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27 de noviembre, 2016
Beverly Hills, California.
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El día había llegado más rápido de lo que pude haber pensado, la casa estaba comenzando a quedar vacía poco a poco y todavía no contaba con alguna respuesta y eso estaba estresándome un poco.
—¡Hey Ash donde van estas cajas! —preguntó alguien desde la puerta.
—¡Van al último, son cosas frágiles! —respondió el castaño bajando las escaleras con dos cajas en los brazos.
Ashton había venido a ofrecerse como ayuda para la mudanza, también mis amigas habían decidido venir, Diane seguía empacando las cosas en la cocina mientras que Alicia estaba pasando cajas de mi habitación a la escalera.
Yo estaba tratando de ordenar mis cosas más frágiles que había dejado en la sala, todos estábamos trabajando, sólo que mi nerviosismo por saber si seré o no aceptada está interrumpiéndome. Y Ashton se dio cuenta de ello.
—¿Todo bien cariño? —susurró preocupado mientras me tocaba el hombro.
—Sí...sólo estoy pensando en unas cosas.
—¿Sigues dudando de la respuesta?
—No puedo evitarlo...tengo miedo de estar haciendo esto y que no me funcione. No podría soportar pasar adaptarme a una nueva ciudad otra vez yo sola.
—Hey Kaede —tomó mi rostro entre sus manos para hacer que lo viera a los ojos—. Todo va a salir bien, te lo prometo que lo hará y cuando menos te lo esperes tendrás una carrera exitosa, yo sé que así será —sonrío antes de plantarme un beso suave en los labios—. Confía en ti y en lo que está por venir.
—Desearía poder llevarte conmigo a todos lados...
—A mí también me gustaría, pero ahora ambos tenemos cosas que hacer en ciudades diferentes, pero te lo dije antes, siempre que necesites ayuda o alguien con quien hablar yo siempre estaré disponible para ti.
Me relajaba escuchar eso, pero no podía relajarme completamente, tenía bastante estrés acumulado de los últimos días y estaba pasándome factura ahora mismo, las mudanzas siempre serán algo que ponen mis nervios y estrés de punta.
Pero por alguna razón esta vez se siente completamente diferente a cuando salí de Brooklyn para venir a California.
A pesar del poco tiempo que viví en esta casa, me estaba resultado algo difícil dejarla, creo que me había encariñado demasiado rápido con ella. Después de todo había pasado varios momentos importantes aquí, pero sin duda era un sentimiento diferente al dejarla que cuando dejé mi casa de toda la infancia y adolescencia.
Tuve que seguir empacando, teníamos que estar en el nuevo departamento antes del atardecer, para poder desempacar un poco o lo necesario.
Tres horas más fueron suficientes para vaciar completamente la casa. Y cuando me di cuenta que no había nada sentí algo en mi corazón.
La casa que había sido mi refugio los últimos tres años ahora estaba vacío y no podía explicar lo que eso me transmitía.
—Kaede las cosas están listas...es hora de irnos.
Escuché la voz de Ashton desde la entrada principal, pero ahora mismo yo seguía en la sala conteniendo un poco las lágrimas...no pensé que esto me podría tan sentimental.
—¿Te encuentras bien cariño? —preguntó casi en un susurro.
Ahora se encontraba a un lado mío esperando paciente mi respuesta...hasta que volteé a verlo y le di una sonrisa algo nostálgica y él me la devolvió, creo que fui muy clara con mis emociones en ese momento ya que sin decir una sola palabra él me abrazó.
—No pensé que esto me pondría así —dije tratando de evitar el llanto.
—Es normal Kaede, no trates de esconder tus emociones, llora si es lo que quieres, ríe si lo necesitas y grita también si es necesario —murmuró mientras me acariciaba el cabello.
—Si llorara ahora mismo, estoy segura que lloraría más que cuando dejé la casa de mis padres.
—Puedo comprenderte, es un sentimiento diferente, está fue tu primer casa, una con la que posiblemente te esforzarte demasiado, dejarla es difícil.
—Muy difícil...no creo exagerar si digo que está casa me vio crecer de manera profesional y quizás también emocionalmente. Está fue la casa que me ayudó a perseguir mi sueño y me duele saber que tendré que dejarla para seguir persiguiendo ese sueño.
—Son los pequeños pero significativos sacrificios que tenemos que hacer por nuestros sueños Kaede...pero piensa en que todo valdrá la pena, nada será en vano.
—Quiero pensar que así será.
—Ya te dije Kaede...no dudes.
Estuvimos abrazados unos pocos minutos hasta que decidí que era momento de irnos, pero aún así le pedí a Ashton que me dejara un momento sola...quería cerrar este capítulo para poder continuar con otro.
Le di un último vistazo a mi hogar, recordando todo lo que viví en él, me había regalado valiosos años, sin duda lo recordaré por mucho tiempo.
Estaba bajando de las escaleras para por fin salir cuando sentí que mi celular vibró en el bolsillo de mi pantalón por lo que me detuve para ver de qué se trataba.
Vi que era un mensaje de mi correo, por lo que no dude en verlo. Y apenas mis ojos vieron las primeras palabras, mi corazón se detuvo y en mi rostro se plasmó una sonrisa.
Estimada señorita Kaede Sinclair. Es de mi agrado poder darle la bienvenida al equipo de Vouge Magazine, su solicitud fue aceptada y se espera contar con su presencia el día 5 de diciembre del presente año para su bienvenida y presentación física.
Lo había conseguido.
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𝗠𝗢𝗥𝗘 | ashton irwin
Fanfic«𝘞𝘩𝘺 𝘥𝘰𝘦𝘴 𝘪𝘵 𝘧𝘦𝘦𝘭 𝘭𝘪𝘬𝘦 𝘸𝘦'𝘳𝘦 𝘮𝘪𝘴𝘴𝘪𝘯𝘨 𝘰𝘶𝘵?» ♦ Kaede parecía tener una vida normal y bastante rutinaria, una joven fotógrafa que había comenzado su vida de independenci...