VII.

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CHAPTER SEVEN
with you by my side
september 23th, 2022.




Julián pasó diez minutos enteros oyendo a Enzo reírse de él. Estaba a menos de otro segundo de eso para salir de la cama; agarrarlo a piñas y luego irse a atormentar a Aimar para que convenciera a Scaloni de cambiarle su compañero de concentración.

—Pará de reírte, boludo —espetó Julián. La risa de Enzo aumentó de volumen por su agresividad—. Sos tremendo hijo de puta, no sé ni para qué te conté esto.

—Ya, ya —dijo Enzo, en un intento patético de tranquilizarse. Una mirada a la expresión de Julián bastó para desatar su estruendosa risa de nuevo—. ¡Dale, Araña! ¿Qué querés que te diga? Es demasiado chistoso. De todos los que salimos de River, te imaginé a vos como el último en ponerla y procrear mini-arañas.

—Cerrá el orto —ordenó. Por la forma en que se crisparon los labios de Enzo, no iba a detenerse de descansarlo pronto—. ¿Podés conectar dos neuronas por una vez y darme un buen consejo acá? ¡Voy a perder la cabeza!

—¿Pero qué consejo esperás vos de mí? —Enzo se encogió de hombros, dándole un sorbo ruidoso a su mate—. Hacete cargo del pibe, animal. No me creo enserio que dejaste a tu jermu en silencio por una semana.

—No la dejé en silencio. Y no es mi jermu.

—¿Ah no?

Julián se sintió enrojecer.

Su reunión con Lizzie no acabó para nada cómo Julián pensó que acabaría. Ni en sus más extraños y desconcertantes sueños habría esperado que ella le mostrara la foto de una prueba de embarazo positiva, que ella le dijera que Julián iba a ser papá. Mucho menos se esperó el ultimátum de Lizzie, la crueldad con la que lo miró cuando lo dijo.

«Lo único que sabrá de ti es que fuiste un tipo al que conocí en un club, y al que nunca me volví a encontrar de nuevo».

Por supuesto, Julián hizo lo único coherente: pasó enloqueciendo la semana siguiente a la noticia. Hasta sus compañeros del City se dieron cuenta de que algo ocurría; aunque Erling era lo suficiente amable y tenía el suficiente tacto para no preguntarle nada y asegurarse de que los demás tampoco lo hicieran. La cabeza de Julián había estado dando vueltas entre fantasías del nene en gestación y fantasías crueles; en las que Julián nunca marcaba el número de Lizzie y nunca respondía por su hijo. 

En las crueles, Julián se encontraba de casualidad a Lizzie unos diez años en el futuro. Era una Lizzie acompañada de un pibe con los ojos de Julián, su cabello morocho y su nariz; pero el pibe lo miraría a la cara y no lo reconocería, y cuando trataba de acercarse, el nene huiría asustado de él.

KARMA ━━ julián álvarezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora