Beautiful Lie- Izuocha

El plan de Izuku

𝕭𝖊𝖆𝖚𝖙𝖎𝖋𝖚𝖑 𝖑𝖎𝖊

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Una a una, iba contando las monedas que tenía guardadas en su- ahora rota, alcancía de cochinito, necesitaba acumular 250,000 o estaría frito. Pero entremos en contexto, ¿Por qué estaba sacando sus ahorros?. Bueno, déjame te cuento.

Izuku Midoriya, un joven que había tenido la dicha de nacer con el pan bajo el brazo, dicho de otra manera: en una familia de buenos recursos monetarios. Paso infancia feliz, llenó de amor y todas las cosas materiales que podría desear, sin embargo al ser hijo único, sus padres cometieron el error de malcriarlo.

Con forme fue creciendo, Izuku se hizo a la idea de que no tendría porque trabajar, sus padres eran prácticamente ricos y siendo él hijo único, heredaría todo ese dinero; así que, ¿Por qué trabajar?. Terminó la escuela, pero no se preocupó por buscar un empleo o por adquirir más conocimiento.

Sus días los pasaba en casa, durmiendo, viendo televisión o en la alberca, tomando el sol; mientras que las noches las pasaba en el casino, jugando póker, juego en el que era todo un experto. No había nadie que le pudiera ganar…o eso creía.

Esa noche, como las anteriores, había tenido buena racha ya tenía 100 mil en la bolsa; podía haberse ido tranquilamente, pero apareció él. Un hombre de traje negro, de cabello azabache y con un parche en el ojo izquierdo, pidió jugar con el peliverde e Izuku no se negó…ese fue su gran error.

Aquel hombre, resultó ser mejor jugador de lo que se pensaba y terminó dejando al peliverde sin ningún céntimo.

──¡Una más! ──. Pero el pecoso no se rendiría tan fácilmente, estaba dispuesto a recuperar lo que había perdido.

──Pero ¿qué dices? ──. Decía aquel hombre, contando el manojo de billetes que acababa de ganar. ──Ya no tienes ni un peso, ¿cierto?. ¿Qué apostaras entonces? ──.

──250 mil──. El hombre mayor levantó su mirada ante las palabras del joven, ¿acaso ese chico traía dinero escondido?.

──¿250 mil?, y ¿Dónde están esos 250 mil exactamente? ──. Preguntó casi burlándose.

──No necesito mostrártelos──. Atacó el pecoso. ──Esta vez, estoy seguro que voy a ganar──. La seguridad en su mirada, hizo sonreír de manera burlona al tipo frente a él.

──Muy bien. Pero debo advertirte que si yo gano, tendrás que pagar──.

──Ya te lo he dicho, yo seré el ganador esta vez──. Sin decir más, Izuku tomó el paquete de cartas y comenzó a barajarlas, posteriormente las repartió.

Luego de casi 15 minutos, Midoriya estaba listo para mostrar sus cartas. Un póker de  reyes que lo coronaria como el vencedor. Sonrió de manera triunfante y lentamente fue colocando sus cartas sobre la mesa y mirando al anciano frente a él dijo:

──Póker de reyes. Gane ──. Se recostó en la silla y  vio como su contrincante se acercaba a las cartas, con el fin de confirmar las palabras de pecoso.

Midoriya lanzó una risilla confiada, luego acercó sus manos para tomar el dinero de la mesa, su gran premio. Sin embargo antes de que pudiera siquiera tocar una moneda, el hombre  mayor habló.

──Aun no muestro mis cartas──. Dijo llamando la atención del joven.

──No necesitas hacerlo, seguramente solo tienes cartas menores──.

Aquel tipo fue mostrando poco a poco sus cartas. En ese momento Izuku recordó que aun había un grupo de cartas que podría ganarle a su póker reyes.

──Póker de ases──. Dijo, mientras sonreía ante el asombro en el rostro de contrincante. ──Gane──. El hombre se apresuró a tomar el dinero sobre la mesa, mientras reía burlonamente. ──¿Ahora me mostraras los 250 mil? ──. Se atrevió a preguntar.

Izuku se recostó en su silla, pensando en como salir de ahí, no tenía mas dinero y se había atrevido a apostar a lo bruto. Quiso levantarse e irse, pero en cuanto se puso de pie, dos hombres lo tomaron de los hombros y lo obligaron a sentarse.

──¿y bien?, ¿dónde están los 250 mil?, Midoriya──.  Preguntó el pelinegro.

El joven paso saliva ante el tono de voz de aquel hombre. Ciertamente estaba muerto de miedo.

──¡Ay, pero que tonto soy!──.