¿Amor? - Pedri, Ferran y Gavi

¿Jude?

NARRA FERRAN

Jude temblaba encima de mi cuerpo, no hablaba y ni siquiera abría los ojos.

Le estaba acariciando el pelo y su mano estaba entre la mía, me apretaba con fuerza.

Lloraba en silencio y se me estaba partiendo el corazón de verla así.

Hubiese matado a ese imbécil.

Lo hubiese hecho.

Y no pensaba dejar esto así.

Pero ahora lo importante era llegar a casa y que Jude estuviese bien.

Pero el miedo de que le hubiese hecho algo más grave me carcomía por dentro, y me dolía.

Pedri y Gavi murmuraban algo en la parte de delante.

A Gavi le saldría seguramente un ojo morado y Pedri estaba conduciendo a tal velocidad que se notaba lo nervioso que estaba con todo eso.

Le habían hecho daño a nuestra niña y no podíamos estar bien ninguno en esos momentos.

Nuestra niña.

La miré, aún temblando y aferrada a mi cuerpo.

Tan pequeña a mi lado que parecía demasiado frágil, aunque yo sabía que no lo era en absoluto.

Pedri aparcó y yo cogí a Jude en brazos, saliendo del coche con ella.

No abrió los ojos.

Subimos y la tumbé en el sofá.

Gavi la envolvió con una manta.

- Joder, yo me cago en toda su puta madre del maldito imbécil este, ¡mírala! ¡está rota tío! -gritó Gavi con las manos en la cabeza.

- Nos encargaremos de él, pero tienes que calmarte, mucho es que lleves un puto ojo morado. -le contesté nervioso.

Pedri se había arrodillado delante de Jude, que seguía con los ojos cerrados.

- Cariño, míranos, por favor, estás en casa, a salvo, con nosotros. -le susurró de forma tranquila.

Jude abrió los ojos lentamente y le miró, luego me miró a mi y finalmente a Gavi.

Vi como las lágrimas inundaban sus ojos y se encogía.

- No, Jude, todo está bien, ¿qué ha pasado? estás a salvo ahora. -le hablé agachándome también a su lado.

- Intentó desvestirme, pero le golpeé un par de veces, me rompió la ropa y me llamó zorra, dijo que quería hacer lo mismo que el novio de mi hermana. -murmuró con la voz rota y temblorosa.

- Joder, es que voy a destrozarlo. -gruñó Gavi caminando por el salón.

- Cariño, nos encargaremos de él, te lo prometo. -le susurró Pedri.

Ella asintió y volvió a acurrucarse entre la manta, cerrando los ojos de nuevo.

- Vamos a dejarla descansar, tu y yo nos encargaremos de esto con Xavi mañana por la mañana, esto no puede volver q pasar. -le hablé a Pedri.

- Xavi podrá encargarse de Harry perfectamente, pero Jude no puede quedarse sola. -contestó Pedri.

- Yo me quedo aquí, no pienso dejarla sola. -habló Gavi llegando a mi lado.

- Tienes que ponerte algo en ese ojo, tío. -señalé.

- Ven, tiene que haber algo en el congelador que te pueda servir. -le habló Pedri y los dos desaparecieron en la cocina.

Me senté al lado de Jude y ella movió su cuerpo para acurrucarse conmigo.

Mi corazón trastabilló con el gesto de ella.

La quería muchísimo, estaba enamorado por completo y no sabía como decirlo.

Ella me miró.

- Si jugásemos ahora al videojuego ese, me dejarías ganar, ¿verdad? -preguntó con un tono divertido, intentando sonreír un poco.

Esta mujer era increíble.

- Las veces que quisieras con tal de ver esa sonrisa y esos ojos achinarse. -besé su frente y ella se acurrucó de nuevo.

- La próxima vez ganaré más partidas. -murmuró y cerró los ojos de nuevo.

Tenía que estar destrozada y agotada y aún así intentó aliviar la tensión del momento.

- ¿Jude? -pregunté para ver si estaba dormida, casi en un susurro.

- ¿Mmm? -hizo un ruidito.

- Te quiero. -murmuré contra su cabeza.

Vi como sonreía.

- Yo también te quiero, a los tres. -murmuró.

Su respiración se volvió más pausada y tranquila.

Se había dormido.

Cerré los ojos y envolví su cuerpo con el mío.

Protegiéndola.

Queriéndola.

Ninguno de los tres íbamos a dejarla sola y mucho menos a irnos de su lado o a estar dispuesta a apartarnos de ella.

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FERRI ES UN SOL BONITOOOOO

EL PROXIMO ES GAAAVIIII