⭐ Capítulo 67⭐

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Taehyung ya no dejaba que Jungkook saliera del departamento, incluso habían faltado a su sesiones de terapia en grupo, el Castaño no entendía por qué, pero por más que le hiciera berrinche, Taehyung era muy firme en su decisión, y Jungkook dejaba de molestar cuando el mayor se ponía de mal humor.

Hoseok les traía comida para cuando necesitaban, y habían hablado con Jimin por teléfono para ver cómo estaban, Taehyung seguía en contacto con los padres de Jungkook debido al caso, y por las dudas, no habían vuelto a hablar con las otras víctimas en caso de que sus seres queridos también pudieran ser lastimados.

Así pasaron los días hasta que Jungkook tenía que ir a declarar a la comisaría, era la primera vez que salían y Taehyung estaba muy paranoico, Jungkook intentaba calmarlo tomando su mano y llamando su atención para sonreírle, aunque mucho no funcionaba, porque el Rubio estaba muy concentrado en ver a su alrededor para asegurarse de que nadie lastimaria a su chico de nuevo.

En la comisaría los atendió una mujer policía bastante seria, que hacía que Jungkook apretara la mano de Taehyung con nervios.

- Bien, para acelerar el proceso... - dijo la mujer, mientras acomodaba unos papeles del caso de Jungkook-. Los dos estarán haciendo la declaración en simultáneo, acompañenme- la mujer los guío fuera de la sala de espera hacia un pasillo, llegando a una segunda sala de espera, dónde estaban los investigadores, aún tomando un café y hablando entre ellos-. Se les harán preguntas por separado, serán acompañados de dos personas, un policía y uno especializado en la investigación de su caso, y-

- ¿Por qué por separado? - preguntó Jungkook, muy bajito, pero la mujer lo escuchó, haciendo silencio de golpe y mirándolo, haciendo que el Castaño se escondiera un poco detrás de Taehyung.

- Es por protocolo - respondió-. Cómo les decía... Se les harán una serie de preguntas, tienen derecho a guardar silencio, pueden consultar por los archivos que tenemos anexados a su caso para defender sus respuestas, estarán en una sala privada que cuenta con cámaras y micrófonos, lo demás quedará a decisión de ellos - hizo ademán a los cuatro hombres que estaban en la sala -. Es todo- hizo una reverencia a modo de saludo y se volvió por el pasillo, no habían pasado ni cinco minutos y Jungkook ya estaba asustado por aquella señora, así que Taehyung no sabía qué tan mal iba terminar todo.

El Rubio suspiró para tomar un poco de calma, no era momento para molestarse ni ponerse nervioso, ahora Jungkook necesitaba de él.

- Bien, amor, esto va a ser solo un rato, ¿Si? - dijo, con el mejor tono calmado y amoroso que tenía -. Después volveremos a estar juntos y te compro un helado, ¿Bien?

- No quiero ir si no estás tú - dijo el Castaño con un puchero en los labios.

- Yo tampoco, amor, pero así es como son las cosas, todo va a salir bien, y yo estaré en la habitación de al lado, y cualquier cosa que pase yo iré a buscarte.

Jungkook no se veía muy convencido, pero sabía que no tenía otra opción.

De esta forma se acercaron dos de los hombres hacia Taehyung primero, se lo llevaron a una sala pequeña, la puerta estaba justo frente a la sala de espera, y quedaba al lado de una exactamente igual, dónde iría Jungkook, el menor le dedicó un saludo con su manito antes de que el Rubio le sonriera y quedará solo otra vez, junto a dos hombres que parecía que podrían romperle la cara de un golpe.

En la soledad de la sala, los policías se presentaron, le dijeron que todo estaba siendo grabado, llevaban papeles copia de todo lo que tenían registrado hasta el momento, le dijeron un par de legalidades, y luego procedieron a hacer preguntas, comenzando con qué relación tenía él con Jungkook, cómo era su convivencia, cómo era él.

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