•VigintiQuattuor•

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El anuncio de su compromiso sería aquella noche, Hyunjin pasaría por él a la escuela y así escoger el atuendo que usarían, como cualquier pareja feliz de anunciar que unirían sus vidas, pero para Jeongin no era de esa manera, no estaba feliz ni em...

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El anuncio de su compromiso sería aquella noche, Hyunjin pasaría por él a la escuela y así escoger el atuendo que usarían, como cualquier pareja feliz de anunciar que unirían sus vidas, pero para Jeongin no era de esa manera, no estaba feliz ni emocionado.

Cuando se comprometió con Hyunjin se sintió emocionado, pues desde pequeño había estado enamorado del mejor amigo de su hermano, se puso triste cuando esté se fue a extranjero,  creyendo así que jamás tendría la oportunidad de confesarle sus sentimientos pero el destino parecía estar de su lado, porque Hyunjin regreso y parecía que ahora lo miraba como él siempre lo miro o al menos eso pensó.

Tenían un mes coqueteando cuando sus padres les sugirieron que se comprometieran ya que así ambas familias se unían podrían lograr cosas importantes. Era claro que el interés de aquella unión era más económico que amoroso pero para ambos no fue ninguna molestia.

Pero Jeongin con el tiempo se dio cuenta de la realidad de algo que sospechaba desde siempre, Hyunjin amaba a Minho, a su mejor amigo, si tuvo alguna vez una esperanza que eso fuera algo de su imaginación pero cuando su hermano, un adicto a la nicotina que siempre perdía los encendedores gracias a eso lo supo, si aquella noche que entró en la habitación de su prometido y encontró el encendedor de su hermano quien le había dicho que estaba con su amante, y el cual decía jamás entrar en la habitación de Hyunjin. Podría ser una coincidencia, pero no dos ni tres, ni la cantidad de encendedores que guardaba en el cajón de su cama. Los cuales le recuerdan lo poco que su hermano realmente lo amaba.

La traición de Hyunjin dolía poco comparada con la de Minho, su hermano quien decía amarlo y que sabía bien lo mucho que alguna vez amo a Hyunjin.

Jeongin sabía bien que era un x a la izquierda comparado con el exitoso Yang Minho el orgullo familia, el hombre perfecto ante los ojos de cualquiera, mientras el era el pequeño desastre de la familia perfecta a la sombra de su hermano mayor.

Sin embargo en aquella falsa vida, un encuentro lo cambió todo, la llegada de Lee Felix a su vida, era extraño, muy extraño como en poco tiempo parecía que su corazón necesitaba más de Felix de lo que su mente aceptaba y aquella noche no era la excepción.

Se sentía incómodo en aquel bendito traje, quería huir y estaba cansando de las falsas alegrías y felicitaciones, aquel día Felix le pidió verse fuera de la escuela en aquellos oscuros lugares, donde nadie sabía quién eran, donde el apellido Yang desaparecía y era simplemente “Inne”, donde podía jugar con sustancias que ni él podría recordar, donde podía tocar el cuerpo de Felix y sentirse libre. Pero tuvo que decirle que no, a la única persona que odiaba decirle aquello, tuvo que correr a los brazos de aquel mentiroso amante y sonreír mientras por dentro quería huir a la oscuridad del caos y la autodestrucción.

Camino hasta al balcón donde aflojo su corbata y tomo su móvil con desesperación, con la esperanza de que Felix aún estuviera despierto y así poder pasar la madrugada juntos.

Pero al parecer Felix no contestaría sus mensajes esa noche

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Pero al parecer Felix no contestaría sus mensajes esa noche.

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Felix había sido llevado a la su casa después de aquella comida en un silencio incómodo, lo que Minho le había susurrado lo había puesto nervioso, puesto creyó que había jugado sus cartas bien, ahora estaba sentando en medio de dos hombres lo solo le provocaban un caos en la  boca de su estómago que le hacía sentir mareado.

Cuando llego a su casa, sintió un alivio podría por fin descansar o al menos eso creía.

Minho bajo primero puesto estaba del lado de la puerta que daba hacia la banqueta donde Han se había estacionado. Felix se despidió con un sonrisa de Hyunjin quien lo abrazo con gentiliza, cuando salió pudo sentir la mirada penetrante de Minho quien se quedó a un costado para que este bajara, Felix solo le sonrió nervioso y Minho ni siquiera la devolvió la sonrisa por lo cual se apuro a buscar las llaves de su casa para entrar en esta.

Por su parte Minho no entró al auto, quería a Felix dentro de su casa para poder irse pero fue cuando lo notó, pudo ver bien aquel carro cerca, a una distancia prudente como si este estuviera esperando a que él se fuera, por lo cual camino hasta Felix tomo su mano y le miro.

—Entra al auto, hoy dormirás en mi departamento —fue más una orden que otra cosa

—¿Pero? —la mente de Felix era un caos y Hyunjin quien estaba dentro pero había visto aquello los miraba con extrañeza

—Ahora —la voz de mando de Minho hizo que Felix entrara casi de inmediato al auto y cuando este lo hizo aquel carro paso a un lado de ellos y fue cuando Felix lo pudo ver.

La sonrisa de Kim Taehyung.

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Ya no quiero ni terminarlo, el caso es que, mis historias no se están leyendo y ahora alguien coloco el mismo título de unos de mis fics y si lo buscan aparece primero que el mio, pero bueno.

En fin, gracias a quienes me leen.

Perdón no corregí nada y lo hago desde el móvil.

M. K.

Drugs and revenge [FanFic - DanceRacha] 《JEONGLIX》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora