𝕎𝕚𝕥𝕙 𝕒 𝕥𝕒𝕤𝕥𝕖 𝕠𝕗 𝕒 𝕡𝕠𝕚𝕤𝕠𝕟 𝕡𝕒𝕣𝕒𝕕𝕚𝕤𝕖

Capítulo I

Tony había desembarcado recientemente de un barco que venía desde Cuba, obteniendo recientemente su "Green Card" la cual Frank López le había prometido por el asesinato de Emilio Revenga.
Él y su mejor amigo Many habían llegado al país, pero aún no obtenían respuesta de Frank, y comenzaron a buscar trabajo.
Ambos encuentran un restaurante callejero en frente de un club nocturno, los amigos discuten algunos minutos, Tony mostraba negatividad para trabajar ahí. Al final Many lo convence de al menos preguntar, diciéndole que en todo caso sería temporal, Tony accede y ambos van a la puerta de lugar, al llamar a la puerta un joven, los recibe.

-X: Si?

-Many: Buenas tardes, mi amigo y yo estamos buscando trabajo...y nos preguntábamos si están contratando...

-X: Mmm...esperen aquí, creo que necesitaban un lavaplatos y alguien que atienda las órdenes, pero... iré a preguntarle al jefe.

-Many: Gracias...

Aquel joven pelinegro sonrió un poco, dirigiendo su mirada a Tony

-T: ¿Qué pasa? No hay empleo

Dijo aquel hombre acercándose hacia su amigo.

-Many: El chico fue a corroborar, no debe tardar...

Algunos segundos después, el chico regresó con su jefe, éste ultimo miró a ambos

-Jefe: Tú

Señaló a Many.

-Jefe: Atenderás a los clientes...y tú

Señaló a Tony.

-Jefe: Serás el lavaplatos ¿Entendido?

Aquellos hombres se miraron entre sí, y el de la cicatriz soltó un suspiro algo pesado.

-Many: Entendido.

-Jefe: Michael, enséñales el lugar y enséñales sus puestos.

-M: Enseguida, chicos, síganme por aquí

Dijo aquel joven entrando al camión.

-M: ¿Y cuáles son sus nombres?

-Many: Me llamo Many y el, es Tony

Dijo señalando al de la cicatriz

-M: ¿Tú amigo es mudo? ¿O así de serio es siempre?

-T: No, no soy mudo, chico... Pero no tengo nada de qué hablar.

-M: Vaya carácter... En fin, soy Miguel... Michael, para lo gringos éstos, Siempre acomodan las palabras para su comodidad, es un placer.

-T: ¿Tienes algún problema con mi carácter o qué te pasa?

-Many: Tony, tranquilízate, solo está tratando de ayudarnos.

-M: Vamos, Tony, no era para que te molestaras... Simplemente quería ser amable... Bueno, Many, tú te quedas aquí, aquí es donde se toman las órdenes y por esa ventana de ahí...

Dijo el chico señalándola.

-M: Ahí se dejan las órdenes con el pedido ¿De acuerdo?

-Many: Perfecto y, gracias.

-M: No hay por qué, Tony, sígueme por aquí.

Ambos caminaron un poco más hasta llegar a la cocina.