Mommy | Minayeon G!P - Bilogía

07

Eché un mordisco a cupcake que Lisa preparó para mí. Ella estaba sacando un pastel de chocolate que también me encanta y estaba algo caliente. La veía desde la isla y reía cuando echaba una maldición por lo caliente.

Lamí mis labios por esa deliciosa crema que tenía como decorativo el cupcake y volví a morder. Lisa colocó otra bandeja de galletas y al lado de ésta el pastel de chocolate calentito.

—A mamá le dará un infarto —reí ante su comentario.

Si que le daría un infarto. "Mucha azúcar engorda" Pero era imposible negarse a algo tan rico.

—Deberias aprender con algo salado. Así mamá comería más de lo que preparas —recomendé y solo torció el gesto.

—No haré eso, ni por que sea mamá —respondió masticando el postre.

—Sabes... —tragué saliva, humecté mis labios y suspiré. ¿Como debía decirle sin necesidad de mencionar a esa mujer?. Lisa se centró en mi y los nervios me abordaron— Cené con alguien.

—Lo supuse. Tus amigas me dijeron que estabas con un tal Jackson follando —mencionó riendo bastante divertida por mi mueca.

El inexistente Jackson.

—Es Marco. Y... habla mucho. Pero eso no viene al caso. ¿No te ha ocurrido que te paralizas cuando estás frente a alguien, como si el habla se te fuera? —dejé de mirar el pastel y subí la mirada a ella, quien estaba atenta a lo que decía. Nada venía al caso, porque no tenía nada que ver una cosa con la otra. Pero no sé cómo sacarlo al tema.

Parecía pensarlo unos segundos cuando ladeó su rostro, mirando hacia sus manos. Frunció el ceño y torció el gesto.

—Bueno...  ¿Como si fuese muda? —asentí— Mmm, pues, solo una vez. Cuando conocí a una mujer en un bar hace un mes... Me hizo palpitar el coño.

—No lo pedí tan explícito, obscena. —rodó los ojos  con diversión.

—La santa. Quién le da consejos a sus amigas de cómo chupar una polla. —mis mejillas enrojecen por eso y le lancé una galleta para que no siguiera.

Se supone que es un secreto lo que le digo a ellas. ¿Se lo dicen a todo el mundo?. Que vergüenza.

—¡Basta! ¿Quieres que papá nos escuche?

—Papá no está. Además, algún día va a entender que necesitamos follar. —comentó con obviedad.

Las dos soltamos a reír por nuestras ocurrencias siguiendo con nuestro aperitivo en un silencio que no era incomodo y que me agradaba.

—¿A quién viste que dejó sin palabras?

Mi cuerpo se tensó. El momento que tengo que buscar una excusa perfecta. El algún momento se lo diré, y quiero, pero la vergüenza no me deja. Además, si le digo como la mujer se me insinuó se va a enojar. Y no me molesta, pero esa mujer le da clases y puede afectarle por algo que me ocurre a mi.

—Myoui... Mina —solté entre dientes, apretando mis puños. Y también podía decir la verdad a medias.— Es intimidante.

—Oh, hermanita. Eso es normal —comenta con obviedad. 'No lo es cuando me calienta el cuerpo al punto de hacerme desmayar'.— La profesora Myoui es alguien... Mmm, de personalidad arrogante. Y es lo que desprende. Es algo normal que en el primer encuentro ocurra eso.

'A mí me ocurrió tres veces'. ¿Quiere decir que aún no supero la impresión? Negué rápidamente.

—Es muy cruel y fría. También es insoportable. No se cómo papá le agrada alguien así —mencioné incrédula. Mi querida hermana analizaba mis gestos e hice una mueca cuando su mirada se entrecerró.