The boy Is mine|| [InuKoko] ((TERMINADA))

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Jamás sintió un cosquilleo en su cuello como aquel cuando vio esa bonita omega en la cafetería de Takemichi, luego de conversar intercambiaron números de contacto y se dieron cuenta que tenían mas común que solo su gusto por la tarta de manzana, fanáticos de las motocicletas, carreras, gusto por deportes de balón y gustos musicales. Entre más la veía más sentía que el tiempo se detenía y su corazón se acelera.

—¿Es tu omega aquel chico?— Pregunto aquella linda mujer que prendía un cigarro mientras observa los ojos verdes de Seishu.

—No.

Eso abrio paso a continuar viéndose en los ratos libres de Seishu, ella entendió que por el momento no tenía tiempo para una relación sin embargo eso no impidió que ella sacara tiempo para estar con él. Aquella noche conversaban de una motocicleta reciente que Seishu arreglaba cuando comenzó a sentirse mal, su rut se adelanto lo primero que él pensó fue "la estimulación por las feromonas de la omega" ella lo ayudó y llevó a su departamento pero su lobo se estremeció y decidió pasar el rut, ella disfruto cada instante aunque parecía soportarlo después de un día se desmayo cuando recupero el conocimiento, Seishu estaba metido en agua fría intentando bajar su calor, no lo pensó dos veces y se lanzó sobre él, ella quería terminar.

—¿Quien era?— Seishu apareció en la sala con una toalla en la cintura, su cabello corto despeinado le daba un toque despreocupado quitandole toda la seriedad que siempre proyecta.

—Se equivocaron de departamento.—Seishu se acerco tomandola de la cintura hundió su nariz en su cuello olfateando su aroma, le gustaba que ella oliera a él.— No me hagas así, me caliento y quiero arrastarte a la cama otra vez.

—Parece que eres tu la que esta en celo.—Paso su lengua por su sensible cuello y ella solo le abrió paso, los colmillos de Seishu picaron, desde que entró en su rut su alfa está desesperado por marcarla.— Más tarde iré a trabajar al taller ¿esta bien?

—Si, esta bien ¿cuando nos vamos a ver?

—En dos días, descansaré del taller y podemos pasar toda la noche juntos ¿Quieres ir bailar? ¿Al Karaoke? ¿A cenar? ¿Todo?—Seishu suspiro y volvio a pasar su lengua por el cuello sacándolo jadeos.— Dime.

—Cenemos juntos, luego vayamos a bailar y luego nos perdemos en la oscuridad.—Seishu se aparto dejando un beso en su frente, le encanta aquella mujer.

—De acuerdo.

La sensación de ser vigilado volvio, no importaba la hora sentía que estaba presente todo el tiempo: saliendo del trabajo, camino a casa de Akane, camino a su casa incluso en su casa a veces sentía que alguien estaba sentado al pie de su cama, no quería asustarse podría ser su estrés ¿Quien entraría a la casa de tipo que sabe disparar y pelear? Solo un loco aunque el fresco aroma que solía oler cada mañana ya no estaba.

Se sento en la cama viendo la ventana que estaba abierta, frunció el ceño al recordar que dejó la ventana cerrada ¿estará enloqueciendo? Salio de sus pensamientos al escuchar su celular timbrar, su sangre se heló y su respiración se acelero, tomo un pants y una sudadera para salir rápido.

Manejaba a prisa, metiéndose entre carros y entre calles recortando el tiempo al llegar a su departamento Akane estaba amordazada y atada a una silla y en los sillones Shion con sus hombres.

—¿Que mierda te pasa maldito enfermo?—Seishu tomo fuerte de la camisa a Shion que tenia esa estúpida risa.—Si tocaste un solo cabello de mi hermana, voy a meterte un bat con clavos por el culo.

—Vaya, así que es verdad que los alfas son altamente agresivos.—Seishu aflojo su agarre al escuchar un quejido proveniente a Akane, uno de los hombres de Shion puso una daga en el cuello de la rubia.—Eso quieto perro pulgoso. Siéntate.—Seishu se aparto y se puso a un lado de su hermana quitandole el trapo de la boca.—Escuchen dúo de perros, el jefe quiere su dinero rápido, si presiona al contador, él me presiona a mí y yo tengo que cortar cabezas. Les subiré la cuota.