Lɪʙᴇʀᴛᴀᴅ ᴅᴇ ᴀᴍᴀʀᴛᴇ || Sᴜɢᴀᴡᴀʀᴀ Kᴏ̄sʜɪ

－ᑕᗩᑭITᑌᒪO 3.

✿꧁Lɪʙᴇʀᴛᴀᴅ ᴅᴇ ᴀᴍᴀʀᴛᴇ꧂✿

—¡Akaashi!—La de cabello teñido se tiro sobre su amigo armador abrazándolo por el cuello y enrollando sus piernas en sus caderas.

Keiji pasó sus brazos sobre la cintura de su amiga correspondiendo el abrazo y evitando que caiga.

Kenma intentó ignorar aquella escena y evitando armar un escándalo para no llamar la atención, así que se fue a sentar por ahí a jugar con su consola.

—¿Para mi no hay abrazo?—Pregunto el de cabello bicolor con su cabello aplastado demostrando su tristeza. Cuando _____ se acercó a él para abrazarlo, Bokuto puso su mano frente a él, frenándola.—No, ya no quiero nada.

Se sentó en un rincón de la cancha con un aura depresiva, recibiendo varias mirada, la mayoría divertidas.

Akaashi miró con compasión y suplica a su amiga, ahora le tocaba a ella hacer que Bokuto volviera a estar igual que siempre.

Kozume se acercó a Bokuto nuevamente, se puso en cuclillas frente a él y lo tomó de las mejillas.

—Bokuto-san, no le digas a nadie pero, tú eres mi favorito.——Hablo susurrando mientras le sonreía a ojos cerrados.

Bokuto tomó las manos de su pequeña amiga y se levantó ya nuevamente emocionado, haciendo que _____ también se levantara.

En eso, Kōtarō agarra a su amiga de la cintura y la eleva dando vueltas con ella en el aire.

—Tu cabello se ve genial.—Volvió a hablar el de orbes dorados luego de dejarla otra vez en el suelo.

—Kenma me obligo a hacerlo, prácticamente.—Respondió tomando un mechón de su cabello.

—Eso no es cierto.—Nego la acusación de su hermana, haciendo que esta misma pegara un salto cuando puso su barbilla en su hombro.

Luego de un poco más de charla con sus amigos y molestar a Kenma estando bastante cerca de sus amigos de Fukurodani, Kozume se acercó al entrenar Nekomata.

—Karasuno llegará pronto, de igual manera, deberían comenzar el precalentamiento para iniciar los partidos de entrenamiento.—Aclaró y sugirió entregándole la tabla de datos a su entrenador.

Este simplemente asintió ante ella y se dirigió a los chicos dándoles una señal para que se reúnan todos.

Todos los equipo, entrenadores, profesores y Managers presentes formaron un gran círculo para que les dieran la bienvenida y les dieran sus instrucciones.

Luego, la de ojos miel fue hacia la bodega, en busca de las camisetas que usarían para las prácticas.

Ya que ella era a la única que se le permitía andar con libertad, se encargaría de eso.

También ayudó a levantar la maya y fue en busca de la cesta de balones de su equipo.

Mientras los chicos calentaban, las chicas se encargaban de llenar las botellas de agua de sus respectivos equipos y traer las toallas que cada una había preparado para sus compañeros.

Ya pasado un rato, se reunieron los equipos con sus entrenadores para dar inicio a la práctica del día.

En eso, a _____ le llega un mensaje. Salió des gimnasio con la excusa que había olvidado algo en los vestidores y saco su teléfono.