The model ✰ Charles Leclerc

"sex after fighting?"

Desperté al sentir el dolor en mi espalda, estaba dormida en un sillón que no era mío, era el de Stella. Abrí is ojos, tomándome un tiempo para poder acostumbrarme a la luz y visualicé a Stella salir de la cocina con dos platos con bagles.

- Buenos días - Me estiró el plato y lo tomé agradeciendole con una sonrisa. Pude ver las ojeras debajo de sus ojos.

- Me siento del demonio - Comenté sentandome bien, Stella a mi lado del sofa.

- Lo sé, mi sofá no es comodo, pero es el que me regalo la abuelita de Jackson, entonces es significativo. - Reí mientras llevaba el bagel a mi boca

- ¿Terminamos de leer todo? - Pregunté mirando todos los papeles regados de como se arruinaría mi vida y la de todos mis conocidos. Decidimos imprimirlos para tener mejor investigación

- Creo que si, en total son 573 hojas, mi impresora hasta se descompuso

- Lo siento, te estoy haciendo trabajar. No sabía a quien acudir - Ofrecí una disculpa dandole otra mordida a mi comida

- No te preocupes, eres mi amiga - Me dió una sincera sonrisa la cuál devolvi hasta que senti mi celular vibrar. Lo saque de mi bolsillo y vi los mensajes.

Mas de 50 mensajes de Charles, 59 llamadas de él. 30 Mensajes de Carlos y Pierre. Y 47 mensajes de Sasha, todos preguntando donde estoy y si me encontraba bien.

- Debo de irme - Dije cuando termine de leer cada mensaje. Stella se levanto y me ayudo a guardar todos los papeles que teníamos. Me despedí y llegue a casa.

Al abrir la puerta lo primero que vi fue a Charles dormido en la mesa. El sonido de las llaves contra el llavero lo despertó.

- ¿Vee? - Pregunto con voz ronca

- Hola - Él se levanto de su silla y me acerque a él. Sus ojos estaban hinchados, como si hubiera llorado la noche anterior.

Me analizó, su expresión de preocupación aún presente.

- Te escribí. Te llame. Salí a buscarte y no te encontre.

- Lo siento, estoy aquí solo que no ví tus mensajes, ni los de los demás

Charles guardo silencio y se intento acercar a abrazarme. Pero yo lo esquive.

Esquive su abrazo y me fui a la cocina por un vaso de agua, dejándolo con un semblante confundido.

Después de leer todo y analizar la situación en la que me encontraba, decidí empezar a convencerme de que tendría que dejarlo. Amaba a Charles, pero no puedo dejar que más personas salgan afectadas, y decirle a Charles no era una opción.

- ¿Dónde estuviste? - Esta vez su voz fue demandante, ya no estaba preocupado, él quería respuestas.

- Por ahí - Conteste vagamente, dándole la espalda intentando mentalizarme de que se acaba de soltar un remolino de problemas.

- ¿Eso dónde es, huh? - Sentí acercarse, claramente ya se estaba enojando.

- No te incumbe

- Claro que sí, eres mi prometida, me preocupo por ti, no apareces en toda la noche y llegas como si nada. Creo que me incumbe, y mucho.

- No Charles, es asunto mío - Me dí la vuelta, alzando la voz a su mismo nivel. El me escaneo de pies a cabeza, sus ojos tornandose casi negros de los dilatada que estaba su pupila ya.

- ¿Qué son esos papeles? - Baje la mirada a los folders llenos de los papeles.

- Esto si no te involucra, no preguntes simplemente - Empecé a caminar, pasando a su costado para ir a la habitación. Pero su mano en mi cintura me detuvo. Me regresó un poco, haciendo que quede cerca de su cara.

- ¿Qué son esos papeles? No me mientas Venus - Los dos guardamos silencio, manteniendo el contacto visual. Estabamos peleando ya.

- No puedes saberlo - Susurré finalmente. Charles apreto su agarre, aercandome más a él - Enserio no puedes enterarte de nada de esto.

- ¿Por qúe? - Su furiosa mirada bajo rápidamente a mis labios.

- No me hagas explicarlo porque ni yo misma lo sé - Senti su pesada respiración en mi mejilla de nuevo.

- Vee - Su voz sonó mas suave pero aún asi furiosa - ¿no confías en mi?

- Claro que sí, pero enserio esto no puedo decirlo, o habrán consecuencias que ni tú mismo te vas a imaginar

- ¿Estás en problemas?

- No

- ¿Necesitas mi ayuda? Solo dime que hacer y lo hago, pero no me saques de tu vida

- Charles no estoy en problemas, no te necesito.

No debí decir eso, ahora lo sé. Su mirada se torno aún más oscura y se separo de mí.

Charles empezó a caminar al sofá, llevandome con él, se sento y me puso entre sus piernas. Me miro desde abajo solo se recargo en el sofa. Seguía enojado, eso lo sé, y yo también me había enfurecido.

Palmeó sus piernas sin despegar la mirada de mi.

- Sientate - Demandó. Y yo obedecí, no quería hacerlo enojar mas de lo que ya estaba.

Me senté con ambas rodillas a su costado de él, rápidamente paso su brazo por mi cintura, pegandome mas a él. Y nuevamente nos rodeó un silencio donde él y yo luchabamos por ver quién despegaba la mirada primero, y me la estaba poniendo difícil pues su mano acariciaba mi cintura ligeramente. Y sus ojos iban de los míos a mi boca.

Acercó su cara a la mía, pensé que iba a besarme, pero se detuvo cuando sus labios rozaron los míos. Salió una sonrisa arrogante de sus labios y bajo su cabeza a mi cuello, dejándo suaves besos ahi, haciendome suspirar y tirar mi cabeza al otro costado dandole acceso a mi.

Sus besos aumentaron la intensidad y finalmente me beso. Me beso de la manera más salvaje y excitante. No tuvo cuidado.

Mis manos viajaron a su cabello tirando de el. Y su mano que estaba en mi cintura bajo a mis piernas. Subieron por mi trasero y finalmente llegaron a el boton de mis pantalones.

Lo desabrocho, bajo la bragueta y metió su mano, acariciando mi zona sobre las bragas.

- No he hecho mucho y ya estás mojada - Murmuró y movió sus dedos haciendome gemir por lo bajo - ¿Qué no me necesitas? Tu cuerpo dice todo lo contrario - Recorrió la tela de las bragas, haciendo piel con piel conmigo.

Introdujo un dedo en mi, moviendose con agilidad. Empecé a moverme sobre su mano, mis caderas de enfrente hacia atrás, y jadeando aún mas cuando metió otro dedo.

- No vuelvas a decir que no me necesitas, no cuando reaccionas asi bajo mi toque - Dijo contra mi cuello. Baje mis manos por su pecho, sintiendo su marcado abdomen y encontre su cinturon pronto, viendo lo duro que se encontraba él.

- Charles - Jadee acariciando su pene por encima del pantalon.

- ¿Qué pasa Vee?

- Te necesito - Dije antes de ver como la sonrisa mas egocentrica salio de él. Me cargo con facilidad y me acosto en el sofá.

Sin duda el sexo después de una pelea es muchisímo mejor.

𝐓𝐡𝐞 𝐦𝐨𝐝𝐞𝐥✰