Tomar la mano de tu pareja es algo que la mayoría de las relaciones acostumbran a hacer, ya sea que estén en un lugar público, uno más privado o incluso porque sí. En el caso de este par de enamorados no sería ninguna de las tres opciones; simplemente porque los dos eran algo penosos –bueno, al menos el ojiazul lo era– como para dar ese "siguiente paso".
Cosa que a la rockera le irritaba un poco, pues tampoco es que hubiese razón alguna para tener pena o algo por el estilo.
— ¿Por qué tanto miedo, Yun? Sólo es tomarle de la mano y ya, no es nada fuera de este mundo. —Habló la fémina mientras se sobaba la sien.
— ¿¡Pero y si llega a molestarle!? ¡N-
— ¿Molestarse? Es tu novio, dudo que se moleste. Es mas, hasta creo que estaría rojo o yo que sé. —Le dijo irritada. —Además ¿No se suponía que ustedes solían ir tomados de la mano casi todo el tiempo? —Preguntó esta vez con una ceja arqueada.
—Ya, pero esto es--
Fue interrumpido al sentir a la contraria tomándole de ambos hombros suavemente, pero con molestia.
—No, no lo es —Suspiró. —Escucha, nada va a pasar ¿Sí? No te pongas a imaginar escenarios cuya probabilidad de que ocurran es bastante baja, sé que es difícil para ti porque no lo harás como su amigo, sino como su novio, créeme, también me sentí de esa forma cuando apenas había empezado mi relación.
El menor inhaló y exhaló profundamente en un intento de calmarse.
—Tienes... Tienes razón, tal vez sólo estoy exagerando un poco...
—No diría que exageras, pero cada quien su punto de vista. —Soltó al exorcista y sonrió levemente. —Ahora ve a prepararte, dijiste que hoy le habías invitado a ir a tu casa para pasar el tiempo ¿No es así?
Recibió un asentimiento.
—Bueno ¿A qué esperas? Ve que se te hará tarde.
[...]
La hora de la ¿Cita? –si es que se podría considerar una– llegó, el exorcista tenía los nervios hasta el tope, como cosa rara.
Se hallaba en su casa esperando a que su novio viniese, estaba sentado en el sofá, haciendo pequeños copos de nieve con su poder elemental para así poder distraerse, por lo menos un poco, de sus propios pensamientos. Dejó de hacer lo que estaba haciendo al escuchar el timbre de la casa sonar, supuso que era su pareja quien tocaba, por lo que se levantó rápidamente y fue a atenderle.
Abrió la puerta y le dejó pasar, el mayor le saludó con un pequeño beso en los labios, siendo correspondido, luego entró y se acomodó en el mueble.
—Estoy agradecido con que me hayas invitado a venir, la verdad necesitaba distraerme un rato. —Se recostó levemente en el brazo del asiento.
—No es nada, aunque cuando te lo dije no tenía idea de qué hacer... Y aún sigo sin tener ni una sola idea... —Bajó la mirada y comenzó a jugar con sus dedos, el espadachín soltó una pequeña risa, se le hacía tierno verle de esa forma.
—Descuida, si hubiese sido yo el de la invitación, probablemente sólo habríamos leído una novela o salido a algún lado como de costumbre. —Rascó su nuca mirando a otro lado.
—Pero tú al menos sabrías qué novela leeríamos, yo ni siquiera sé qué es lo que vamos a hacer en sí, en verdad, n-no lo pensé cuando te lo dije, n-nada más solté al aire un "¿Quieres venir a mi casa?" y ya...
— ¿En serio? —El menor asintió. Xingqiu volvió a reír. —Al parecer tenemos el mismo nivel de creatividad.
—Supongo...
—Entonces ¿No tienes nada en mente? —Recibió una negación como respuesta. —Vaya- déjame ver si de casualidad tu familia guarda algún juego de mesa o algo, sino, ya veremos qué se nos ocurre ¿Está bien? —Ahora recibió un asentimiento.
Se levantó del mueble y se dispuso a buscar entre las estanterías y cajones algo de interés para los dos, mientras su novio buscaba algunas cobijas, pues esa noche era bastante fría y, aunque aquello fuese algo beneficioso para su condición, no quería terminar pescando un resfriado de nuevo, por lo que arroparse igual no le haría tan mal.
Al final lo único que pudo encontrar fue un viejo juego de cartas de colores. Le interesaba jugarlo, sí, pero al ver que su pareja regresaba con varias cobijas, decidió mejor dejar el juego a un lado, y dedicarse nada más a darle mimos, como acostumbraba a hacer.
Suspiró, luego se acomodó nuevamente en el sofá junto a su contrario –quien después de traer las mantas ya se había acomodado–, luego entrelazó sus dedos con los de él en el proceso, cosa que causó un leve sonrojo en el pobre chico.
"Se suponía que era yo el que tomaría tu mano, ahora sí ahí quedó lo que (no) tenía planeado-"
— ¿Por qué estás rojo? Nos tomamos de la mano muy a menudo.
—S-Sí, pero esta vez, bueno, e-es diferente... —Recibió una mirada de confusión por parte del más alto. —Me refiero a que antes lo hacíamos como mejores amigos, ahora... P-Pues, lo estamos haciendo como pareja y-
—Así que era por eso. —Rio.
—Sé que no es nada por lo que ponerme nervioso, pero aun así yo-
—No, no, tranquilo, es entendible. —Le dedicó una cálida sonrisa. —Ahora disfrutemos de esta noche ¿Va?
Asintió, con eso su sonrojo disminuyó un poco. Correspondió al agarre de manos y se recostó en su hombro, su novio hizo algo similar recostando su cabeza junto a la suya. Luego de eso, la ronda habitual de besos y caricias comenzó.
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❝Amorometro❞ [Xingyun]
Random♡ || ¿Violentometro? ¿Qué es eso? Aquí sólo existe lo soft. Si la violencia se mide ¿Por qué no medir el amor también? -Contenido más que todo soft/fluff. -Uso de una que otra palabra fuerte. -Contenido ChicoxChico. -Actualizaciones lentas, tal vez...