Estoy sentada junto a Emma y Brenda, en una cafetería cerca de casa. Estaba huyendo de ellas, pero extrañaba mis reuniones.
—Sara ya tienes el valor suficiente para afrontarnos —dice Emma tomando su cappuccino.
Brenda suelta una risa diabólica. —Emma, no creo que lo que cuente te sorprenda. Tienes ojos en todos lados—contesto tomando mi chocolate caliente. —Eres una perra —me lanza la rubia.
—Déjala —responde mi vecina—eso demuestra que está aterrada. No somos fáciles.
—Esto es mi culpa por conseguir amigas ninfómanas —lanzo para bromear aún más.
Ambas ríen fuerte, causando que las personas las vean con desaprobación.
—Pueden guardar silencio —pido.
La primera en parar es la rubia agarrando su barriga.
—¿Sara te hicieron oral? — interroga la rubia. Bajando la voz por suerte.
Emma arrima la silla más a la mesa.
—Sí, más de lo que se pueden imaginar—respondo exagerando un poco. Sé que no se lo esperaban, me quieren torturar. En eso consiste el interrogatorio, ponerme nerviosa —. Ésta mañana me despertó mi chico con su lengua allí.
Las dos se me quedan mirando, sorprendida por mi respuesta.
—Nuestra Sara es completamente de nuestro grupo —Expone Emma dándole las cinco a Brenda.
— Una última pregunta mi Sara. ¿Es grande?
—Grande y viril —contesto. Sé que lo que acabo de decir es como lanzar carne a los leones hambrientos.
La pequeña Sara al fin se expresa como se debe gritó Emma molestando un poco a los clientes.
—Hermana siempre supe que eras una chica sin tapujos, sólo era cuestión de tiempo para que te liberaras de ese papel de chica buena —respondió la rubia
—Creo que tienen razón, chicas, debo contarles así pierden su interés en torturarme. Porque negar que ese vecinito me ha besado hasta la sombra —río dándole otro sorbo a mi chocolate que se está enfriando.
—Pasando de tema —expresa la rubia, notando que no me afecta más su interrogatorio —Tristán quiere saber cuándo están libres para visitarlas, saben que es un poco intenso.
Tristán es primo de Brenda, nos conocemos desde la secundaria, es tan descarado como ella. Pero es parte de nuestra pandilla, se pierde temporadas largas y aparece cuando uno menos se lo espera.
—Dile que éste fin de semana —contesta Emma adelantándose a mi respuesta.
—Por mi bien Brenda, pero no debe traer a nadie que no conozcamos, me enfadé cuando la última vez trajo a esa tal Fifí, trató de robar las joyas de Emma.
—Eso ya se lo mencioné, estaba muy apenado con eso, por eso quiso mandarme a llevar sus disculpas—agrego Brenda.
Tristán es un muy buen amigo, pero sus aventuras siempre lo metían en problemas. Quería volver a verlo y darle un gran abrazo, nunca me gustaba estar molesta con él. Recuerdo que cuando lo conocí quiso coquetearme, pero se percató que no quise caer en sus juegos de una sóla noche, después fue él quien me acompañaba a rescatar a Brenda en muchas fiestas y peleas donde se metía, desde allí fuimos amigos y compañeros de baile. Saber que pronto regresaba, me alegraba.
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¡Saludos a todos!
Gracias por leer mi historia y comentarla, eso me da mucha ilusión, alegría y ganas de seguir escribiendo❤️❤️❤️
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Mi Vecino Me Enloquece ©
RomanceSinopsis Sara una madre soltera dedicada a su hijo y a su trabajo; todo cambia cuando un chico universitario se muda al lado de su casa. Sara ya no será la misma. Hunter cambia su vida por completo ¿Podrá salir de todo ese caos?