XXXI

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No podía describir el como se sentía en ese momento, realmente estaba tan enojado con todos aquellos hombres que le pedían algo lo cuál era imposible para el.

-Majestad, necesita casarse- el segundo ministro hablo y todos los demás asintieron -El pueblo necesita tener a sus dos reyes.

Se encontraba sentado en el trono, su expresión era neutra pero su mandíbula la cual estaba bastante tensa lo delataba -Mi prometido aún no despierta.

El cuarto ministro dio un paso al frente -Lo sentimos, pero todos los ministros aquí hemos decidido que se case con la joven Karina o alguna de su concubinas.

Lo miro directamente a los ojos -¿Cómo pueden pedirme eso?- todos bajaron la mirada -YO SOY EL REY.

-Nosotros le otorgamos ese poder que usted tiene actualmente, debe cumplir con las leyes y hacer su deber- dijo el ministro de finanzas.

El segundo ministro volvió a hablar -Majestad, el joven Han no despierta y no hay señales de que mejore, entienda la gravedad de este asunto y comprometase con una persona.

El rey observo a cada uno de los presentes -Denme tiempo, se que el joven Han despertará, está reunión está finalizada- todo hicieron una reverencia, el rey se fue dejando a los ministros, estaba enojado pero también tenía mucho miedo.

El único lugar donde podría respirar a gusto sería en el jardín así que decidió ir, realmente ese lugar le traía buenos recuerdos de ese pequeño rebelde, respiro el aroma y pudo sentir como dejaba de sentir aquellas emociones horribles.

La reina caminaba por las afueras del jardín hasta que logro ver al rey sentado en el pasto, ella sabía todo lo que había pasado asi que se acercó a su hijo -¿Que harás?

Respiro profundo -Se que despertará.

Trataba de entenderlo pero ella no quería que destronaran al rey solo por un joven, le había costado tanto ser la reina de Armenia cómo para que su hijo perdiera todo por una decisión de amor -Majestad-

-Reina- interfirió -Prefiero dejar mi puesto de rey antes que estar con alguien que no sea Han Jisung, el único joven al cual amo con todo mi ser.

-Pero-

Se levantó del pasto antes de que alguien lo viera en aquella situación, observo a su madre y negó -No.

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Abrió la puerta, entro y después cerro bajo llave, no quería interrupciones y al momento de darse la vuelta observo a Hyunjin quién dormía tranquilamente sobre el pecho de Jisung

Fue lo más tierno, pudo sentir como sus lágrimas se deslizaban nuevamente por sus mejillas, se acercó a ambos y se coloco del otro lado quedando también sobre el pecho de su amado.

Despierta, despierta porfavor pensaba el rey mientras cerraba los ojos y entraba en un profundo sueño.

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Al despertar lo primero que vio fueron aquellos oscuros cabellos, su lindo amado dormía sobre su pecho, observo alrededor de la habitación y pudo notar que habían flores por todos los lados al igual que estaba en la habitación de su rey pero este había hecho unos cambios por completo y eso le hizo desbordar de amor, sonrió y beso la cabellera de su futuro esposo pero sintió que algo se movió del otro lado de su pecho, pudo notar a un pequeño de cabellos rubios como el oro, con una linda cara de ángel que también se encontraba durmiendo, ambos estaban durmiendo sobre su pecho y eso lo hizo sentir tan lleno de amor

MI REY-MINSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora