Las Aventuras De Una Sirena Caliente

Capitulo 93

Inconscientemente agarré el brazo de Agares y me retiré al agua, pero me bloquearon docenas de armas que nos apuntaban. Miré a mi alrededor inconscientemente, las aguas poco profundas cubiertas de arrecifes todavía estaban bastante lejos de las aguas profundas, y no tenía dudas de que Agares y yo seríamos tamizados por estos soldados japoneses antes de escapar al agua.

Agares me abrazó en el agua inmóvil, su cuerpo obviamente estaba en estado de excitación en este momento, lo que hizo que su expresión fuera extremadamente horrible debido a su paciencia. Observó sombríamente a los soldados japoneses que lo rodeaban, de modo que ninguno de ellos se atrevió a acercarse a nosotros durante un rato. Puedo ver por sus ojos nerviosos que deben sentir que Agares es una criatura peligrosa con la que es bastante difícil tratar.

Agares me abrazó en el agua inmóvil, su cuerpo obviamente estaba en estado de excitación en este momento, lo que hizo que su expresión fuera extremadamente horrible debido a su paciencia. Observó sombríamente a los soldados japoneses que lo rodeaban, de modo que ninguno de ellos se atrevió a acercarse a nosotros durante un rato. Puedo ver por sus ojos nerviosos que deben sentir que Agares es una criatura peligrosa con la que es bastante difícil tratar.

Si no me llevas, entonces puede que no sea un gran problema para Agares escapar de este cerco. Tal vez sea una mejor opción para nosotros actuar por separado. Pero si algo me sucede en este tiempo y espacio, ¿qué será de mi futuro destino? ¿Significa eso que no seguiré existiendo en esta órbita espacio-temporal?

Miré a su lado, pensando ansiosamente, dudando si alejarlo, pero rápidamente descarté la idea, porque no podía soportar el dolor de estar separados nuevamente y los cambios que encontraríamos cuando actuáramos solos. arriesgar la muerte para luchar junto a él.

Como si escuchara mi corazón, Agares de repente susurró junto a mi oído: "Nosotros... los obedecemos".

Luego, miró hacia atrás en dirección al bote donde Shinichi atrapó a la especie joven, entendí sus pensamientos de inmediato, Agares quería para irrumpir en el interior del enemigo, y no parecía haber mejor salida que esta, y el ejército japonés podría estar estacionado cerca. Al ver que se reducía el cerco de soldados japoneses, supe que si no mostraba ninguna rendición, podrían usar las bayonetas de sus armas para obligarnos a obedecer.La brutalidad sensacional del ejército japonés durante la Segunda Guerra Mundial me hizo pensar que me sentía un escalofrío cuando pienso en ello. Inmediatamente levanté las manos, me paré frente a Agares y grité en japonés: "¡No nos lastimen, no tenemos hostilidad! ¡Por favor, no disparen, esta sirena no los atacará!"

"¡Dile que venga a la orilla!" Gritó un soldado japonés más cercano a nosotros, la punta del arma se empujó hacia adelante de manera demostrativa, y la punta de la bayoneta afilada vino directamente frente a mí, y la garganta de Agares,fue un rugido en un instante, y fui empujado hacia atrás violentamente. Las garras palmeadas apenas podían sostener la hoja, la cola de pez se levantó y el cuerpo instantáneamente se estiró a una altura de dos metros, y el soldado fue levantado de la arena en una vez, lo arrojó a un lado del arrecife y rodó hacia el mar con un estruendo!

"¡Agares!",

exclamé. Como resultado, hubo una conmoción en el área circundante, el cerco se redujo rápidamente y el sonido de las armas que se cargaban y hacían clic sonaba uno tras otro. Rápidamente protegí a Agares y me retiré al arrecife, pero Agares se inclinó y lo sostuvo. apretadamente con su cola de pez, se envolvió alrededor de mi cuerpo, me arrastró detrás de él, luego imitó mi apariencia y levantó los brazos, imitando el japonés que acabo de hablar, pronunciando una serie de sílabas ambiguas pero reconocibles: "No lo haré... ataque ... ..."

Esos soldados se quedaron atónitos en estado de shock, y algunos de ellos incluso exclamaron en voz baja: "¡Oh, Dios mío, esta es una sirena que puede hablar el lenguaje humano! ¡Se está rindiendo a nosotros!" Ajá , estos idiotas ...