The boy Is mine|| [InuKoko] ((TERMINADA))

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El fresco y delicado aroma que pica su nariz enloquece sus sentidos, desea tocar cada rincón de su piel, oler descarado su cuello, sus jadeos y gemidos son música para sus oídos, la vista de su cuerpo marcado o su rostro carmin con los ojos llorosos es simplemente magnífica y sus besos tienen dos efectos calman su sed de él y aumentan las ganas de profonarlo.

Seishu enterro su nariz en el pálido cuello del peliblanco, jadeo al sentir su miembro siendo apretado por la entrada del omega.

-Ah.-Movió su caderas despacio dejándose llevar por los suaves gemidos del omega.-¿como puedes moverte con una herida en el muslo?

Seishu parpadeo un par de veces, las feromonas de Hajime son intensas disfruta olerlo a primera hora de mañana.

-Dejame ir, tengo que hablar con Akane.

- ¿Como puedes tener premios si eres mal chico? No respetas una orden y así pagas mi amabilidad.

-Hajime me tienes aquí en contra de mi voluntad.

El peliblanco movió ligeramente sus caderas escuchando el jadeo de Inui contra su cuello. El aroma de Hajime por la mañana es más dulce y cautivador, le provoca querer menear sus caderas y saciar la necesidad de quererlo follar aunque ya han tenido sexo no recuerda nada embriagado por las feromonas y ahora por fin siente lo que es estar dentro del omega.

—Salte de mi, voy a bañarme tengo trabajo.

Seishu hizo caso y salió del omega al verlo de pie desnudo contempló embelesado el delgado y pálido cuerpo del omega, tiene una cintura pequeña y su abdomen está trabajado, sus piernas sus largas, trago pesado al ver las mordidas en sus muslos realmente pierde el control de sí.

—¿Piensas quedarte ahí viéndome?— La mirada seductora que le dio por encima del hombro sonrojo a Seishu.—Acompáñame lavame.

Seishu suspiro y tomo las muletas para apoyarse y seguir al omega, verlo metido en la tina en silencio le dudar de que Kokonoi este mal de la cabeza.

—Estoy enamorado de ti.—Kokonoi dijo con serenidad y como si fuese el escenario indicado.

—No puedes estar enamorado de mi.

—¿Por que no? Me gustas físicamente y también tu personalidad un tipo responsable e inteligente, se que eras el favorito de tu jefe mencionó que eres bueno peleando cuerpo a cuerpo, tienes buena puntería y buen estratega por eso te confío a su omega y luego el jefe del taller te dejaba solo cuando en la tarde vigilaba a sus trabajadores sin parar. Un tipo leal.

El alfa guardo silencio, paso por el cuerpo del omega el jabón con delicadeza como si fuese frágil. No tenía palabras para responder ¿cuanto tiempo lo observo? ¿Como no se dio cuenta de las intenciones del omega? Pensó que era un divino ángel que llegó a su tormentosa vida, se equivoco, el omega es el mismísimo diablo.

—Cuando te vi con ella por primera vez tuve una crisis, no podia imaginarte en sus brazos. Yo movia mis fichas con precaución para tenerte de buena manera.—Hajime extendio sus manos al rostro de Seishu que le miraba desconcertado y con temor.— Complicaste las cosas cuando la comenzaste a frecuentar, sabía que en cualquier momento ibas a enloquecer por ella. Tú me obligaste a tomarte.

—Hajime...

—¡Callate!— ordenó apretando la mandíbula del alfa— Eres mio Seishu no voy a compartirte con nadie y menos con esa estúpida omega desubicada y corriente.

Solto al alfa y soplo la espuma como si nada. Seishu no sabía que responder, se apoyo de nuevo en la muleta y salió del baño, acostándose con suavidad en la cama. Tal vez jamás saldrá de esta locura. Después de un rato vio a Hajime listo para salir antes de irse beso al rubio, Inui miró hacia los enormes ventanales y Hajime sonrió depositando otro beso en su cabeza.