1 x 10- La tortuga de jade

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Era un nuevo día en el instituto y nos encontramos con Adrien llegando al instituto bastante tranquilamente. Este empezó a ver por todos lados hasta que pudo a ver a Nino en un sitio escribiendo algo, cosa que le llamó la atención al rubio y este fue a donde se encontraba el moreno.

— ¡Hola!

— ¡Oh hola! — esto pillo al parecer un tanto desprevenido al moreno, que decidió ocultar lo que estaba escribiendo con vergüenza.

De esto Adrien se percató, por lo que, con cierta inocencia, le pregunto.

—Oye Nino, ¿Qué estabas escribiendo?

Nino no supo que decir en ese momento, se puso colorado y a desviar nerviosamente su mirada a otro lado, hasta que no le quedo de otra que decírselo.

—Veras, me gusta alguien y le estoy escribiendo una carta de amor, esperó que le guste si la llega a leer.

— ¡Oh, qué bonito! ¿Cómo se llama la persona que te gusta? — preguntó ilusionado Adrien al escuchar esto. El rubio por la ilusión tomo la mano de Nino, cosa que al moreno solo le provocó que sus mejillas se pusiesen rojas.

—No me gusta decirlo en voz alta, me causa bastante vergüenza. — contesto Nino ante esto.

—Oh, entiendo. — hablo Adrien, dejando de tomarle las manos a Nino un poco avergonzado, se le dibujaron al rubio unos ligeros coloretes por aquello.

Nino dio una media sonrisa ante esta, para él, adorable reacción del rubio, sintió por unos momentos su corazón ir rápido, pero intento que eso no saliese a la luz. Se sentía extraño porque sabía que para de donde venía, era muy raro, su forma de amor que él procesaba no era correcta para el Islam, pero no podía evitarlo. Ocultaba lo que realmente sentía por pudor y para no deshonrar a la familia, no quería deshonrar su fe.

En eso Adrien vio a Nino, ya un poco menos nervioso y le hablo.

—Pues consigue a esa persona que tanto amas, lánzate y dile lo que sientes.

Nino se sorprendió un poco, dio una ligera sonrisa y le contestaría.

—Si... Tienes razón, ¿Por qué no? Gracias por las palabras Adrien.

En eso vieron como Kim, junto con Nathaniel y Luka llegaban a allí y los 5 empezaron a hablar amenamente. El dia, al contrario de otros, iba muy tranquilo, no habría ningún tipo de ataque de akuma o amok por todo el dia, cosa que sería extraño pero tampoco lo tomarían como algo muy importante.

La tarde después del instituto para Adrien fue básicamente un dia normal para él, clases de chino, clases de piano, fotografías para ciertas revistas... Y ya cuando cayó por la noche, estaba quemado.

—Como odio todo lo que hago— hablo Adrien, se encontraba en ese momento tumbado en la cama mirando al techo.

El chico llevo sus manos a la cabeza, y Plagg apareció viéndole mientras estaba flotando allí.

—Creo que te puedo dar una idea para desahogarte. — hablo el pequeño ser oscuro.

— ¿En serio? ¿Cuál? — cuestiono el rubio.

—Pues es fácil, te transformas en Chat noir y sales de aquí, son las tantas de la noche, tú padre estar acostado al igual que la petarda de secretaria que tienes y disfrutas un poco de Paris para conocerlo.

Esta idea puso un tanto nervioso al muchacho.

— ¿Escaparme? ¿Pero y sí mi padre me descubre?

En eso Plagg puso su pequeña manito en el hombro del muchacho.

—Sí no lo intentas, nunca lo sabrás.

Miracle (Temporada 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora