vuelta sin tomar precaución de la distancia entre ambos por la voz de él. Aceptar un beso que no iba dirigido a él sería como robar un beso de esos labios que pertenecen a alguien más. Madara sabía sobre las clases en privado con Hashirama, y cómo aprovechaba el acercamiento para conquistar a la gitana sin que esta se diera cuenta, sabía este detalle porque él se lo hacía saber. Y por lo visto en su cuello, Hashirama obsequió otra joya preciosa lo que significa que le hizo saber sus sentimientos hacia con ella. Sayuri lleva la joya en su cuello lo que también significa que tomó bien la confesión de su enamorado.

Por otro lado, Sayuri ni siquiera recordaba que salió de la mansión de Hashirama con el collar en su cuello. Lo que tenía frente era una escena incomoda sumamente vergonzosa. Ella pudo alejarse de Madara en cuanto lo vio de frente, pero algo se apoderó de ella, llevándola a pegar sus labios con el líder Uchiha. La vergüenza que sentía superaba a cualquier otra accidente.

Madara estaba ahí por una razón, advertirle sobre cierta persona sin mencionar el nombre. Pero antes dejaría en claro una cosa para evitar malos entendidos.

—Sayuri, no mal intérpretes este encuentro imprevisto, estoy aquí para hablar sobre alguien que debería cuidarte —mientras Madara hablaba en voz baja, miraba en tiempos a la pareja ninja que se alejaba de la orilla del río.

Apenada por lo que acababa de pasar, sentir la textura de los labios de Madara, provocó que reaccionara indignada y alterada.

—¡¿Interpretar qué?! ¡Fue un accidente! ¡Por qué quieres hablar si no tenemos nada de qué hablar porque no somos nada!

—Tienes razón, no hay nada de que hablar entre nosotros, pero hay una cosa que debes saber.

Simplemente deseaba irse y esconder su venganza. Las palabras de Madara no hacían efecto en una Sayuri avergonzada y alterada. Conforme el tiempo pasaba más se hacía difícil ver a los ojos a su una vez salvador.

—Pues habla, tengo cosas por a hacer.

Un poco sorprendido por la actitud de la gitana, pues nunca había visto hablarle de tal modo, Madara prosiguió a decir:

—No confíes en los buenos tratos de los demás, a veces las personas llevan el disfraz del cordero buena del rebaño sobre la del lobo.

—No entiendo lo que tratas de decir.

—La realidad está hecha de dolor, sufrimiento y vacío. Nada puede ser tan bueno como se ve, cuídate de las personas de las que te rodeas.

Sayuri no entendió a quiénes se refería. No a hecho nuevos amigos y tampoco a tenido malos encuentros con las nuevas personas de la aldea. Devuelta en las caravanas del clan Jipushī, no pudo dejar de pensar en lo que Madara le había dicho. Se siente confundida. Antes de inquirir de quiénes hablaba este se fue sin decir más. No fue tras él, no después de embarazoso accidente. Estaba arrepentida de juntar sus labios como imanes a uno labios fríos que no aceptaron sus labios. Casi fue como el beso que Hashirama le dio a ella en la tarde.

Pétalos De Sangre (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora