20. El lunático vive en mi casa.

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Las cosas han cambiado un poco, pero la inesperada llegada de Trish ha suavizado la situación, los chicos desean divertirse ¡Son vacaciones de verano después de todo!

Dejar a sus amigos debió ser duro, por eso todos queríamos integrarla a nuestros planes, bueno, no todos en realidad, parece que Yukako no traga a Trish, al punto de prohibirle a Koichi que pase el rato con nosotros si esta ella.

Un caso muy contrario es nuestro querido Okuyasu, desde que la vio ¡Uf! parece que todas sus neuronas tomaron un año sabático, el chico era una bomba de tiempo y estaba a un hola de Trish para detonar.

— ¡T/n, tengo una idea!, sígueme la corriente eh —Josuke me susurró al oído, observé por el rabillo del ojo como soltaba una sonrisa picarona.

—A ver, ¿Ahora que traes entre manos Josuke? —le pregunté, curiosa —Espero que no estés pensando en joder a Oku eh, porque si es así... ¡Cuenta conmigo! —levanté el pulgar confirmando mi complicidad con él.

Estábamos en la sala de Okuyasu, cuando Josuke de un brinco se puso de pie, y comenzó con su artimaña.

— ¡Que calor más insoportable! Vamos por un Kakigori, ¡digan que sí, digan que sí! —soltó de golpe y porrazo, llamando la atención de los demás chicos.

— ¡MUEROOOO POR UNO! —Sip, Okuyasu mordió el cebo... 

—Tal vez Trish quiera salir a probarlos, ¿no crees T/n? —comenzó a codearme, no pude con más y ambos empezamos a reírnos.

— ¡ALTO UN MOMENTO!, ambos se comportan de una forma sospechosa —¿En serio Okuyasu? ¿Tanto tardaste en captarlo? En una acción retrasada se percató de nuestras verdaderas intenciones y rápidamente se excusó diciendo que iba al baño, cosa que Josuk...

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— ¡ALTO UN MOMENTO!, ambos se comportan de una forma sospechosa —¿En serio Okuyasu? ¿Tanto tardaste en captarlo? En una acción retrasada se percató de nuestras verdaderas intenciones y rápidamente se excusó diciendo que iba al baño, cosa que Josuke evitó poniéndose frente a él, y extendiendo ambos brazos le impidió el paso.

Pacíficamente, Mikitaka le daba una mordida a una crepa mientras su rostro se llenaba de crema batida, al fondo Okuyasu huía corriendo y escondiéndose, y nosotros tras él.

— ¡SAL-DE-AQUÍ-OKUUU! —Josuke lo empujaba con fuerzas —¡Maldición Oku! si tanto te gusta, agárrate los pantalones y se un hombre —logró formular en medio de jadeos ¡Joder! Okuyasu era más fuerte que él.

— ¡CÁLLATE! Eres el menos indicado para decirme esas cosas —el chico rehusaba soltar el marco de la puerta con los ojos llorosos y rojo cual tomate.

Después de un par de patadas y que Mikitaka se haya convertido en una arañita de plástico para asustarlo y que al fin se soltara de donde estaba, el pobre no podía articular palabras por los nervios.

— ¡Sabemos que babeas por ella! Pero si nunca le dices algo, jamás sabrás si le gustas tu —le dije tratando de animarlo.

—Claro, ¡lo dices por experiencia personal! —sollozaba mientras rodaba en el suelo chupándose el dedo —¡USTEDES DOS CONSPIRAN CONTRA MI, ME SIENTO TRAICIONADO!

𝘒𝘦𝘦𝘱 𝘰𝘯 𝘴𝘩𝘪𝘯𝘪𝘯𝘨, 𝘙𝘰𝘶𝘨𝘩 𝘋𝘪𝘢𝘮𝘰𝘯𝘥 [JosukexReader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora