𝘃𝗲𝗶𝗻𝘁𝗲 - 𝗇𝗈 𝗌𝖾𝗇𝗍𝗂𝗋

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Otro día más, ya ha pasado un mes desde lo ocurrido, desde mi esguince, desde mi pesadilla con Victoria y Laurent, desde que los Cullen desaparecieron

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Otro día más, ya ha pasado un mes desde lo ocurrido, desde mi esguince, desde mi pesadilla con Victoria y Laurent, desde que los Cullen desaparecieron. Mi rutina ahora era ir al instituto, hacer tareas, volver a casa y cenar, después encerrarme en mi habitación y llorar. Por supuesto no permito que nadie sepa que lloro, así que he aprendido a maquillarme bien y ocultar mis ojos hinchados y rojos.

Sé que me mirarán raro por llorar aun, y como ya ha pasado un mes, debo distraerme, fingir estar mejor.

Voy casi diario a la Push, Bella se enoja porque ahora debe depender de Angela y su aventón a casa, pero en la Push siento que puedo olvidarme de todo lo que me recuerda a él. Voy conduciendo cuando veo por el rabillo del ojo una camioneta azul y oxidada que lleva detrás chatarra, entre eso, motocicletas aparentemente. Me detuve y aproveché que no venía ningún auto para doblar en u, fui detrás de la camioneta azul hasta llegar a la chatarrería de autos, cuando se estacionó me puse a su lado y bajé de la camioneta.

—Estas dos costará mucho arreglarlas —dice el hombre que trabaja aquí, me acerqué a ver las motocicletas, sí se ven algo oxidadas y descuidadas, pero sonreí al recordar a Jacob.

—Me las llevo, creo que puedo intentar el milagro —dije. Me ayudaron a subirlas a la camioneta, le pagué al hombre y conduje hasta la Push. Al llegar Jacob se asomó y río al verme, se acercó a mí—. Cada día más alto, duermes mucho ¿no?

—No, sólo estoy en desarrollo —reímos, le di leves palmadas a la motocicleta.

—Como no tengo nada que hacer, te ofrezco esto, yo te pago los repuestos, y me ayudas a devolver a la vida las motocicletas, además, una será tuya.

—Mm, bien, ¿pero desde cuando te gustan las motocicletas? —me pregunta.

—Desde hoy, no tengo nada más que hacer y debo distraerme con mi amigo Jake, así que, después de arreglarlas tendrás el deber de enseñarme a usarlas —Jacob acepto y no le molestó que lo llamase "Jake", es un gran avance.

Lo siguiente en mi rutina cambió, añadí algo más de emoción y como Bella estaba cansada de molestar a Angela, la empecé a llevar conmigo hasta la Push. Jake y ella se llevaban muy bien, yo era la Dj, buscaba alguna estación y me encargaba que la música fuese buena, Bella estaba junto a Jacob cuando este trabajaba en la moto y cuando los veía muy juntos, no dudaba en inventar excusas de ir al baño o respirar aire fresco.

—¿Y? —le pregunté a Bella estando en la camioneta, yo conducía e íbamos a casa después de pasar toda la tarde con Jake.

—¿Y qué? —me miró algo desconcertada.

—¿Jake, tú?

—Stella no —Bella desvío su mirada algo avergonzada, reí.

—Vamos, él es lindo, bueno, y no aparenta la edad que tiene.

—Pero aun así tiene Dieciséis.

—Y está a meses de los diecisiete —aclaro, ella niega con la cabeza, sonríe nerviosa.

—Jake es, bueno. Pero no lo sé.

—¿Temes a las relaciones? —pregunté, ella se queda en silencio—. Bueno, sólo podrás tener el derecho de decir: sí, temo a eso. Cuando estés con alguien y experimentes el amor.

—Stella —me estacione afuera de nuestra casa—. Sé que aún te afecta lo de Edward, yo sé que estabas muy enamorada y no quiero...

—Terminar como yo —digo al sacar las llaves. Debería ofenderme, dolerme, pero la verdad es que, ¿en qué mundo desearía que Bella sufriese como yo? ¿para sentir lo que yo siento? No, no le deseo este dolor a nadie.

—Lo siento —me dice.

—Bella, tú sabes qué era él —digo al verla—, no éramos de mundos iguales, y algún día él seguiría sin mí —mi pecho duele, pero las lágrimas no salen, no me lo permito—, pero Jake es humano y está cerca, dale una oportunidad antes de cerrar las puertas completamente. Además, él es mejor que Mike.

Reímos, bajamos de la camioneta y nos adentramos a la casa, me duche y cambie de ropa, mi cabello estaba húmedo, lo veía a través del espejo y también veía mi rostro debajo del maquillaje, estaba pálida y tenía unas grandes ojeras, me veía horrible.

Cómo un cadáver.

Estaba empezando a hacer frío, el otoño se estaba yendo y el invierno ya llegaba, me acerqué a la ventana e iba a cerrarla, pero me detuve, una parte de mi (la dominante), me decía que no cerrara la ventana, porque Edward podría no venir mientras duermo, y mi otra parte me decía que ya es tiempo de soltar. No la oí.

Me acosté bajo varias tapas, el frío inundaba mi habitación, pero no me importa, cerré mis ojos y el sueño nunca llegó, entonces lloré, mordía mi mano para no gemir fuerte, para que nadie escuchara mi llanto, lloraba hasta quedar seca y dormirme por el cansancio.

No sé cómo, pero ahora sí no hago esto, no puedo dormir.





—Ya casi termino —dice Jake, veo las motocicletas ya renovadas, sólo se demoró casi dos meses en hacerlo.

—Eres flash, hijo —dije al verlo, él río.

—Bueno, aun así, tendrás que esperar a Enero —me dice, arqueo las cejas en busca de una respuesta.

—Navidad, hija —me responde, asentí, olvidé que ya es la segunda semana de diciembre—, es la única fecha del año en que nos reunimos todos, así que este lugar estará lleno.

—Ya, no vendré entonces, no me gustan las multitudes.

—Lo sé, por eso te invito en enero, ahí te enseñaré a manejar bien la moto.

—Vale —sonreí, Bella entra al lugar y veo como le lanza miradas a Jake y viceversa. Desde que hablé con ella respecto a "intentarlo", se ha vuelto más abierta en el sentido de demostrar un interés, obvio.

—Oh, olvidé mi celular en la camioneta —sobre actúe, Jake asiente sonriendo y Bella frunce el entrecejo cuando me levanto para irme.

—Tienes tu celular ahí —me dice Bella, me giro y la chiteo, ella me ve perpleja hasta que veo antes de irme como Jake se levanta y se le acerca. Me quedé cerca para oírlos.

—bien, seamos sinceros, te gusto ¿no es así? —Bella se mantiene en silencio, pero por una sonrisa con suspiró que se oye de Jacob, deduzco que asintió— ¿y crees que soy hermoso?

Arrogante.

—Jacob, Yo... —Bella se quedó en silencio, eso creí hasta que oí algo, me asomé y los vi besarse. Abrí la boca, pero no grité, me alejé en puntilla y cuando di la vuelta donde no me viesen salté de alegría y emoción, se sentía como si fuese una fangirl.

Toma eso destino, ahí tienes un gran amor ¡Ja! 

𝐒𝐎𝐋𝐒𝐓𝐈𝐂𝐈𝐎 𝐃𝐄 𝐈𝐍𝐕𝐈𝐄𝐑𝐍𝐎 - Parte unoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora