Vine por tu amor, ok?

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Lionel Messi contaba las horas al ritmo de su propio corazón y sus manos no dejaban de sudar, ni siquiera podía conciliar el bendito sueño sumando que hacer una conexión en la Ciudad de México por casi dos horas no ayudaban en absoluto y cuando al fin, abordó para la ciudad de Mérida fueron otras dos horas y medias de terror para su alma ¿Por qué? No tenía ni idea de como iba reaccionar Guillermo ante la sorpresa y sumando que tenían una plática importante; joder, el calor lo mataba con fuerza que tuvo que quitarse su chamarra apenas piso la ciudad. Tan diferente a su Argentina, a España e inclusive a la capital del país.

Aire limpio

Un calor terrible que le había sorprendido de estar casi a 36° grados y aún así, veía a los locales caminando de la manera más natural, riéndose y lo más loco, con suéter.

–         ¿Vos me están tomando el pelo? ¿Cómo esos pibes pueden andar así? –expresó para sí mismo. Otro suspiro por el inmenso calor, apenas eran las once de la mañana.

–         Te acostumbras wey, bienvenido a Mérida... la ciudad blanca che. – Expresó burlón un trabajador que pasaba junto a él y Lionel Messi, lo ignoró con un bufido.

Aunque si tenía que agradecer algo, era que el aeropuerto es pequeño a comparación del resto que conocía cosa que le hizo sonreír un poco. Por un momento frunció el ceño al escuchar como todo el que cruzaba junto a él lo saludaba que hasta se puso paranoico, pero se percató que los trabajadores e inclusive los locales estaban saludando a todos por igual; al fin iba caminando para la salida. Guillermo le menciono una vez que los mexicanos siempre eran muy sociales pero que los yucatecos, eran personas nobles.... Que inclusive le contó una historia que dudo por completo, aunque ahora están aquí, tal vez no era nada de mentira.

"De verdad pulga, fui a Celestún a reclutar personal para un nuevo Oxxo que están haciendo ahí y créeme que ahí, la pesca abunda mucho y deja más dinero. Prefieren eso, que estar trabajando para una empresa ¡Ganan hasta cinco mil pesos en una semana! Es la gran desventaja de vivir muy cerca de la costa, bueno, Celestún es la playa más lejana de este estado, PERO un día, después de terminar de entrevistar a un chingo de gente que gracias a Dios llegaron. Una chica sin ninguna intención de la nada regresó a pesar de que le dije que no quedó seleccionada... te juró que creí que me iba a golpear o gritar, pero grata la sorpresa fue que simplemente me dejo un traste de comida sin esperar nada a cambio. Desde ahí supe que la mayoría de los yucatecos son buen pedo"

Gracias a Dios, no aposto con su alfa o hubiera perdido su cabello por completo.

Lionel Messi solo sonrió un poco antes de detenerse en la salida del aeropuerto y caminar hasta una avenida principal donde lo estaban esperando, según le explico Sergio había un gran pasillo en el exterior y simplemente tenía que seguirlo. No fue tan difícil así que soltar lágrimas de felicidad al ver a De Paul y Sergio esperándolos no se hicieron a esperar.

–         ¡Bienvenido Lio! Pareces un camarón ¿Vos no soportas el calor de este país? – Dijo divertido Rodri mientras lo abrazaba con fuerza, reía de felicidad al ver después de tanto tiempo a Messi.

–         Déjalo en paz che, el pibe jamás en su vida había estado en clima como este ¿Acaso vos recordad tus primeros meses aquí? ¡Ya quería regresar a Argentina! – Sergio jalo al más bajo para abrazarlo con fuerza, extrañó a la pulga, su mejor amigo – Vos no sabes lo que nos costó venir a verte... tuvimos que mentirle a Guille, como amigo en todo un tipazo, pero como jefe. ¡Joded! Es tipo es muy riguroso pero buen líder, de eso no me quejo – Lionel alzó ambas cejas confundido ante esa noticia, quería decir algo, pero no podía cosa que no paso desapercibido por ambos argentinos que lo miraban confundidos, prefirieron subir las maletas al auto y parte del camino se quedaron en silencio hasta que Messi hablo un poco nervioso.

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