22. Oliver Lindbergh

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Oliver Lindbergh

Un mes antes de la boda de los Karlsson

Hace meses que William, mi Consigliere me había hablado acerca de Derek. Lo habían visto en el territorio de los Karlsson aquello me enfureció. 

Dos dudas vinieron a mi mente: ¿Me había traicionado? y ¿por qué querían los Karlsson al gatito?

—Quiero matar a Karlsson.

—No puedes matarlo así como así. - dijo William.

—Puedo, accidentes pasan todos los días.

Bronn solo rodo sus ojos.

—Se que es nuestro principal enemigo, pero, no podemos matarlo ahora. Si eso lo podemos hacer el día de la boda de Ean. - hablo esta vez Bronn.

Sonaba tentador pero, sacudo mi cabeza como alejando aquella idea.

—¿El coso está listo?

—¿El coso? - pregunto Bronn levantando la ceja. - ¿Te refieres al helicóptero?

—¿Cuál otro coso, Bronn? - ironizo de mal humor.

—Si, está afuera esperando. Ve yendo tú, me iré a despedir de cierta morena.

—Don antes, hay algo que debes saber. - hablo Bronn.

—Deberá esperar, primero quiero despedirme de Alessandra y partir a la villa de Volkov. Sacarle una confesión y divertirnos un poco. - ironizo sacando mi cuchillo de cacería.

Bronn afirma, abriendo las puertas de mi despacho, guardo el cuchillo en su funda, alrededor de mi pierna. Esta vez he dejado de lado mi costoso traje, por una camisa y pantalón negro, botas y una chaqueta de cuero. 

Salimos del despacho, mientras bajamos las escaleras me encuentro con Dimitri, el encargado de la seguridad de toda la mansión, le pregunto donde esta Alessandra Romano. 

Este me contesta que se encuentra en la piscina climatizada.

Al preguntar por Alessandra siento detrás de mi esa aura negra de mi "underboss", regularmente esta de buen humor cuando sabe que iremos a torturara a un traidor de la organización. 

Pero, desde que le presente a Romano esta más distante, ausente. ¿Qué mierda le habrá pasado?

Es como mi hermano, joder. 

Puede que no nos hayamos criado de igual manera, él se crio en Alemania. 

Su madre, Connie se fue detrás de esa puta de Tina Mancuso, parte de su infancia la vivió con ellas dos y con el hijo de Tina, alguna vez me lo ha mencionado, se notaba que tenían una gran amistad esos dos, pero algo paso entre ellos y no volvió a saber de ese chico de pelo alvino.

Bronn desde que vino a Rusia se volvió un animal salvaje, mientras que, yo un niño rico, ya tenía al menos una pila de cadáveres a mi espalda.

Mi padre siempre me puso en situaciones de riesgo.

Bronn no se doblega ante nada, ni a mis puños o mis palabras, entrené sobre él como un jodido saco de boxeo, hasta una noche en la cual se defendió y me hizo sangrar.

Nadie, nunca, jamás, me hizo sangrar...

Ese maldito privilegio solo lo poseía Sonny Lindbergh.

Nos hemos salvado tantas veces que perdí la cuenta, fue el primer mitad ruso mitad italiano en tomar el juramento de la organización. 

Alessandra se encuentra en, definitivamente, el mejor bikini de la historia; dos trozos de tela casi inexistentes cubriendo solo lo esencial.

COBARDE: MENTIRAS || Saga Mancuso #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora