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Contar el dinero una y otra vez le da una grata satisfacción que podrán pagar la cuota mensual y abonar un poco más, Akane sonrió con plenitud abrazando a Seishu.

—Lo logramos, hermano.—La felicidad era indescriptible en su delicado rostro, Seishu le abrazo más fuerte, aquel miedo de su hermana de que terminarían en un burdel fue reemplazado por un "podemos salir de esto". — Tenemos que ir al banco.

—Si, vamos.—Seishu tomo una sudadera y acompaño a su hermana con una gran sonrisa, su celular sono atendió la llamada, Akane se puso un sombrero para cubrirse del sol esperando a su hermano, que tenía una cara sería.—Te dejaré en una estación cerca del banco, me llamaron del trabajo no llego mi compañero, tendré que suplirlo.

—¿Por qué tienes que ser tu?— Akane ladeo los labios, sabía que su hermano trabajaba sin parar podia ver su mirada cansada y justamente mañana tendría su día de descanso.

—Yo les dije que algún caso así no dudarán en llamarme.—Seishu tomo la mano de su hermana y le regalo una sonrisa.—Tranquila, llamaré al taller que no iré porque tengo trabajo en la agencia y mañana podre descansar cuando llegue por la mañana, vamos.

Ambos hermanos salieron del edificio donde vive seishu, el rubio le extendio un casco y ella lo acepto quitándose su sombrero, subieron a la motocicleta y se marcharon. Le dejo una estación antes del banco dándole indicaciones de que caminara con cuidado y le avisara cuando completará el deposito.

Seishu llegó al trabajo, se cambió a su traje y equipo de protección y escucho indicaciones de sus superiores y se dispuso a trabajar, revisaba su celular constantemente pues no había noticias de su hermana talvez se le olvido si hubiese paso algo ella ya hubiese llamado, respiro un par de veces relajando su mente. Mañana a primera hora llegará con ella solo para comprobar que todo estaba en orden.

Tal como dijo saliendo del trabajo llego al complejo de departamentos de su hermana y al abrir la puerta, la imagen que vio le rompió el corazón. Akane con un parche en el ojo y el labio roto.

—¿Que mierda paso?—Akane colapso en llanto corriendo abrazar a su hermano, Seishu no entendía lo que pasaba, Takemichi salió de la cocina bavizbajo.—Akane ¿que paso?

—Saliendo de la estación a una calle del banco unos pandilleros me rodearon, me quitaron el dinero y me golpearon.—Seishu comenzó a revisar a su hermana.—No, me hicieron otra cosa, un hombre me auxilio.—Detrás de Takemichi salió Hajime una miraba temerosa por Seishu con evidentes golpes.

—Yo iba pasando, vi que la golpeaban y me acerque ayudarla aunque no fui de mucha ayuda también me golpearon, se fueron cuando escucharon una patrulla. —Su voz temblorosa fue captada por Seishu quien libero un poco de feromonas para calmar a su hermana y al omega.

—Akane me llamo y fui por ellos a la clínica.—Takemichi se acerco poniendo su mano en los hombros de Seishu.—Lamento lo sucedido.

—Gracias.—Tomo la mano del beta y su mirada volvió al omega que miraba el suelo.—Gracias también eh

—Hajime —Hajime dijo rápido mirando los ojos verdes de Seishu, le gusta esa intensa mirada. —Ella no me dejo ir, así que me quede, supongo que es porque soy un omega y mi aroma le ayudo a calmarse.

—Gracias— Seishu volvió acariciar la cabeza de su hermana intentando no perder la cordura.—No debí dejarte sola, debi acompañarte aunque llegara tarde, no te preocupes, ya pensaré en algo.

Después de un raro Seishu metió a su hermana a la cama, en la cocina estaba Takemichi ofreciéndole Té al omega, el beta le señaló una taza de café y tomo asintiendo solo contemplando la taza.

—Sei, tengo que irme, tengo que abrir la cafetería pasare cuando cierre a tu departamento ¿esta bien?

—Si, gracias. Te veo más tarde.

Hanagaki antes de salir le hizo una seña sobre el omega, Seishu asintió, tras escuchar la puerta se quedo mirando al omega que bebía su taza de té mirando a todos lados.

—Gracias, nuevamente por auxiliar a mi hermana y me disculpo por lo de la otra noche.

—Esta bien, no te preocupes tampoco pensé con claridad actúe sin medir mis palabras parecía un loco dispuesto a llevarte.— Su voz divertida saco una risa en Seishu, Hajime guardo silencio le pareció agradable escucharlo.

—No quiero ser grosero pero debo hacer otras cosas.

—¿Están bien? Disculpa que me entrometa pero ella no paraba de decir que terminarían en un burdel y temblaba, por eso libere un poco de feromonas para calmarla.

—Mis padres desaparecieron dejándonos con una deuda y el tipo dijo que si no le pagamos terminaremos un burlen hasta cubrir la deuda.— Seishu se froto la frente intentando ocultar su desesperación y frustración.— Hoy es el último día para pagar.

—¿Cuanto es? Yo les puedo prestar para que paguen su cuota.

—No, sería deuda tras deuda. Pensaré en algo más, gracias.

—No lo veas de ese modo.—Hajime estiro su mano tocando sus mejillas calidas. Seishu quito su mano de su frente para poder ver claramente al omega.— Les quiero ayudar, mi madre también absorbió la deuda de mi padre y termino en un burdel, le costó años y abusos poder salir de ahí. No creo que tu hermana soporte algo así pagamelo sin intereses y sin tiempo, dame lo que puedas cuando quieras.

—¿De verdad?— dijo incrédulo mirando los intensos ojos negros de Hajime.

— Claro, no tengo porque mentirte. Pareces buen chico así que porque no ayudarte.

Seishu tomo la mano de Hajime dándole una mirada agradecida, sus ojos verdes brillaban como dos gemas y Hajime sintió algo extraño dentro de él y su omega brindaba de felicidad por sentir el tacto del rubio.

¿De verdad bastaría con tenerlo una vez?

Porque le dijo que se lo devolviera cuando pudiera, pudo a verle dicho dame tu cuerpo y ya, pero su cabeza no conecto las palabras, se dejó llevar por esa mirada de cachorro vulnerable.

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Gracias por leer. ✨️

The boy Is mine|| [InuKoko] ((TERMINADA)) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora