~-Epílogo-~

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No fué solo aquella noche donde comenzó todo. Fueron noches las que marcaron sus vidas. Una mujer cerrada a la vida misma, conociendo a la persona opuesta que la impulsó a hacer todas esas cosas que ella dijo que nunca volvería a hacer. Como por ejemplo amar.

Esa mujer creyó conocer el amor y se convenció de que era lo peor que podía existir en la vida. Pero el amor lo conoció con él, donde lloraban juntos, reían juntos. Disfrutaban juntos. Se amaban en silencio y se ponían en su lugar cada uno cumpliendo la ley de la vida que dice que nunca vas a poder ser feliz con el amor de tu vida.

Puede que sea cierto. Puede que no. Pero ambos estaban sufriendolo como nunca lo pensaron.

Un hombre inconsciente, viviendo por vivir, sin ganas, sin sentido. Obligado a una vida que no era la que quería, alejado a la persona que por primera vez le enseñó inconscientemente el significado del amor

Igual ella pero con circunstancias distintas, pero no podía desistir. Tenía que volver a renacer porque ahora no estaba sola.

<Lucerito!!! No te duermas!>

Ella luchaba por no cerrar sus ojos, algo que era casi imposible

<Ayúdame Lucero lo estás logrando>

Su esplada se despega de la cama y grita con todas sus fuerzas. Apretando sus dientes con fuerza, sentía que estaba muriendo lentamente y la vida sin proponérselo se le devolvió al cuerpo cuando a lo lejos se escuchaba un pequeño llanto de bebé

<Lo lograste!!! Felicidades guerrera>

Un beso de su hermano en su frente y observar el pedacito de ser que había traído al mundo, una lágrima nubló su vista y una sonrisa le dio las fuerzas para seguir viviendo.

....

Pero no acaba ahí. Aún habían cosas que aclarar, injusticias que resolver, deudas que saldar y nombres que limpiar.

¿Cuando?

<Muy pronto... pronto volveré a renacer de mis cenizas creadas Aquella noche>

🖤

Aquella Noche 😈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora