Vengo a Vengarme

Muchas Preguntas

Una semana despues.

Una semana paso después de lo ocurrido. Para mantenerme distraída he trabajado sin parar he ido tantas veces a casa de mis padres que perdí la cuenta. No he ido al bar de Max por miedo a encontrarme con Nathan. Sin embargo el bar venia hasta mi. Max se ha quedado unas cuantas noches conmigo al igual que Clari. Los llantos han parado de a poco pero hay lágrimas que faltan por caer.

Ni siquiera pense en como destruir a Judith, recordar su lengua venenosa me hace mal. Como antes.

- Eli tu hermano esta al teléfono - me avisa Clari.

- Hola hermano ¿como estas? - en las ultimas semana Cristina tuvo que hacer reposo por su embarazo y Paul se tomo los días con ella.

- Bien mejor. Llamo para preguntarte como estas tu.

- Yo estoy bien.

- No te creo.

- Te digo que estoy bien.

- Mira interrogue a Clari y ella como la buena empleada que es me dio información.

- Eso es chantaje.

- Chantaje mis bolas ya me cuentas todo lo que pasa por esa cabecita tuya.

- No quiero contártelo a ti.

- Auch - suspira dramáticamente - bien si no queda otra. Voy a llamarla a mama.

- ¡No! No lo hagas. Te cuento todo todito - digo asustada. Mama no puede entrarse de que estuve en una relación me mataría por no contarle.

- Nos vamos entendiendo.

- ¿Te acuerdas de Nathan? - pregunto tímida.

- Dime que con ese bastardo no Eli.

- Si,con ese bastardo si.

- ¿Que no te lo advertí? - pregunta enojado.

- Que yo recuerde no... o puede que si - no vamos a retroceder a semanas antes, solo no le demos la razón.

Escucho que suspira, se que esta tratando de calmarse para no gritarme. Cuando eramos chicos y peleabamos el siempre tenia que tomarse un tiempo para no gritarme o sino mama lo retaría, esa era la parte mas graciosa.

- Sabes es tu vida y lo entiendo yo.. yo solo como el hermano que soy quería volver a protegerte de él.

Guau no me esperaba algo así pensé que diría algo menos razonable.

- Te quiero hermano - digo con ternura.

- Yo también hermana.

Corto y recuesto mi ahora pesada cabeza en el escritorio. Cierro mis a doloridos ojos por un momento.