Bri Dominguez

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BRISA

—Como te sientes desde de lo de ayer— pregunta Dayana caminando a mi lado.

—Como crees que estoy— murmuró— Tú novia casi me mata a mí por pensar que yo ando atrás tuyo.

—No es mi novia, ya te lo dije termine con ella hace mucho. Solo que ella no parece entender eso por más que se lo diga.

—No me interesa con quien salgas, solo que no se vuelva a repetir.

—¿Estas celosa cierto?— solte una carcajada— Ríete pero estoy casi segura que te mueres de celosa, por mi y por eso no soportas que ninguna chica se me acerque.

—Me sorprende las películas que te montas en esa cabecita la verdad.

Las puertas del elevador se abrieron, salí dándole una última mirada a Dayana quien no dijo nada más, ella se fue a su salón de clases y yo a la mía. Se que soy influencer, pero tambien decidi que era mejor darle el mejor regalo a mamá y es poder tener un título universitario, por eso entre a la universidad de nuevo. Entre a mí salón y lo primero que me encuentro en mi silla son unas flores en mi mesa, a puesto que estas flores son de Dayana, porque quien más me las enviaría. Me acerque a leer la nota que tenía.

Quiero disculparme por el pequeño incidente que paso ayer en el club, por culpa de mi hermana, espero que acepte mis flores señorita Bri Dominguez.

Que tenga una linda mañana.
Atentamente Fede.

Quién diablos era Fede, dejé las flores a un lado y me dispuse a grabar vlogs que se tenia programado en mi agenda del dia de hoy. Durante las primeras horas me la pasé en el salon trabajando tranquilamente, lo que me pareció raro, es no tener la presencia molesta de Dayana a cada rato, no sé qué le paso hoy que no ha venido a ponerme de malas.

—Hola muñeca— rodé los ojos.

—Hola, tobillo.

La cara que puso Dayana era epica, golpe bajo, estaba segura que esa no se la esperaba y es que le había dado en su ego.

—Se te ofrece algo— pregunto— Porque si solo me vienes a fastidiar. Te puedes ir por donde viniste.

Dayana se acerca cada vez a mi poniéndome, nerviosa. No entiendo porque estoy así después del beso que ella me dio y yo se lo correspondi, nunca me había pasado algo así, pero la tentación era mucha que no pude resistirme.

—¿Qué estás hacie...?

Sus labios me callan por completo, sin querer cierro los ojos, correspondió a su beso. No se cuanto tiempo paso, pero solo se que sus labios son una adicción exquisita, su forma de mover los labios con los míos sincronizameten hacen que no me pueda despejar de esos, su sabor a menta y su suavidad me enloquecian.

—Te dije que después de volver a probar mis besos, se que diras que me haz olvidado, pero la manera que tu cuerpo reacciona ante mi tacto— susurra cerca de mis labios— Pero sabia que no te ibas a poder resistir más. No hay chica que se me resista.

—Eres una imbécil— la empujo con la poca fuerza que tenia porque el beso me descolocó— Te has aprovechado que tenía la guardia baja.

—Dirás misa...— hizo una pausa— Pero te ha gustado ¿no? No escuche que te quejaras preciosa.

—¡No me gusto fijate!— alzo la voz furiosa— Si solo haz venido a eso te puedes ir.

—Necesito que me ayudes con un problema de matemáticas que tengo— me guiña el ojo— Me dijeron que tu eres buena en esa materia y solo tu puedes ayudarme.

ONE-SHOT DE FAMOSAS - II (Historias Cortas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora