SOLAMENTE TÚ ( one piece)

16. estrés.

El cielo estaba oscuro a pesar que era de día, las nubes tormentosas se movían con el fuerte viento arrastrando todo a su paso,  las ojas, y las ramas de los árboles bailaban al compás del vendaval, y las pobres ojas que se caían de las ramas volaban con el viento o se quedaban pegadas al suelo mojado por la lluvia, una lluvia ligera, pero de esas lluvias dónde las gotas duelen cuando golpean tus brazos, combinado con el estruendo del las olas embrabecidas que golpeaban el muelle hacían del ambiente uno muy pesado, en especial para ella, para Hancock quien estaba parada en medio de un puente donde el agua del mar desbordaba el canal haciendo que sus zapatos ya estuvieran empapados, hasta sus medias, además de que la brisa y las pequeñas gotas que la alcanzaban mojaban su blusa blanca y su falda verde de cuadros provocando que estuvieran igual que sus zapatos, todo eso hacia que su corazón se oprimiera más de lo que ya estába debido a la situación en la que se encontraba pues enfrente de ella estaba el, ella casi no podía ver su rostro pues una sombra oscura se posaba en esa mirada que anteriormente la miraba con cariño, y que ahora solo era desprecio, eso era lo que ella sentía al estar en su presencia..

—— luffy ?! Por favor escúchame, ella no es una buena chica para ti, cuántas veces te eh dicho, por favor regresa conmigo, yo..yo te quiero, luffy! No puedo soportar verte con alguien más, dime qué tiene ella que no tenga yo, que tengo que hacer para que me ames..por favor..— dijo ella con la voz quebrada y sollozante entre lágrimas que se mezclaban con la incesante lluvia y la brisa del mar, el oscuro del cielo no hacía más que entristecer  su corazón, pero aún con lágrimas callendo por sus mejilla sus ojos se mantenían firmes y fijos en la persona que tenía enfrente,quien ante su pregunta abrió la boca para hablar..

—— lo siento Hancock, pero no te quiero ni te necesito, así que ahora deja de buscarme, me iré con la chica que está atrás de mi, y no es solo ella también ay otra, adiós y hasta nunca Hancock..—— dijo luffy y entonces se dió la vuelta dejando ver a la chica quien también tenía la mirada oscura, y una sonrisa burlona..

Hancock rompió en súplicas para después correr tras el, pero no logro nada, pues por más que corriera no los alcanzaba y cuando llegó al punto más alto de frustración..

Despertó de su sueño..

Abrió los ojos de golpe, pero sin hacer movimientos bruscos, y entonces se dió cuenta de que seguía en el mismo lugar que ayer, en su cama, tapada por sus sábanas rosas y lilas y rodeada de almohadas blancas y celestes, viendo el techo pintado de un beige con tonalidades distintas que parecían estrellas. Y ahí se dió cuenta que todo fue un sueño, Hancock se acomodo en su cama para quedar sentada, su rostro demostraba total confusión, y extrañesa, pero aún así se quedó sentada como si estuviera recordando cada cosa que vio en ese sueño, cada cosa que sintió, cada cosa que dijo, y entonces después de unos minutos, llevo sus manos a su cara para cubrir lo roja que se había puesto, y un mar de emociones inundó su cuerpo, vergüenza, enojo, tristeza, celos, confusión, y amor, su corazón latía rápido, su estómago estaba revuelto, se sentía tan agradable y tan horrible al mismo tiempo, y así no pudo levantarse de su cama toda una media hora pensado en lo que había soñado mientras susurraba para si misma..

—— como pude soñar eso?.. por qué le dije que lo quería?..por qué me puse celosa?..——

Hancock tuvo que levantarse de su cama,.pues ya era tarde para la escuela, no podía quedarse todo el día en su habitación pensando en su sueño, sin embargo mientras se arreglaba su cabeza seguía igual de confundida, provocando que hiciera todo mal, por ejemplo en el baño, uso un jabón corporal para cabello, no uso acondicionador, y cuando quiso ponerse su ropa, se puso la blusa al revés, cuando bajo no quiso desayunar y salió corriendo al auto, pero cuando estaba a punto de subirse, recordó que si se encontraba con luffy el le preguntaría si comió o no comió, y si decía que no, el la regañaria, así que regreso rápido a la cocina por algo de comer y luego correr al auto, una ves ahí, Sonia y Mary notaron a su hermana más preocupada de lo normal, se estaba mordiendo la uña del  dedo pulgar, su seño fruncido,.y su interminable silencio hizo que no quisieran hablarle todo el camino.