Nada es lo que parece

9 4 4
                                    

"Nada es lo que parece"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Nada es lo que parece". Esa frase se repetía una y otra vez en su cabeza. Definitivamente necesitaba un poco de orientación en el asunto. No se sentía con la capacidad de resolver ese acertijo por sí misma.

Apenas tuvo la oportunidad, colocó una nota sobre el pupitre de Malany, que se encontraba de lo más tranquila.

En cuando la chica desdobló el papel, pudo leer con una letra fuerte: "Nos vemos en Life".

Malany notó que Verónica temblaba antes de que se subieran al camión. Ella sabía que después de haber vivido algo como lo del día anterior, lo último que quería era revivir la experiencia como tenía que hacerlo todos los días a todas horas. Por lo mismo, la chica le extendió un pequeño dulce que tenía guardado en su mochila para momentos como ese.

El camino fue muy tranquilo. Verónica agradeció por lo bajo que aquello hubiera sido así. Después de subir a su habitación y que aquella enorme luz las cubriera una vez más, la chica se dejó caer sobre el enorme sillón de su amiga para finalmente respirar.

—Ahora sí, siempre siento un descanso enorme cuando venimos aquí —dijo la chica tomando una gran bocanada de aire.

Puki ya se estaba acostumbrando a ella, así que siempre la recibía con mucha emoción, saltando y lengüeteando su nariz. De igual forma pasaba con Javier, mientras las adolescentes hablaban, ambas creaturas corrían por toda la casa persiguiéndose.

—¿A qué conclusión llegaste? —preguntó Malany trayendo una taza de su delicioso té de flores.

—A ninguna, por supuesto. Era demasiado difícil —dijo la chica recibiendo la taza para tomar un sorbo. No sabía cómo era que todo eso le había resultado soso al inicio, si en verdad era muy agradable pasarla en el vecindario y en la casa de Malany.

—Oh, esto no es nada, comparado con el resto de cosas que haremos para mejorar tu vecindario.

El silencio que prosiguió, le indicó a Malany que quizá no era tan buena idea estar hablando de cosas que aún no eran ocupación de la chica. Meneó la cabeza, como intentando restarle importancia, y continuó lo que quería decir.

—Seguramente pudiste llegar a alguna cosa.

—Bueno... —empezó a decir Verónica, cuestionándose si acaso era lo mejor decir esas palabras—. En verdad, una última frase llegó a mi cabeza mientras reflexionaba... "Nada es lo que parece".

—¡Bingo! —soltó Malany dando un saltito.

—¿Quién dice "bingo"? —cuestionó Verónica soltando una risa.

—Las personas que saben que se necesita decirlo en muchas situaciones.

Malany parecía verdaderamente emocionada. Dio un salto pequeño en el aire y después se sentó a un lado de Verónica.

—Vamos a tu vecindario.

.·。.·゜✭·.·✫·゜·。.

Mientras caminaban hacia la zona donde aparecía la puerta para el vecindario de Verónica, aquella empezó a sentir nervios por todo el corazón. Era como si estuviera a prueba. Además, no podía evitar fijarse de vez en cuando en todo lo que pasaba a su alrededor. Se encontraba analizando todos los elementos del vecindario de Malany más de lo que le gustaría.

Life ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora