1.Ella es todo un desastre.

25.9K 300 92
                                    

Aquí está otra pequeña novela que he estado escribiendo desde hace tiempo, espero que les guste :) esta ya no es tanto ficción, sino ya un poco más de humor, comedia, algo contemporaneo y juvenil. No se olviden de votar, por favor, no sean lectores fantasmas! El voto y un comentario significa demasiado para un escritor- me puedo llamar así?- motiva mucho para escribir mejor. :)

P. D. Todos los capítulo tendrán imágenes, música de fondo o algunas de mis canciones favoritos, quizás sólo unas pocas o ninguna, que relaciono fácilmente con la historia. 

*Editado*

Capítulo 1

Espero que puedas perdonarme...

Las personas siempre son definidas por un fuerte característica en su vida; por ejemplo: Nick, talentoso; Eric, inteligente; Tara, conservadora; Hunter, petulantemente primoroso; Amanda, extrovertida; Angelina, presumida; e, incluyendo a todas las personas que tienen indefinidas características, tienen una palabra que las definía: volubles. ¿Yo? Una simple palabra: Torpe.

Y las cosas, como la misma palabra voluble, siempre se entrelazan en un punto de la vida, como en las características de una persona voluble, en un camino donde las cosas surgen de en medio de la nada, crecen como las ramas de un árbol, y se ramifican, llegando hacia un solo punto: la luz del día o de la noche, las estrellas, la luna, el sol, y ven todo, viven todo, y tratan de alcanzar las cosas tangibles e inexistente a la vez que se encuentran en la lejanía.

Y así sucedió.

Las cosas siguieron entrelazándose después de eso, reviviendo algunas veces los recuerdos en mi mente, los latidos de mi corazón, sonrisas que se dibujan y tu no lo notas, porque ya estás demasiado lejos, años de distancia. Mi pulso se revive ante cada recuerdo, tentándome a agarrar y sostener una pluma en mi mano, teclas en mis dedos, para volver a escribir todo una y otra ver, difundiendo lo que realmente sucedió.

Cuando se escucha sobre una historia, normalmente, se ve lo superficial. Pero todo, como en la vida tanto como en la ficción, tiene grietas; hay dolor en ellas, penas, verdad y ficciones. Dicen historias, al mismo tiempo, también dicen verdades. Pero, sobre todo, conectan todo de una manera inverosímil: línea con línea, tan imperfectas como se pueden ver, destruyendo todo a la vez, pero al mismo tiempo, creando un tramo que lleva hasta el final de un camino. Pero ésta historia no tiene final, tampoco comienzo. Todas las historias son un camino que puede empezar en el comienzo de algo y que siempre han estado conectadas con un pasado. Porque así son las cosas en la vida real: antes de nacer hay algo, la historia de los padres, los sueños, las desolaciones, y después de que te vas, también. Todo se conecta. Y todo fue así. Los años vinieron corriendo de una gota de agua a otra, y con ellas, una humorística y dolorosa realidad.

Todo comenzó antes y después de hubiera comenzado, en una tediosa clase de español, sentada en mi pupitre, quitándome el esmalte de mí uñas, un acto severamente rebelde: no nos era permitido pintarnos las uñas en el instituto.

No me podía culpar, el día anterior había estado demasiado aburrida y no había tenido nada que hacer, así que pinté mis uñas por tres largas horas consecutivas y, después de tener que meter a lavar mi edredón porque esmalte se había caído en él y de que mi mamá me gritara, pude, finalmente, tener mis uñas pintadas de un color rosa pastel— color que no sabía porque había elegido, ya que odiaba el rosa—. Lamentablemente, terminé de pintármelas a los doce de la noche y caí dormida.

La mañana siguiente, tenía una mancha rosa pastel en mi mejilla derecha y uñas pintadas.

Quitarme el esmalte de mis uñas no me quitaba el aburrimiento.

1. Venturas de la vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora