Extra 04 - Desquite

680 55 2
                                    


Su cuello sonó cuando lo torció. ¿Cómo podía cambiar su humor en un segundo gracias a esa pequeña bipolar?

Bajó las escaleras con calma, poco le importaba que no fuese su casa para andar descalza. Tomó un cigarrillo que estaba sobre la mesa donde se encontraban los dueños de la casa y lo encendió, dando una calada para calmar la furia que había surgido de pronto.

—Llevatelo. —ordenó a quien estaba esperando órdenes al lado del hombre que quería cortar su brazo por tener la osadía de golpear a lo que es suyo.

Fue bastante fácil drogarlos para que cayeran dormidos. Creyó que lo notarían, pero son tan confianzudos con ella que sabía no iban a dudar de beber de algo que ella trajo con "amabilidad".

Amabilidad sus huevos. Esa palabra no la conocía muy bien, y era bastante estúpido como su amigo se lo creyó.

Estaba totalmente indiferente a lo que había hecho aún cuando la esposa no había hecho nada.

Bueno, no iba a llevarsela a ella también, pero necesitaba que no viera como se llevaba arrastrando a su esposo. Él, era una cosa. No iba a formar un escándalo porque Joung sabía lo que Mina podía hacer por mínimo una cosa que le molestara. Su esposa es otra porque sería un verdadero dolor de culo para Myoui

Las probabilidades de que le importaba lo que había hecho eran mínimas, o se podrian decir inexistentes. Quizás fuese funcionado un veneno, pero no sería igual.

Si, no negaba que anteriormente tenía a su amigo casi como un hermano mayor por las cosas en las cuales debían estar su familia, pero nunca lo estuvieron y solo estaba Im Joung dándole los mejores deseos.

Era un gran amigo. ¿Cómo fue que cambió tan abruptamente? Desde que le dejó claro que su hija le pertenecía. Y no es que fuese cambiado el agradecimiento que tiene hacia él, porque eso no se le puede negar.

Lo que sucede es la forma en que lo tenía. Él ya no era ese hermano mayor decente y recto que la guió par que mejorase, él era un hombre extraño que no sabía cómo definir.

—Mi señora, está todo listo.

Salió de la casa por la puerta trasera -con un andar bastante tranquilo- mientras le daba una o dos caladas a su cigarrillo. Subió al auto y comenzó a desplazarse a su lugar favorito.

A decir verdad, no había planeado exactamente lo que iba hacerle, pero si sabía las maneras que podía duplicar lo que él le había hecho a Nayeon.

Ese rostro no expresaba lo que a Myoui le gustaba. Esa mirada se veía triste. Y se fijó que no le gustaba tampoco. La tristeza no era algo que toleraba.

Claro está, que ella no se fijaba que era quien causaba miradas así frecuentemente a las chicas que trataba como juguetes, quienes se hacían ideas equivocadas, ciertamente.

Eso era la mayoría.

—Cuelguenlo.

Tomó la colilla del cigarrillo casi apagado y la llevó. contra la piel de su nueva víctima, quien apenas se removió por estar inconciente.

Había descubierto algo insignificante, que podía perdonar sin ningún problema porque ella podía resolverlo con un poco de dinero que fácilmente podía conseguir. Pero ahora se lo echaría en cara como excusa por lo que le hizo a su coneja.

—Im Joung, eres un maldito hijo de puta—masculló con enojo cerca del oido, golpeando directo su vientre.

Escuchó un quejido salir de esa boca y retrocedió un paso, echando su cabello hacia atrás para no dispararle ahí mismo.

Mommy | Minayeon G!P - Bilogía Donde viven las historias. Descúbrelo ahora