La pesadilla hecha realidad

253 31 3
                                    


De ante mano, gracias por leer

𝕭𝖊𝖆𝖚𝖙𝖎𝖋𝖚𝖑 𝖑𝖎𝖊

══════❀・°・❀══════╗



Al avanzar un poco mas notó, como dos tipo sacaban su cama y la dejaba casi al medio de la calle.

──¡Oigan!, ¡¿Qué creen que hacen?! ──. Habló dejando notar su molestia, sin embargo aquellos hombres la ignoraron de forma monumental.

──¡Ochako! ──. Apareció Mina llamandola. ──¿Dónde estabas?, te estube llamando, pero…──.

──Mina, ¿Qué está pasando? ──. Uraraka esperaba que le dijera que era una equivocación, que en realidad no eran sus cosas las que estaban fuera del edificio.

──No es obvio──.Tras ellas apareció un hombre mayor de apariencia regordeta. Era este el dueño del edificio. ──Están sacando todas tus cosas, debemos preparar el apartamento para el nuevo inquilino──.

Ochako apretó los puños.

──No puede hacerle esto──. Apareció Izuku defendiendo a la castaña. ──Se debe avisar con antelación, para que el inquilino busque a donde ir──. Quería mostrarse intimidante ante aquel hombre, pero este ni se inmutó.

──Le deje un aviso esta mañana──. El hombre mayor sacó un papel de su abrigo y se lo mostró al pecoso. ──Pero supongo…──. Vio de pies a cabeza al peliverde. ──Que tenía asuntos mas importantes que atender──.

──¿Esta mañana?. Es muy poco tiempo para desalojar──. Esta vez si estaba molesto, incluso quería golpear a ese tipo. ──No puede hacerle esto──.

──Técnicamente soy el dueño del edificio, así que sí, si puedo hacerlo. Con su permiso──. Aquel nombre acomodó su saco y caminó hacia su auto, no sin antes pasar golpeando intencionalmente al pecoso.

Izuku estaba dispuesto a ir tras él, sin embargo Ochako lo detuvo al tomarlo del brazo.

──Déjalo, no vale la pena──.

──Pero no es justo──. Reprochó impotente.

Ella negó levemente y  caminó hacia su cama, donde se sentó para luego suspirar. Izuku la siguió y tomó asiento junto a ella.

──Lo siento──. Habló el pecoso.

──No tienes porque disculparte, no es tu culpa──. Uraraka le dio unas cuantas palmadas en el hombro. ──Soy yo la que tiene mala suerte con las entrevistas──. Rio levemente, queriendo brindar un poco de color al ambiente.

──Si hubiera conseguido el dinero para dártelo, habrías pagado tu deuda y no hubieses pasado  esto. De verdad, lo siento──. Él volteó a verle.

──Agradezco tu buena intención, pero te repito que no es tu culpa──.

Mina se acercó hacia la castaña.

──Sero y yo podemos reguardar tus muebles──.

──Gracias, pero no me gustaría causarles problemas──. Ella se colocó de pie y caminó hacia sus amigos.

──Nos los compartiremos los muebles, así no ocuparan tanto espacio──. Habló un joven pelinegro, era este al que llamaban Sero.

Ochako sonrió, no importa cuanto se negara, realmente sus amigos estaban dispuestos a ayudarle.

──Gracias chicos──.

──Descuida, lamento no poder hacer mas──.

Parecerá tonto, pero en aquel edificio existía una absurda regla, si alguien pasaba mas de una noche con alguno de los inquilinos, el visitante también debía pagar renta; es por eso que Ochako no podía quedarse en casa de Mina.

Beautiful Lie- IzuochaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora