Capítulo III

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Aquel grupo de personas, habían llegado al club nocturno para cenar y beber un poco, la cena transcurría tranquila.
Frank, Omar y Tony, hablaban acerca de los negocios, Many ya se encontraba bailando en la pista, mientras que Elvira fumaba un poco.
   Frank le estaba dando consejos a Tony sobre cómo se manejaban las cosas ahí.

-Frank: ¿Sabes quiénes son ellos? 

Dijo señalando disimuladamente a un par de hombres que pasaban por ahí.

-Frank: Son Luis y Miguel Echeverría...
Tienen la distribución más grande establecida desde aquí hasta Huston y toda esa zona... ¿Que opinas?
  Mira, ¿Ves a ese gordo bastardo? El es Nacho Contreras, "El gordo" tiene más dinero que todo el mundo en éste lugar... El es un gran "Haza"

Omar y Frank comenzaron a reír, mientras Miguel veía a su alrededor, algo incómodo por la situación... realmente, Omar y Frank no le terminaban de agradar, y por el otro lado, Elvira no le agradaba, no solo por su personalidad, de alguien seria y arrogante, si no, por el como Tony la miraba.

-Frank: ¿Sabes lo que es un "Haza"?

-T: No, Frank, dime ¿Qué es un Haza?

-Frank: Es una palabra irlandesa para puerco, ese tipo siempre quiere más de lo que necesita, y no juega limpio, amigo... Así que todo se resume en una cosa, Tony... Y no la vayas a olvidar.
Lección número 1, no subestimes jamás, la ambición del otro ¿Cierto?

-E: Lección número 2, no te drogues con tu propia mercancía... 

-Frank: Así es, lección número 2, no te drogues con tú propia mercancía... Claro que no todos siguen las reglas...

El mesero interrumpió la conversación para dejar la botella de champaña de 1965, sirvieron en las copas e hicieron un brindis "Por los viejos y nuevos amigos".

-Frank: ¿Qué te parece, Tony?

-T: Sabe bien, sabe muy bien...

-Frank: Y tú, Miguel ¿Siempre eres tan callado?

-M: Soy más de escuchar, que de opinar realmente...

Tony miró al menor y el menor apartó la mirada un poco, mirando hacia la pista de baile.

-Frank: Bien...Tony, te compraré trajes de 550 dólares, a los 3... Para que se vean guapos... Por qué quiero que trabajen para mí... Quiero que ustedes, muchachos, trabajen con Omar... Vamos a hacer algo muy, muy grande el próximo mes... Vamos a traer nueva mercancía desde Colombia y si lo hacen bien, habrán cosas mejores ¿Qué dices?

-T: Eso suena divertido para mí, Frank... Oye ¿Quieren un puro? Aquí tengo...

-E: ¿Quieres bailar, Frank? ¿O quieres esperar a que te dé un ataque?

-Frank: ¿Yo bailar? Prefiero que me dé un ataque al corazón...

-E: Entonces púdranse aquí...

La chica se levantó, Miguel miraba de reojo a Tony, y observaba el como miraba a Elvira ¿Por qué se sentía tan mal?

-E: ¿Tú no bailas?

Dijo la mujer refiriéndose a Tony, eso había puesto un poco mal a Miguel, aún más de lo que ya estaba.

-T: ¿Yo? ¿Quieres que baile?

-Frank: Si, anda, Tony... Hazlo, baila, anda diviértete...

Aquel salió del sofá en el que estaban sentados, Miguel tuvo que levantarse también para que Tony pudiera salir. Una vez ambos se fueron, bajó del lugar para ir al baño y en busca de Many, no quería estar solo con Omar y Frank.
  Una vez llegó al baño, se refrescó el rostro con un poco de agua queriendo aclarar sus pensamientos acerca de lo que le pasaba con Tony.
   Salió del baño para buscar a Many y pedirle el favor de que lo llevara a dónde se había estado quedando desde que llegó ahi, pero no lo encontraba.
   Mientras trataba de encontrar a Many, observó a la distancia a Tony y a Elvira bailar, lo que lo hizo sentir aún peor, Tony le sonreía y ella también lo hacía disimuladamente, al parecer si había una atracción entre ambos, no como con Miguel y Tony, o al menos eso pensaba el.
  Después de unos minutos pudo encontrar a Many y fue hacía él.

𝕎𝕚𝕥𝕙 𝕒 𝕥𝕒𝕤𝕥𝕖 𝕠𝕗 𝕒 𝕡𝕠𝕚𝕤𝕠𝕟 𝕡𝕒𝕣𝕒𝕕𝕚𝕤𝕖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora