Pecados del Pasado

Escapadita (parte 2)

Me encontraba helada y quieta, hasta que reacciono, me miró al espejo y trato de arreglar mi alborotado cabello, empiezo a caminar hacia la puerta y logro reconocer ese auto blanco elegante estacionado frente a mi casa, me acomodo por última vez y salgo, ella sale del auto y se recuesta en la puerta del mismo, se quita sus gafas oscuras.

_ hola doña Adela ¿Qué necesita?

A: por ahora que me asegures que no me harán nada aquí.
(Mira a su al rededor paranoica)
_ es un barrio bajo, pero créame que es sano, no le tocaran ni un pelo.
A: entonces ¿por qué me están mirando como bicho raro?
_ porque eso es usted aquí, un bicho millonario entre gente mortal.
(Digo sarcástica)
A: oye
(Da una suave palmada con su mano en mi brazo y me brinda una sonrisa)
A: ponte algo más para salir, quiero llevarte a un lugar, te espero en el carro.
_ no desea pasar a mi casa?
A: no te incomoda?
_ no, para nada.

Ella camina hacia mi, y me toma por sorpresa de la mano, la dejo sentada en la sala y yo me voy rápido a la habitación, me doy un baño rápido, no sé que ponerme, encuentro un jean azul, una blusa negra de tirantes así que para cubrirme un poco me pongo un blazer de tela ligera y unos tenis y ya estoy decente para salir, ella al verme sonríe.

Le aviso a mi mamá que voy a salir y me voy, Adela entra al carro y yo entro al puesto del copiloto, abrocho mi cinturón y Adela el de ella, nuestras miradas están tan cerca, ella acaricia mi mejilla y se pone en marcha.

A: yo esperabas que salieras con un shorts extremadamente corto y un croptop igual de corto, es que así visten las chicas de ahora.

_ yo no hago parte de la moda de las chicas de ahora, me siento más cómoda mientras esté bien cubierta.

A: y eso me alegra mucho, siento pena ajena por esas chicas que visten así.

_ no me gusta esa forma de vestir, pero si a ellas les gusta y se siente cómodas así, yo no le veo problema, es decisión de cada quien.

A: soy chapada a la antigua, y soy de una familia muy tradicional, así que chocan muy fácil conmigo por estos temas.

_ si, mejor ni los toquemos.

Ella empieza a conducir a las afueras de la ciudad y llegamos a una casa muy bonita, alejada de todo, yo salgo y ella respira con libertad el aire puro.

A: nadie sabe que tengo está propiedad, ni mi esposo, ni mis hijos, absolutamente nadie, esta propiedad la tengo para cuando quiero escapar del mundo.

_ ¿Por qué me trajo aquí entonces? Este es su lugar seguro.

A: porque aquí nadie nos molestará.

Ella abre la puerta, y yo voy detrás de ella, el sitio está en orden, todo muy limpio.

A: tengo té frío y caliente, café, como desees el café, capuchino, expreso y demás, tengo jugo de naranja, agua, con gas y sin gas, tengo vino, whisky, champagne, ¿Qué deseas tomar?

_ lo que usted vaya a tomar.

A: yo tomaré una copa de vino.

_ bien entonces quiero una copa de vino.

Ella me daba tantas opciones que yo no sabía, así que preferí decir que lo mismo que ella iba a tomar.

Ella trae la botella y la destapa frente a mi, y me sirve, se sienta en el sofá conmigo.

_¿Por qué me fue a buscar y me trajo aquí?

A: vas directo al grano, eso es fascinante, tenemos cosas que hablar, asuntos que deben resolverse, como bien sabes antes de nos conociéramos físicamente, ya nos conocíamos en otro plano, hay una conexión entre tu y yo muy fuerte, y yo quiero romper esa conexión como sea, no quiero arruinar mi vida por una jovencita de 19 años, así que te traje aquí para que busquemos posibles soluciones para que acabemos con esto y yo vuelva a ser yo.

_ usted cree que yo tengo respuesta para esto, por dios esto es absurdo, no soy su varita mágica para arreglarle la vida.

A: eres una niña, tienes 19 años, sumándole que eres mujer y que también eres mi empleada, yo no puedo permitirme darle riendas a los sentimientos que se quieren salir de mi control, y yo sé que te pasa lo mismo, esto nunca va a suceder, eres una niña y yo una mujer que llevo kilómetros de vida, la diferencia de edad es enorme y la clase social ni se diga.

_ basta, usted cree que yo decidí nacer amándola a usted, a una persona que le importa su vida, su clase social, su dinero, y demás, ay por dios, no, yo no elegí esto, a mi tampoco me gusta amarla, esto fue a la fuerza, un karma estúpido, porque créame que yo ni siquiera me hubiera fijado en usted, tendría que ser muy estúpida como para que una chica como yo se fije en una engreída cómo usted.

Yo le doy una mirada a punto de llorar me pongo en pie y salgo de la cabaña, empiezo a caminar por todo el camino que minutos antes había recorrido en su coche, ella me empieza a seguir.

A: ¡Helen! ¡Helen! Ven aquí.

Yo la ignoro por completo.

A: no seas estúpida, estamos a kilómetros de la ciudad, y de tu casa aún más, vuelve a la cabaña...

Ey mis amores, ¿Qué creen que pase? Leo sus comentarios...