29. 𝕿𝖍𝖗𝖊𝖊 𝖈𝖍𝖊𝖊𝖗𝖘 𝖋𝖔𝖗 𝖘𝖜𝖊𝖊𝖙 𝖗𝖊𝖛𝖊𝖓𝖌𝖊

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A una semana del 31 de octubre, 2001.

—Oye, ¿ya escuchaste el nuevo rumor?

—Si no me equivoco, ¿hablas de los fantasmas de la Preparatoria?, ¿no es así?

—Siiii, cuenta la leyenda que en el salón 3-B rondan almas en pena... se sienten las energías muy tensas por ahí...

—No quisiera estar cursando clases ahí... dicen que las ventanas y las puertas se abren solas, en la pizarra se escriben cosas y los asientos salen volando.

—El otro día escuche que las luces de los baños se encienden y se apagan de la nada, las alarmas se activan por si mismas...

— ¡Mierda! Hay que alejarnos de ese sitio...

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Nadie sabe que le ocurre a la preparatoria Budogaoka, nadie, excepto un grupo de amigos, cuyos poderes llamados Stands, los cuales son invisibles al ojo humano, eran los causantes de aquellas "apariciones" que tanto atemorizaban a los jóvenes del poblado.

Desde los arrebatos irascibles pero inconscientes de Josuke, hasta T/n defendiéndose de sus agresoras, usar sus Stands en la escuela ya era cosa común. Para unos chiquillos, un poco torpes, la palabra "Consecuencia" carece de significado, por mas que Jotaro les haya replicado una y mil veces: "No usen sus Stands a menos que estén frente a un peligro".

Los chicos venían conjugando una pequeña venganza hacia las fans de Josuke, era inevitable reírse a moco tendido cuando los demás estudiantes gritaban llenos de pánico por los supuestos fantasmas que deambulaban por los pasillos, al punto de hacer...

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Los chicos venían conjugando una pequeña venganza hacia las fans de Josuke, era inevitable reírse a moco tendido cuando los demás estudiantes gritaban llenos de pánico por los supuestos fantasmas que deambulaban por los pasillos, al punto de hacer un club de ocultismo para, supuestamente, exorcizar los salones afectados.

— ¿Y si las mandas a comer mierda? —sugirió Okuyasu, con ese inocente tono de voz que manejaba generalmente, mientras sostenía su mentón con una de su manos.

— ¡Ay por favor, denme un jodido respiro con este mocoso! no se como puedes soportar semejante cosa, yo hubiera sido tu y ya hubiera ultrajado a cada una de esas perras escandalosas —espetó Jotaro, tan gruñón como siempre.

Con cierta frustración, Josuke llegó al grado de imaginar el resto de su vida siendo atormentado por sus acosadoras, quienes eran demasiado intensas. Lo que para otros chicos era una fantasia, para nuestro peliazul no era nada grato, les había pedido mil veces y de mil formas que lo dejaran en paz, pero simplemente no le prestaban atención, no le hacían caso y más se le pegaban, la cordialidad no funcionaba con aquellas locas, que eran como pequeñas tortugas cuando el agua resbala de sus gruesos caparazones.

Casi tirando la toalla e ignorando los turbios consejos de su sobrino (Como siempre solía hacer), su intención no era faltarles el respeto, pero sus amigos y T/n (quien si anhelaba venganza por lo que le hicieron a ella), cranearon una pequeña broma.

𝘒𝘦𝘦𝘱 𝘰𝘯 𝘴𝘩𝘪𝘯𝘪𝘯𝘨, 𝘙𝘰𝘶𝘨𝘩 𝘋𝘪𝘢𝘮𝘰𝘯𝘥 [JosukexReader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora