⭐ Capítulo 38⭐

146 20 0
                                    


— Taehyungie, tengo que conseguir un regalo para YoonYoon— dijo Jungkook, por al menos quinta vez en el día.

— Te dije que pensaras qué le puede gustar y lo compro, Jungkookie— dijo Taehyung, estaba trabajando en su computadora, debía entregar un anuncio de publicidad para su trabajo, no deba distraerse mucho— ¿Ya pensaste en algo?

— No… Dijo que le gusta mucho el azul y la ropa… ¿Un suéter azul?

— Me parece un buen regalo, Jungkookie — dijo el Rubio, sin dejar de mirar a la computadora.

— Pero estamos en invierno casi primavera, y un suéter no va a lucirse porque ya casi no se usan— dijo Jungkook, y Taehyung pensó que estaba siendo muy rebuscado.

— Hay bufandas o gorros o gustes azules también…

— ¿Crees que una bufanda le guste? Yoon nunca usa bufandas, ni sé si le guste.

— No lo sé.

Jungkook se quedó en silencio, Taehyung pensó que por fin iba a tener un momento de paz y suspiró aliviado.

— También le gustan los juguetes, ¿Y si le regaló un peluche de algo de color azul?

— Como quieras, Jungkook — murmuró Taehyung, en un tono bastante cansado.

Soportó a Jungkook hablando de lo mismo casi toda la tarde, hasta que finalmente se hartó y luego de entregar de forma apurada su proyecto de publicidad, decidió salir con él, ir hasta la jugueteria más cercana y comprar un peluche bastante grande de un dinosaurio color azul.

—¿Crees que le gustará? — preguntó Jungkook, mirando el juguete.

— Le va a encantar, Jungkook— dijo, mientras miraba la pantalla del celular, y los mensajes que llegaban de su equipo de trabajo, para corregir un par de cosas de su publicidad.

— Ni siquiera viste su regalo — comentó Jungkook, con el ceño fruncido.

— Es un dinosaurio azul, Jungkookie, muy bonito, y no tiene cambio— dijo Taehyung, en un tono evidentemente molesto que no le gustó al menor, así que decidió quedarse callado y abrazó la bolsa de plástico con el peluche dentro.

El Rubio iba a cruzar la calle, no tomó la mano de su novio como solía hacerlo siempre, cosa que le dolió un poco al Castaño, y siquiera se fijó antes de avanzar, continuaba viendo su celular, respondiendo mensajes.

Jungkook vió el auto llegar antes de que Taehyung llegará a dar dos pasos sobre la calle.

— Cuidado — lo hubiera gritando pero tenía miedo de hacerlo enojar, así que sonó como un susurro tembloroso.

Tomó su brazo y lo tiró hacia atrás, de la sorpresa el celular del mayor calló al suelo, siendo aplastado por la rueda del coche, prácticamente triturado, la bocina del auto lo hizo mirar asustado hacia él frente.

— Taehyungie, tienes que mirar antes de cruzar — dijo el Castaño, y Taehyung tenía el corazón muy acelerado por lo ocurrido, y sus ojitos estaban muy abiertos y con algo de lágrimas, parecía un oso asustado—. Ya, ven— Jungkook abrió sus brazos hacia él y lo abrazó, subiendo de nuevo a la vereda, dejó mimos en su cabello, mientras el Rubio temblaba ligeramente — ¿Estás bien, Taehyung?

— Sí, sí.

— Bien, ya pasó… — murmuró, en un tono suave, a Jungkook le gustaba cuando Taehyung lo consolaba con ese tono—. Vamos a casa, y todo va a estar bien.

Taehyung sólo asintió, tomó el celular del suelo, estaba todo roto y obviamente, no iba a encender, lo llevó para tirarlo a la basura luego.

Jungkook tomó su mano con firmeza, apretando ligeramente, para hacerlo sentir mejor, al llegar al departamento Taehyung aún permanecía bastante callado, y pasaron varios minutos en silencio, incluso, Jungkook se había dado un baño y tenía un pijama limpio, una vez en la cama, Taehyung fue hacia él para abrazarlo y acurrucarse en su pecho, escuchando sus latidos.

— Perdón por estar molesto hoy, Jungkook… Estaba muy estresado por el trabajo y no tenía paciencia para elegir el regalo para Yoon— murmuró.

— No podemos controlar cuando estamos enojados, Taehyung, está bien — dijo el Castaño, Taehyung solía decirle lo mismo.

Taehyung sonrió de forma tonta y completamente enamorado de la actitud de su novio.

— Gracias por salvarme de que me atropellaran hoy, Jungkookie.

— Eres mi novio, por supuesto que iba a salvarte— dijo, apretándolo entre sus brazos con cariño—, es lo que los novios hacen, porque te amo demasiado.

Taehyung sonrió demasiado, se acurrucó un poco más contra su cuerpo, Jungkook lo abrazó con una sonrisa encantadora.

— Te amo tanto, Jungkookie.

MemoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora