Vengo a Vengarme

Prologo

Elizabeth
2 días antes.
- No dejame, no me molestes ¡no!
Me despierto de golpe toda sudada miro el despertador las 5 am. Otra vez esas malditas pesadillas. Sus burlas me persiguen pero ya tendré la oportunidad de devolvérselas una por una.

Nathan
- Nathan mira ahí viene - me dice Juan. Miro a Elizabeth tan linda como siempre caminando con sus brazos repletos de libros. Decido acercarme y molestarla. No se porque lo hago realmente pero me divierte ver su bonita cara cuando se enoja.
- Pero miren a quien tenemos aqui, ¿Te ayudo con los libros? - ni bien dicho esto, se los tiro al suelo. Al lado mio aparece Judith que empieza a burlarse de ella. En sus ojos se asoman lágrimas reprimidas, me mira y sale corriendo. Así no lo planeaba, siempre termino arrepintiendome. Decido perdir disculpas y consolarla pero enseguida Judith me agarra y me lleva lejos.
- Nathan vuelve al presente, ey amigo - vuelvo a la realidad y tengo a Steven al frente mio. Estamos en mi oficina hablando sobre un proyecto muy importante. El Clark Project, vengo queriendo este proyecto por años y estamos estudiando a la competencia.
- Señor le traigo la información de la empresa que me pidió - Luisa me deja los papeles y espera paciente para otra orden
- Gracias Luisa ya puedes retirarte.
Agarro la carpeta y empiezo a leer, Carter hermanos, una empresa muy fuerte en la onda de la arquitectura al igual que nosotros y también una gran competencia. Al ver la foto del dueño me doy cuenta que es femenina. Ojos azules, cabello marrón, un rostro angelical, es muy parecida a Elizabeth. Desecho la idea al instante, a Elizabeth no le gustaba la arquitectura, la odiaba.
- Es muy linda ¿Puedo acostarme con ella? Quiero hacer cosas malas - dice socarrón, no se porque ese comentario me molesta, Steven es un mujeriego de primera no me extraña que diga cosas como esas. Se ha acostado con la mitad de mis asistentes y por eso tuve que despedirlas.
- Tu y tu amigo tienen que quedarse quietos ¿Me escuchaste?
- Como el jefe diga - saca una pelusa imaginaria de su pantalón. En dos días es la reunión, hay que decidir que tácticas vamos a tomar.
- Ya nos encargaremos de eso.