𝓔𝓶𝓫𝓪𝓻𝓪𝔃𝓪𝓭𝓪 𝓭𝓮 𝓾𝓷 𝓲𝓭𝓲𝓸𝓽𝓪 |𝓓𝓻𝓪𝓬𝓸 𝓜𝓪𝓵𝓯𝓸𝔂|

5. Malfoy Mansion

Esme

Suspiré y me levanté de la cama algo cansada ya que no pude dormir bien anoche. La idea de ir a visitar a los Malfoy en dos semanas no me emociona para nada, menos aun cuando el señor tenebroso está conviviendo en la misma casa con ellos, ese mismo que intentó matarme al igual que a mí hermano cuando nacimos. De solo pensar en verlo me da escalofríos, pero por otro lado una voz en mi cabeza me dice que es lo necesario. Draco es el padre de mi hijo/hija, eso convierte a Lucius y Narcisa Malfoy en sus abuelos. Tienen derecho a saberlo.

Me levanté de la cama cuando vi la hora en mi reloj. Si no me apuro llegare tarde a la clases de pociones y no quiero escuchar a Severous quejarse sobre que me aprovechó que es mi padrino y bla, bla, bla.

Al ya estar lista salí de la sala en común viendo que Draco está parado frente a esta, moviéndose de un lado a otro, nervioso así que me acerqué a él, preocupada

-¿Que pasa Draco?- pregunte intrigada
-Cambio de planes- dijo pasando su mano sobre su cabello- anoche cuando estaba por dormir me di cuenta de que no sería lo mejor llevarte a casa, sabes quién está ahí y podría hacerte daño así que simplemente mande una carta a mis padres, la contestación debe de llegar cuando bajemos a comer-

Yo sonreí ante la preocupación de Draco y el gesto que tuvo al haber enviado la Carta, lo que agradezco ya que me quito de encima el peso de pasar en el mismo ambiente que Voldemort.

Volviendo a lo que importa, Draco está más que nervioso, caminando en línea recta y murmurando cosas así que después de tranquilizarle con un «no te preocupes, seguro estarán encantados» (lo cual sé que muy probablemente sea falso) lo encamine hasta el gran comedor donde me senté en la mesa de Slytherin al igual que ayer.

Al ver la mirada enojada de Harry y el cómo se acerca a nosotros agarre el puente de mi nariz algo irrigada. No estoy en este momento para soportar sus celos de hermano así que simplemente le ignore cuando llegó, pero se puso muy insoportable así que le aleje un poco para poder hablar

-No es momento para tus berrinches Harry- dije irritada- Draco acaba de decirles a sus padres de mi embarazo por carta para que no tengamos que ir a su casa...-
-¿Porque no quieres ir a su casa?-

Enseguida la imagen de Voldemort se me pasó por la cabeza. Ya bastante con que lo había visto cuando lo de la Cámara de los secretos hace unos años. No quiero volver a verlo jamás en mi vida

-Por nada, ya sabes que no me gusta Lucius Malfoy- mentí
-Debes estar nerviosa- dijo Harry dejando de lado por un segundo los celos, aunque manteniendo cierto tono enfadado
-Mucho- dije apoyando mi cabeza en su hombro- sé que Lucius rechazará al bebé, me estoy preparando mentalmente para ello, pero Draco... A él le afectará más que a mí... Temo que al final...-
-Eso que temes no pasará Esme- dijo Harry levantando mi cabeza- aunque me cueste admitirlo Draco te ama, más de lo que crees-
-Gracias- dije sonriendo- siempre sabes que decir-

Y con eso abracé fuerte a Harry en un abrazo, pero una mirada sobre mi espalda me hizo separarme de él y darme vuelta viendo que Draco mira nervioso en mi dirección. Tal parece que ya tiene respuesta de sus padres.

Me acerqué al antes mencionado y vi el sobre en su mano para después darle apoyo moral y lograr que abriera el sobre pudiendo leer el contenido

«No puedo creer lo que estás diciéndome Draco, estoy totalmente avergonzado de tu comportamiento saliendo con una traidora como Potter, quien tampoco es del todo sangre pura lo que sabes no es de mi agrado así que no esperes mi aprobación. A partir de ahora te manejas solo»

Suspiré ante lo cruel que puede llegar a ser Lucius con su propio hijo y me di vuelta para abrazar a Draco quien está reteniendo las lágrimas, fingiendo estar bien cuando no lo está. Se perfectamente lo que es eso y lo malo que puede ser para uno.