Extra Descendientes

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"Feliz cumpleaños, mi Desharow".

Medio dormida y medio despierta, entre oleadas de mareo y calor, escuché a Agares murmurar suavemente junto a mi oído, lo que me sobresaltó.


¿Hoy es 10 de marzo? Es mi cumpleaños... y también la fecha de mi renacimiento en el nido materno. Esta sensación... algo no está bien en mi cuerpo.¿Podría ser...?


¿Cómo es posible que hoy... haya llegado otra vez la época de calor?



Jadeé desordenadamente, casi incapaz de responder a la bendición de Agares, y antes de que pudiera armar una oración completa, él selló mis labios


con los suyos.


"En......."


Sus anchas garras palmeadas me agarraron por la cintura. Agares me abrazó con fuerza en el suave y húmedo abrazo del nido materno. Nuestras colas se habían entrelazado cuando dormíamos y no se habían separado. Debido a la influencia del calor, mis sentidos se volvieron particularmente sensibles. En ese momento, el simple roce y frotamiento de nuestras escamas despertó un placer hormigueante como corrientes eléctricas, varias veces más intensas de lo habitual, que se extendieron desde la punta de mi cola hasta mi columna vertebral. A pesar de haber pasado por varios celos con Agares, todavía me sentía impotente, solo capaz de seguir su ritmo... fácilmente, me llevó a la cima.

"Agares... ¡wu! ¡Ah, ah, ah!


La marea de pasión durante el período de celo era extremadamente turbulenta. Luché como si estuviera luchando en un mar tempestuoso.

Nuestras colas fuertemente entrelazadas formaban un nudo apretado, encajando a la perfección, pero ni siquiera esto parecía poder satisfacer la sed de mi


cuerpo y mi mente.

Mis garras palmeadas arañaron involuntariamente la espalda de Agares, clavándose en su piel, esperando que llegara más


profundo. Influenciado por mí, Agares se excitó aún más de lo habitual, llenándome incansablemente una y otra vez, liberando mi lujuria a torrentes.


No sé cuánto duró esa loca pasión. Esta marea de entusiasmo salvaje, parecida a un tsunami, fue disminuyendo poco a poco, dejándome sin aliento


como si hubiera sobrevivido a un desastre. Me agarré del cuello de Agares, mi visión, que antes se había oscurecido, finalmente se aclaró y pude ver su rostro con claridad.

Agares parecía haber comido hasta saciarse, parecía estar muy satisfecho con mi actuación. Claramente, este tipo probablemente deseaba que estuviera en celo todos los días, porque normalmente no podía satisfacer el deseo del jefe que era más profundo que la Fosa de las Marianas.

"¿Estás satisfecho con tu regalo de cumpleaños,Desharow?" El se rió entre dientes.



¿Qué regalo de cumpleaños... ? Me di cuenta. No se estaría refiriendo a sí mismo, ¿verdad? Desvergonzado... Me da este tipo de regalo todos los días; ojalá me diera menos. Incluso en mi cumpleaños, me dio el doble de cantidad. Hice pucheros, sin energías para continuar. De repente, sentí un movimiento en mis escamas.


Bajé la mirada y vi que mi abdomen inferior temblaba levemente. Junto con una gran cantidad de mucosidad que supuraba de entre la pequeña grieta


de mis escamas, había una esfera cristalina y brillante del tamaño de un pulgar.


--De repente fue... mi espora. Mi primera yoila.


Me sobresalté e instintivamente lo pellizqué y lo acaricié. Una sensación y un pensamiento indescriptibles me invadieron y casi me hundieron en un

Las Aventuras De Una Sirena Caliente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora