•Sedecim•

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El sol atravesaba las gradas para llegar al pasto donde Felix estaba acostado mientras inhalaba el humo de la hierba de su cigarro, para sentir como las toxinas relajaban su cuerpo, dando un poco de paz, hasta que sintió la sombra cubrir el sol, f...

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El sol atravesaba las gradas para llegar al pasto donde Felix estaba acostado mientras inhalaba el humo de la hierba de su cigarro, para sentir como las toxinas relajaban su cuerpo, dando un poco de paz, hasta que sintió la sombra cubrir el sol, fue cuando alzó la vista y ahí estaba el chico de sonrisa con hoyuelos y cabello oscuro.

—Así que este es tu escondiste —pronunció para acostarse a lado de Felix mientras tomaba el cigarro de los dedos pequeños de Felix

—Nadie viene aquí, así que puedo meditar —respondió Lix mientras miraba cono Jeongin fumaba, observo a detalle el rostro del contrario, lo pequeño de sus ojos cuando sonreía, los hoyuelos de sus mejillas, sus brazos delgados pero marcados, su nariz, sus pestañas…

—Deja de comerme con la vista —se burlo el contrario para mirar a Felix —chico cortadas

—Que horrible apodo —bufo molesto Felix para arrebatarle el cigarro —solo vienes a molestarme

—No, vine porque estoy interesado en ti —era extraño en mirarlo, su sonrisa decía una cosa pero sus ojos otra, pensó Felix —Felix, ¿por qué te cortas?

Esa pregunta sorprendió a Felix a quien tomó desprevenido, después de soltar el aire de sus pulmones casi en un suspiro miro el cielo, sintiendo la calidez del sol que traspasada entre las gradas para golpear su rostro.

—Alguna vez, ¿has sentido que vives en una simulación?, ¿qué estas viviendo la vida de alguien más?, —el contrario solo asintió levemente mientras observaba a Felix en silencio —yo parezco alguien popular o social, pero la realidad es que soy un asco en eso, las personas me hablan porque pueden sacar provecho de que soy un ratón de biblioteca o a veces el jefe de grupo, pero nadie me habla más allá de eso, por lo cual hay días en la siento que ni siquiera soy yo, donde veo mi cuerpo distante, por lo que cortarme, sentir el ardor del filo de la navaja rasgar mi piel, la calidez de la sangre recorrer mi mano, eso hace recordarme que estoy vivo…

Jeongin sonrió para acercarse a él y poner su mano en la mejilla haciendo que Felix lo mirase.

—No sé qué juego tiene el destino para nosotros Felix, pero mientras yo esté aquí, te prometo que no tendrás necesidad de recordarte a ti mismo que estás vivo.

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Los ojos de Felix se abrieron, recordándole que solo era un sueño, últimamente estaba soñando mas de lo normal, se sentó abrazo sus piernas y lloro en silencio, quería olvidar todo, cada detalle pero aun así lo recordaba, esos ojos que atravesaban su ser hasta llegar a su alma, calando sus huesos, esa sonrisa fría y cálida, Jeongin fue su coas y su paz en un instante, ahora él era la nada, no había nada que lo hiciera recordar que estaba vivo, ahora solo era un zombie, alguien que tenía que recordarse a sí mismo comer, tomar agua y estudiar porque si no lo hacia se perdería él mismo en la nada.

Se levantó abrió las cortinas y sintió el sol golpear su rostro. Lavo su rostro y se puso a limpiar su cuarto mientras reproducía un CD que Jeongin había grabado para Felix como regalo. Los pensamientos a veces nublaban a Felix pero este intentaba seguir avanzando en la limpieza mientras a su vez bailaba una que otra coreografía.

Así paso hasta sentir el ardor de su estómago, recordándole que no había ingerido alimentos, tomó el dinero que Minho le dio y fue a comprar comida.

Los deseos de tomar alcohol o drogas estaba ahí picando su ser como una avispa molesta por haber atacado su panal, pero tenia que ser fuerte, Minho le había dicho que se mantuviera sobrio y eso haría.

Los días pasaron en una psicosis, había días que parecía tener todas las energías del mundo y limpiaba hasta mover el último mueble, iba a la escuela estudiaba lo suficiente para después dormir por un día entero sin levantarse a comer, otro día se la pasaba comiendo todo lo que encontraba en su cocina.

La sobriedad era una mierda, al 5to día decidió que era mejor hacer ejercicio para olvidar un poco los temblores en su cuerpo. Después de casi 3 horas comenzó a caminar lentamente ya que sus pulmones ardían y sus piernas temblaban, no había visto la hora y ya pasaban las 9 de la noche, por lo cual camino a casa hasta que un auto conocido estaba estacionado a fuera de su casa.

Observo a Changbin el chófer personal de los Kim abrirle la puerta del auto.

—No me hagas esto —musitó al verlo, sabía que significaba eso

—Lo siento, sabes como son las cosas —respondió el musculoso hombre

—¿Seung o Tae? —preguntó antes de subirse.

—Tae.

Felix miro la ventana mientras era llevado a su destino, uno del cual no podía huir.

—Dónde sea que estés te debes estar riendo de mi, Inne.

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Seo Changbin, edad 26 años, guardaespalda y chófer de los Kim

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Seo Changbin, edad 26 años, guardaespalda y chófer de los Kim.

Gracias por leer.

M.K.

Drugs and revenge [FanFic - DanceRacha] 《JEONGLIX》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora