Blind Love | FreenBecky

5.

Pov Becky.

- Becky....- dos toques en la puerta, por su voz supe que era mi madre, sin decir nada ella entró a la habitación. - No me gusta discutir contigo, solo quiero lo mejor para ti- se había sentado al borde de la cama mientras que yo le daba la espalda.

- No debiste de haberle hablado así a Freen y luego tratarme mal por solo querer una amistad con ella. - Escuché un suspiro de su parte, se recostó a mi lado y me di vuelta quedando en su pecho, me abrazo para empezar acariciar mi cabello.

- Eres mi única hija, estas indefensa en el exterior, ¿cómo crees que me sentí cuando Nam dijo que habías desaparecido? - tenía razón, me había olvidado de avisarle. - El doctor dijo que no hay posibilidades de que vuelvas a ver, se que es difícil para ti pero también entiéndeme, no quiero perderte. -

Otra vez escuchar esa noticia, mis padres hacían de todo para encontrar el mejor doctor para asi tener un operación y volver a ver, pero todos decían lo mismo "las posibilidades de que vuelva a ver, son muy pocas." Es por eso que me fui acostumbrado y a conocer los pocos lugares a los que tenía permitido ir.

- Olvidemos lo que paso ayer, ¿que tal si pasamos el día como madre e hija? Solo tú y yo, podemos ir a comer al mejor restaurante, pídeme lo que quieras y te lo comprare.-

- Sí quiero - sonreí y me dio un suave beso en mi frente- prométeme que me llevaras al parque en la tarde. -

-Sí es lo que quieres, esta bien. -

Pov Freen

- ¡Trapea más rápido! - la voz de mi jefe se hizo presente, se acercó a mi para regañarme - Sí quieres que te pague es mejor que hagas tu trabajo más rápido, no quiero que los clientes vean que tipo de personas tenemos aqui. - me miró de arriba y abajo, mi ropa estaba sucia y rota.

-Lo siento...- paso al lado mío golpeando mi hombro.

Sin darme cuenta el tiempo pasó rápido e iba 10 minutos tarde para ver a Becky, por eso me apresure a llegar.

Al estar en la entrada del parque sonreí al verla recostada en el mismo árbol de siempre, sus ojos estaban cerrados y el viento movía su cabello de una manera que la hacia ver como un lindo ángel. Camine despacio a su dirección, no quería molestarla tal vez se encontraba cansada. Cuando estuve frente a ella me senté viéndola aún sin notar mi presencia.

-¡Cuidado! - una bola de fútbol se acercó a nosotras, me apresure a cuidar a Becky, que al despertar se asusto. -¡Lo sentimos! -

-¿Quien es? - se separo bruscamente de mi, mandándome hacia un lado.

-Soy Freen - al escucharme note un alivio en ella.

-Me alegra de que hayas vuelto a venir. - Tape mi boca para no soltar un risa al ver que miraba al frente y yo me encontraba a su lado. - ¿Qué es tan gracioso?-

- Estoy aquí Becky, aquí - cuidadosamente tome su barbilla, para que supiera donde estaba, se acomodo esta vez mirándome fijamente a mis ojos mientras sonreia. Sintiéndome nerviosa, limpie mis manos sudorosas, ella es realmente una hermosa mujer y jamás me cansaría de decirlo.

- Esto es para ti. - me extendió una cesta, mire lo que había dentro y eran galletas.

- Comamoslas juntas - iba abrir un parquete pero rápidamente me detuvo.

-No quiero, quiero que hagamos otra cosa - le respondi con un sí, no sabía lo que haría. - Quiero tocar tu rostro y conocer como eres ¿puedo? -

- No hay problema - sonreí y tomé su mano, para ponerla en mi mejilla - Puedes tocar lo que desees.- ella asintió y sonrió.

Empezó acariciando mi mejilla por unos segundos, me sentí bien por su tacto incluso cerré mis ojos luego fue por mis orejas donde hizo lo mismo, su mano se fue hacia mis ojos para después bajar a mi nariz, y por último su mano bajo a mis labios donde al sentirlos se detuvo pero mantenía su dedo en ellos. Vi como relamio los suyos. Baje mi mirada viendo los de ella, pensé tal vez deberían de sentirse suaves y dulces, empecé acercarme poco a poco hasta que su dedo se movió al centro de mis labios.

- Siento tu respiración cerca de mis labios..- moví mi cabeza aun lado, mi rostro empezó a enrojecerse. - Freen, aunque no puedo ver, eres muy hermosa - sonrió y con ello empezó a dar caricias en mis labios, empeorando mi sensación de acercarme a tocar los suyos, quería sentirlos, saber a lo que sabía su labial color rojo, incluso si ella besaba bie-

-Ejem...- alguien tosió delante de nosotras, voltee rápidamente viendo a una mujer supuse tenía mi misma edad, se encontraba de brazos cruzados, escondió su enojo en una sonrisa pero que se notaba. - Estas muy cerca ¿no crees?- Me separe con rapidez levantandome. -Tu rostro esta como el de un tomate. -

Su risa se hizo sonar por todo el parque, me sentia apenada por habernos encontrado de esa manera y también por haber tenido ese pensamiento absurdo con Becky, no tuve que haber pensado de esa forma.

-¡Nam!-

(....)

-Así que eres Freen..- me miro de arriba hacia abajo, empezó a caminar dando vueltas a mi alrededor, Becky se mantenía tranquila y solo bebía el jugo que había traído esta persona, que no se miraba como su madre. - Supongo que está bien -

Se sentó en la banca, mis nervios crecieron, no quería que Becky se enterara de quien en realidad soy porque seguramente me insultaria y despreciaria como todos.

-Freen tiene mucho dinero, dijo que tenía un nuevo auto ¡fue a comer en el restaurante de papá! - su amiga volteo a verme, agache mi mirada avergonzada, mi apariencia decía todo lo contrario. - Nam..- se acercó a su oído - Freen es buena persona, confía en ella. -

-No tengo nada que decir ahora, Becky tenemos que irnos, tu madre dijo que solo podías estar poco tiempo y nos esta esperando. - asintió y se levantó, junto a Becky, quedé cabiz baja pero su mano en mi hombro hizo que la mirara - tu vienes con nosotras. - me sorprendi al escucharla.

-¿¡Enserió!? - Becky se sostuvo de mi brazo dando pequeños saltos.

Las tres nos subíamos al auto, nunca antes estuve en uno bastante lujoso y miraba con emoción todo, Becky estaba en la parte de atrás y en el camino se fue durmiendo, mientras que yo y Nam estábamos adelante.

-¿Por qué le mentiste de esa forma? No tienes nada de lo que dijiste. - guarde silencio sin saber que decir. - No te lo tomes mal, solo quiero saberlo, Becky es mi mejor amiga y me sorprendi al escuchar que se relaciono con alguien más que no sea yo. - la vi sonreír e hizo que me relajará - No me importa si eres pobre, digo, eso es lo de menos y si ella confía en ti ¿por qué yo no? - dio unas fuertes palmadas en mi hombro.

-¿Podrias no decirle nada? - asintió.

- Tampoco le diré a la madre de Becky - sonreí -

- Gracias...-

-Vamos, ustedes me recuerdan a la dama y el vagabundo, de mundos diferentes pero que de igual forma, se terminan enamorando.