𝘒𝘦𝘦𝘱 𝘰𝘯 𝘴𝘩𝘪𝘯𝘪𝘯𝘨, 𝘙𝘰𝘶𝘨𝘩 𝘋𝘪𝘢𝘮𝘰𝘯𝘥 [JosukexReader]

25. 𝓐𝓵 𝓬𝓪𝓻𝓪𝓳𝓸 𝓮𝓵 𝓢𝓽𝓪𝓽𝓾𝓼 𝓠𝓾𝓸

Septiembre 2001

Narra Rohan.

La historia de amor entre T/n y Josuke suena interesante, de otra forma, alguien como yo no estaría aguantando estas estupideces... Después de su última aventura reafirme algo que me emocionó, con ellos tengo material suficiente para el nuevo rumbo que quiero darle a mi manga, pienso llevar a Pink Dark Shonen a otro nivel, algo que solo yo lograría, por supuesto.

¡Quiero demostrar que solo yo, el gran Rohan Kishibe, puede dominar todas las demografías del manga!

Así que, aprovechando que T/n vive conmigo, le echó unas ojeadas a lo que sucede en su vida.

Sin que ella se dé cuenta (obviamente) necesito que sus acciones sean genuinas. A veces me pregunto qué pasaría si ella no viviera conmigo, creo que comenzaría a arrancar hojas de su vida... No quiero ni imaginar si el tarado de Josuke se diera cuenta de eso... me mataría a golpes, de solo recordar la golpiza que me dio cuando nos conocimos, me hierve la sangre de la coléra.

En fin... desde que el pelo de hamburguesa está encerrado, T/n va a visitarlo a su casa, y no ha pasado nada relevante y todo por culpa del ojos de sapo de Okuyasu.

Es obvio que ninguno de los dos quiere entrar a clase, especialmente Josuke, eso retrasa su deseo de declararse a T/n, en serio tiene que pasar algo fuerte para que ese tonto se anime a dar el paso.

Algo me dice que las cosas serán diferentes...

El timbre de la puerta solo reafirma mi teoría, ahora que T/n vive conmigo el dúo de tarados vendrán a buscarla siempre ya que mi casa les queda de paso hacia la escuela, estoy enterado que esto molesta un poco a Josuke porque ya no tendrá su momento a solas con ella para darle los buenos días como lo solía hacer antes. Ahora tiene que tocar MI puerta y verme a mi antes de verla a ella. Era obvio que él trataba de ser amable solo para que yo le de chance de entrar a mi casa a esperarla.

— ¡Nah!, quédate ahí afuera, ya bajara ella.

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T/n despertó ajolotada, llegó el retorno a clase... con una pereza infernal se preparó y desayunó lo más rápido posible.

—... ¡Ah! Otro bolígrafo por si Okuyasu me roba el primero, y una agenda donde anotare mis pendientes, bueno dos, estoy segura que esta la puedo dejar tirada en el salón –la chica reía mientras empacaba sus cosas en su mochila. Comparar este día con su primera vez en abril, hizo sentir que Morioh ya era su segundo hogar y que al fin se sentía muy cómoda aquí.

Al sonar el timbre su pulso se aceleró, tenía la corazonada de quien podría ser... bajó corriendo con una tostada a medio morder en la mano.

— ¡Chicos! yo creí que nos reuniríamos en la escuela.