La distancia entre tú y yo | LUMITY | •Adaptación•

25

Miro entre los estantes del Ejército de Salvación con Amelia, tratando de no pensar demasiado.

Ella suspira.

-Supongo que no entiendo lo que ha pasado.

-¿Qué es lo que hay que entender? Tiene novia. Estoy segura de que ese es el fin de la historia.

Hace un par de días que no la veo, y, cuando no está, siempre puedo pensar en las cosas con mayor claridad.

-Pero su forma de mirarte es tan... -Se detiene, tal vez al darse cuenta de que así no está ayudando en absoluto-. Lo siento. Cambiemos de tema.

Sostiene una camisa en alto y me mira levantando las cejas.

-Ese color no te queda.

Vuelve a dejarla en su sitio.

-Y ya que cambiamos de tema, ¿Qué pasa con Hunter? Le gustas mucho.

-A Hunter le gusta quien quiera que tenga delante en ese momento.

-Vale, tal vez tenga la capacidad de atención de un insecto, pero creo que podría sentar la cabeza. -Levanta otra camisa y yo asiento con un gesto, así que la añade a la pila creciente que lleva sobre el brazo-. De verdad que es un tipo increíble cuando lo conoces. Van a tocar mañana en La Playa, y para ellos es muy importante. Deberías venir.

Debería ir. Es cierto que Hunter pega mucho conmigo. A mi madre le gusta, a mi mejor amiga le gusta, Y sé que a estas alturas a mí también podría haberme gustado, si no hubiera otra persona en medio.

Mi mano se detiene en el traje negro, el que encontré cuando vine aquí con Amity. Me sorprende que todavía se encuentra aquí. Es increíble. Lo sacó y paso una mano por la tela.

Amelia suelta un jadeo.

-Es precioso.

Vuelvo a dejarlo en el estante, y pongo la prenda de al lado, un horrible mono de licra, justo delante de él.

-Ah, ni de coña -dice Amelia, que se acerca a mí y libera el traje-. Te lo vas a comprar.

-No.

-Si.

-¿Por qué? ¿Dónde podría ponermelo?

-Eso es lo de menos. Si encuentras algo como esto, tienes que comprarlo. Este es el tipo de traje en torno al cual planeas un evento.

Me muerdo el labio.

-No tengo cuarenta dólares.

-Yo si, así que te lo voy a comprar. Será mi regalo de compensación porque te haya jodido una tipa rica.

Me río un poco.

-Te lo devolveré.

~~ • ~~ • ~~

Amelia tenía razón: La Playa, un club cuyo nombre es demasiado literal, es un recinto mucho más grande, y me sorprende ver cuánta gente ha ido para escuchar tocar al grupo Los Hexidianos. Las olas se mueven detrás del enorme escenario, y el viento salado mejora la actuación. Es un concierto genial, pero yo ya estoy planeando mi estrategia para marcharme pronto. De todos modos, no conseguiríamos hablar con los del grupo después del concierto con tanta gente tratando de atraer su atención.

Amelia ha hecho unas horribles camisetas con los integrantes del grupo versión caricatura, y yo llevo una en contra de mi buen juicio.

-Dos canciones más y tengo que irme -le gritó a Amelia mientras Hunter canta con esa voz suave como la miel.

-Sabia qué tratarías de marcharte temprano, así que he hecho planes para después del concierto.

-¿Planes? ¿Qué quieres decir?