Quemaduras en la piel

7° Beso de buen día

Shadoune era de esa clase de tipos que adoraban las cosas bonitas, tiernas y débiles. Más que adorarlas le gustaba saberse capaz de poder protegerlas.

Quackity y Missa cumplían con todo eso. En el fondo sabía que ambos eran fuertes y diferentes a esas otras cosas débiles (o personas) que tanto le encantaban. Sobre todo el híbrido de pato, escondía un secreto así como el mismo, sin embargo Shadoune no quería averiguarlo a menos que el pato se lo dijera, quería merecer esa confianza.

Spreen había insistido mucho en lo de no fiarse al 100% de él, sabía que Quackity fingía ser un bobo y no le importaba, por eso estaba en contra de investigarlo.

Le tenía aprecio y cariño... Cómo a cualquiera de sus otros compañeros.

No le importaba mucho el que Rubius lo proclamara como suyo porque no era celoso, el oso pardo no se metería con el si trataba de ir más allá con Quackity.

.
.

O eso creyó el.

.
.

- ¿Se puede saber por qué tú y mí Quackity pasan tanto tiempo juntos? - el híbrido le había lanzado aquella pregunta una mañana muy temprano mientras se preparaban el desayuno.

- ¿Qué pasa? ¿Estás celoso de nuestra relación? -

El castaño se ahogo con las hojuelas de su cereal - ¡¿Ah?! ¿Nuestra relación? ¿Desde cuándo? -

- Desde siempre - contestó burlón - Nuestra relación de amigos es muy bonita -

Rubius lo observo con una ceja arqueada - ¿Eres bobo o qué? -

- ¿Esperabas que dijera otra cosa? -

- Pues sí, te la pasas regalándole cosas y pegado a él, por cierto haces lo mismo con Missa... - entrecerró los ojos y se cruzó de brazos - ¿A qué estás jugando francés? -

- ¿Yo? - pregunto con inocencia - Yo no juego a nada contrario a ti - levantó un poco su máscara para poder darle un sorbo a su café.

- No sé que planeas pero lo averiguaré y lo arruinare -

- No seas malo con pato, por culpa de esa actitud es que tus relaciones nunca funcionan y si quieres algo serio con Quackity tienes que cambiar -

- ¿Y quién dice que quiero algo serio con él? -

Shadoune dio un largo sorbo a su bebida casi terminandosela, lo iba a necesitar si quería seguir tranquilo y no darle un buen golpe al oso - No sé, tal vez tu afán de alejarlo de nosotros y de decirle MI pato -

- Pfft son bobadas solo estoy jugando -

- ¿Entonces no te molestaría que quisiera quedarme con pato, quedarme en serio con él? -

- En realidad no... Quackity se puede besar con todos los de la base si así lo desea - frunció el entrecejo mientras trataba de distraerse mirando sus uñas.

- Mientes -

- Piensa lo que quieras - se levantó dándole la espalda al francés, fingiendo lavar su plato. Escucho la adormilada voz de Quackity y Missa entrando a la cocina, se giro a saludarlos pero su sonrisa se borró tan pronto vio como Shad estaba inclinado sobre Quackity, miro sus alas aletear nerviosas - ¡Ey, ey...! -

El de gorro no se espero ese recibimiento por parte de su amigo, había logrado ver parte de su cara y eso le había emocionado, pero el que se acercara y lo besara tan cerca de la boca lo dejo en blanco.

- Bonjour mon beau petit canard  (Hola mi hermoso patito) - la bonita sonrisa ladeada y el tono de voz en perfecto francés habían hecho que por poco Quacks pegará un gritito de adolescente enamorada - ¿Dormiste bien? -